Capítulo 5

38 4 3
                                    



Madison

Había pasado una semana desde que Brian le había dado su número a Caden y dos semanas desde que era alumna nueva, y en todo ese tiempo aún seguía sin hablarle a alguien, a menos que fuera una de las cocineras de la cafetería o Molly, la secretaria del director, o a los profesores y Caden, y él no contaba porque el que le dijera que se apartara de mi lado no era precisamente una conversación.

— ¿Madison? —alzo mi mirada en cuanto escucho como dicen mi nombre, me topo con un chico de cabellera un tanto extraña porque no sabía si era rubio o pelirrojo, tal vez era ambas.

— ¿Si? —era muy obvio que iba a responder con duda, era, en teoría un extraño para mí.

— ¿Si quiera préstate atención a lo que dijo el profesor?

—Sí, que debíamos formar parejas para realizar la actividad.

—Cosa que no has hecho, por lo tanto el profesor me ha mandado a estar contigo para hacer el trabajo.

—Le había dicho al profesor que iba a hacer el trabajo sola.

—Sí, y el profesor decidió ignorarte, así que me quito a mi pareja para estar contigo.

—Pues no quiero estar contigo.

—Ni yo contigo.

Sin palabras. En definitiva este chico era algo peculiar, era como yo, solo que con pene. Y ahora asociar la palabra pene y el chico hacia que inevitablemente baje mi mirada hacia la entrepierna del chico.

—Nada mal... —digo en voz baja y para mí; regreso mi mirada al chico y este solo me mira confundido, menos mal que este chico no se llama Edward Collen o leería mis pensamientos y estoy muy segura que se espantaría con ello, porque si, también las chicas pensamos lo bueno que están los chicos.

— ¿Que has dicho?

—Nada. Ahora, tú sabes mi nombre pero yo no sé el tuyo y si vamos a ser este trabajo juntos es justo que sepa cuál es tu nombre.

—Anthony Thompson. —dijo para sentarse a mi lado y sacar su libreta de apuntes.

—Thony.

—Anthony. —me dice serio, le sonrió un poco y aparta la mirada para después de unos segundos sonreírme.

—Ah, mira, si sabes sonreír.

Después de ello nos pusimos manos a la obra con el trabajo, hablábamos lo necesario para que pudiéramos hacer el trabajo pero yo no podía apartar la mirada de él, creo que ahora sabía lo que habían experimentado Caden y Nathan con el cabello de mi hermano, porque me pasaba lo mismo.

Después de que la clase acabara salimos del salón, Anthony iba frente a mí y cuando iba a salir del salón se detuvo de pronto haciendo que chocara contra su espalda, pero no se mueve.

—Dice mi tía que eres un idiota y que te preste dinero para tu almuerzo. —escucho la voz inconfundible de Henry.

—Dudo mucho que mi mamá te haya dicho eso, pero igual gracias por el dinero. —toco su hombro y se da la vuelta mirándome con el ceño fruncido. — ¿Qué?

—Estas en la puerta y no dejas salir, así que muévete. —se hace un lado y me topo con la mirada de Henry que solo me sonríe, le regreso la sonrisa dudosa y comienzo a caminar, no pasa mucho cuando Henry se pone a mi lado.

— ¿Cómo vas con adaptarte a la escuela? —me pregunta y me doy cuenta que los estudiantes se hacen a un lado para no estorbarle, el resto que está lejos de él me miran de forma extraña, de seguro aun no superan el hecho de que me haya presentado con una pijama.

—Supongo que normal. —veo a unos cuantos hablar y susurrar mientras seguimos caminando. Los adolescentes somos extraños.

A lo lejos puedo ver como Caden va de la mano con Alice, la relación de ambos era más rara aun.

>> ¿Que se supone que son Caden y Alice? —me detengo y le pregunto a Henry.

—No me digas que te gusta Caden. —rueda los ojos y se cruza de brazos frente a mí. —Vas a hacer de esto lo típico del chico popular y la chica nerd.

— ¡Que! —exclamo sorprendida y con la boca ligeramente abierta. — ¡No soy nerd!

—Claro que sí, te ves como una nerd. —sin poder evitarlo le suelto un golpe en su abdomen, y ¡Santos abdómenes Batman! El que tiene Henry sí que es un abdomen.

— ¿Me acabas de manosear? —me pregunta con una muy graciosa mueca que hace que le sonría de forma inocente.

—No, pero ese no es el punto, no has respondido mi pregunta. —en realidad puede que si lo haya manoseado, pero solo un poco.

—Bien. Ellos son pareja, desde hace tiempo a decir verdad, son como la pareja estrella de la escuela. —rueda los ojos con algo que detecto como fastidio.

—Pero ella te mira como yo miro a Shawn Mendes.

— ¿Con los ojos?

—Con amor, idiota, todo el mundo ve con los ojos.

—No todo el mundo, los ciegos no pueden ver.

Muchas veces dudaba de la estupidez humana, pero entonces alguien a mí al rededor me recordaba la estupidez humana cada vez estaba peor y en esta ocasión fue Henry.

—Que... Extraño eres. —le respondí para evitar insultarlo o golpearlo, cualquiera iba a funcionar igual.

—Hola chicos. —ambos nos giramos hacia Caden y Alice que se nos acercaron mientras hablábamos y como no es nada nuevo, Alice mira a Henry de una forma soñadora mientras él aparta la mirada.

—Anthony va a dar una fiesta. —comienza a decir Caden y sonríe un poco al ver como lo miro mal. —Seria genial que nos viéramos allí. —mira a Alice que esta algo seria y después mira a Henry. —Es... Es para ambos.

—Soy el primo de Anthony, es obvio que voy a estar allí. —le responde Henry.

—Si no tengo nada más que hacer, tal vez vaya.

—Genial. —sonríe y la pareja se marcha, me giro hacia Henry y me cruzo de brazos. —Caden es raro.

—Caden es un idiota.

—Tú eres un idiota.

—Yo soy un... —se detiene y me mira con ojos acusadores, sin decir algo más se marcha.

—Y tu primo también es un idiota. —murmuro para mí. Creo que la mayoría de las personas son idiotas, me incluyo en esa lista.





Y hasta aquí el capítulo de la semana, espero que les haya gustado. Por cierto, espero que se vayan preparando para lo que viene, estoy segura que se van a llevar muchas sorpresas *guiño, guiño*

Por cierto, quiero dedicar este capítulo a @Lorena_186 me encantaron tus comentarios y me hicieron reír un montón, gracias por el apoyo y por cierto, también amo a Deamon, es un sueño *-*  

¡Nos leemos la próxima semana!

Leslie Paola García

¿Cliché? | Actualizaciones lentas | BorradorWhere stories live. Discover now