Cap 3 "Les Presento a Costa"

27 0 0
                                    

Se que me odiaras x haberme tardado mucho con el capitulo pero disculpame... Nose que pasa que no me carga los caps...

Disfrutaa!! Aqui aparece uno de los personajes que mas me gustan!!

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

Lo conocí hace unos dos meses en las vacaciones, durante la visita a la familia de mi papá en Grecia. Tengo una convinacion de nacionalidades peculiar: papá es griego, mamá es argentina y Paula y yo somos españolas.

Un día una de mis primas me dijo que vallamos al puerto a ver a su novio que era pescador al principio no queria ir con ella pero despues termino por convencerme. Al llegar al puerto vi una seguidilla de pequeñas tiendas, algunas vendían ropa, otras comida y bebidas para los pescadores y algunos, recuerdos y esos juguetes que sabes que no van a durar pero que igual compras. Noté como mi prima se ponía un poco nerviosa y miraba barco por barco.

-Calma, Helena. Tu novio debe de estar por aquí ¿Le dijiste que vendrias hoy?

-Claro que si.- en su voz se notaba la desesperación - Quedamos en vernos aquí y di...- se quedo callada, una sonrisa se le formo en sus labios pintados de rosa y sus ojos brillaron de forma risueña. Sin duda ya lo vio.- ¡Ahí esta!

Y salió corriendo.

La verdad era que Helena era, de todas las primas que conocí aquí, la que mejor me caía y ademas teníamos la misma edad por lo que era facil congeniar con ella. Éramos muy distintas; ella tiene el pelo negro y ondulado, ojos azules, unos labios carnosos y rosados naturalmente, unas pecas y oyuelos que le deban un aspecto adorable. En verdad era muy bonita.

No me moleste en seguirla, sabía que ella vendría a presentarmelo y, como supuse, ella me toco el hombro y traía una sonrisa de oreja a oreja, y de su brazo traía a su novio. Y Haci fue como comenzó todo.

Nunca fue mi intención, no me lo propuse, pero al mirar al chico me sentí verdaderamente atraída hacia el. Creanme que cualquiera de ustedes lo hubiese hecho su piel bronceada, sus ojos y cabellos negro mas su sonrisa llena de vida y buen humor hacia que a cualquiera le temblaran las piernas. Se hacerco y me dio dos besos en las mejillas. Yo era inncapas de hablar.

-Kalimera- Que voz tan sexy y su acento ¡Dios mío! - Helena me ah hablado maravillas de ti, Alexandra. Y no me mintio, eres bonita.- mis mejillas se pusieron rojas y el rió.- Me llamo Constantin, pero los amigos me dicen Costa.

Después de esto vinieron mas visitas al puerto o encuentros en el mercado, hasta que un día me cito en la playa.

-No le digas nada a Helena - me pidió -, necesito hablar seriamente contigo.-Entiendo - asegure, aunque estaba confundida

- ¿A que hora?

-Ven a las diez de la noche.

-Esta bien nos vemos.

No estaba enamorada de Costa para nada, solo me sentia atraída, jamás trataría de quitarle el novio a mi prima por mucho que me guste, nunca haría ese tipo de cosas y menos con alguien de mi familia. Se que ir a ver a Costa en la playa en la noche seria practicamente traicionar a Helena, pero nesecitaba saber que quería decirme Costa, ademas faltaban dos semanas para volver a España.

Cuando todos estubieron en sus cuartos y me asegure de que Paula estubiera dormida me levante y me deje puesto el vestido blanco y unas chanclas de playa, y salí. Después de media hora de caminata llegue al lugar que donde debía ver a Costa.

-¡Costa!- grité - ¡Ya estoy aquí!

Pegue un grito al sentir unas manos en mi cintura y sin pensarlo dos veces le di un codaso y luego una patada en la entrepierna. Iba a darle otro golpe cuando escuche que decía:

-Alexandra, soy Costa- la voz era muy baja por la falta de aire.

-Lo lamento pero me asustaste ¿Porque lo hiciste? Dejalo ahi no me digas. ¿Porque me citaste aquí?

Me miro a lo ojos y se puso serio. No sé porque pero en ese instante me di cuenta de que fue un gran error haber venido. Costa tomo mis manos entre las suyas y las miro mientras daba un suspiro y comenzaba a hablar.

-Lexie, se que esto puede sonar raro, porque nos conocemos hace unos meses y todo eso y ademas soy el novio de tu prima Helena pero...- me miro de nuevo a los ojos - pero creo que estoy enamorado de ti, Alexandra.

-Costa. No pu...- me puso un dedo en los labios.

-Shh, no digas nada, por favor. Deja que termine de hablar. - el agarre de sus manos se aflojo, pero cuando pensé que me iba a soltar entrelaza sus dedos con los mios - Ese primer dia que te vi algo me paso, juro que no sé que ni como ni porque pero sentí que me gustaste y sé que a ti te paso lo mismo. Vi como me mirabas, Alexandra. - sonrió - Al principio pensé que no pasaría de eso o que solo era temporal, pero lo que sentia por ti no se fue ni desapareció de ahí, al contrario, cada dia se fue incrementando y a medida que te iba conociendo me fui enamorando de ti, Lexie. Se que sientes lo mismo, se que me amas.

Me quede mirandolo a los ojos, sus palabras destilaban sinceridad y me hacia sentir rara. No puedo mentirle, no lo amo.

-No, Costa. Yo no te amo. Admito que si me siento atraída hacia ti pero no te amo. No lo hago y no podria hacerlo jamás ¡Eres el novio de mi prima!

-Pero no la amo.

-¡Ella a ti te adora! - le grito - Jamás podria hacerle eso.

-Las cosas entre Helena y yo no van bien desde antes de que tu vinieras, lo digo en serio. Dame una oportunidad, vas a ver que no te arrepentirás.

-No puedo. Esto no puede ser yo...

Sus labios se estrellaron contra los míos, no pude resistirme y le correspondi al beso. Su lengua y la mía chocaron y se movían a un ritmo frenetico y apasionado, sus manos, grandes y fuertes, me tomaron de la cintura acercándome mas a el y las mías se enredaron en su cabelllo negro. A pesar de lo bien que me sentí me separe de el. Costa trato de volver a retomar el beso.

-No, no, no, no.

Negando con la cabeza me fui corriendo.

-Alexandra!- lo oí gritarme - ¡Alexandra! Vuelve, no te vallas.- no me di la vuelta y seguí corriendo - ¡Te amo y te juro que tarde o temprano estarás conmigo!

Al llegar a la casa no pude dormir en toda la noche pensando en lo que habia pasado y por la mañana hable con mis padres y les dije que queria volver a Madrid. Me costo mucho, pero los termine convenciendo y por la tarde estaba tomando el ferri hacía Atenas. Cuando puse un pie dentro de el vi a Costa mirando desde el puerto y despidieendose con la mano.

Y ahora Costantin Demiris esta aquí en España, ayudando a levantarme del piso, en mi escuela y mirándome a los ojos con una sonrisa y una exprecion de "te lo dije"-Al fin te veo de nuevo, mi bella Alexandra. Te juré que estaria contigo.

Make Me Wanna DieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora