Dolor

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—¿Por qué? —Mi voz resonó en el túnel mientras lentamente volteaba hacia él, encontrando sus ojos oscuros. Noté el corte en su camisa por un breve segundo, pensando y aún creyendo que una parte de él era Stiles pero no. Solo era el Nogitsune, un espíritu oscuro que llevaba a Stiles como un traje de carne —¿Por qué soy la fuente principal de todo?





—Noshiko te contó sobre este lugar y que pasó aquí con los demás, con ella misma. Conmigo —  Su voz se oscureció cuando se mencionó a sí mismo —Ella te contó lo que sintió cuando supo que mi cuerpo carbonizado estaba junto al de ella, la admiración, el poder, la amistad, la honestidad, la bondad, el anhelo por alguien y amor. Ella te dijo que yo también necesito eso. Necesitaba ese vínculo especial con cierta persona y Stiles me dio la persona perfecta. Tú. 





— Y sabías que era por sus sentimientos — Mi voz se quebró ligeramente, lo que hizo que se riera en un tono descascarillado — Por su mente — Agregué. Comencé a sacudir la puerta de nuevo. 




— Ah, ah — Me detengo —¿A dónde iras? Pensé que querías la verdad?  Srta. ___ Elena McCall —Se rió. Mis manos estaban agarrando los barrotes con más fuerza.





—¡No me gusta estar atrapada! —Mi mano derecha, soltó su agarre mientras golpeaba las barras, haciéndome gruñir y al menos tratar de calmarme de una manera posible. Mi enojo se suavizó cuando mi cerebro hizo clic, permitiéndome mantener la calma por un momento. El me mira como si fuera un pequeño animal indefenso. 





—Tú eres  única. ___, lo eres desde el día en que tomaste tu primer aliento de vida —Él dijo poniéndose de pie. Mi cabeza se inclinó hacia él, un poco confundida. Bajó acercándose a mí, lo que me hizo presionar más hacia contra la puerta con barrotes, apretando mi garganta —El Coyote, el Zorro, el Cuervo. Todos tienen hambre — Luego se detuvo—Soy igual. Sólo anhelo algo un poco diferente —Sus ojos se posaron en mí,  su pecho estaba a solo siete pulgadas de tocar el mío —Yo como lo que sientes —Rápidamente, giré agarrándome a la puerta, con mi interior gritándome y mi mente volviéndose loca. Void Stiles se estaba acercando demasiado y realmente quería desaparecer de algún modo, o al menos, gritar por Scott, pero no podía obligarme a hacerlo y me sentía completamente vulnerable. Justo entonces, en un movimiento rápido,  mi cabello fue recogido hacia atrás con una mano cálida y áspera. Stiles colocó su rostro contra el mío junto a mi oreja. Él olfateó y yo gimoteé, temblando y quedándome en mi lugar mientras cerraba los ojos con fuerza. Sus labios bajaron a el lóbulo de mi oreja, pero subieron, deslizándose contra mi piel —Y soy insaciable —Se sacudió a sí mismo, vibrando de placer mientras lo decía y tomó un gran aliento, presionando su rostro en un lado de mi rostro —Ahí es donde entras  —Él dice, retrocediendo  para darme espacio para moverme. Todavía me quedé en el lugar, un poco asustada con una lágrima rodando por mi mejilla. 




—¿Cómo? Cómo puedo...





—  ¿Quieres saber por qué usé luciérnagas para que encuentres a Stiles o al menos estar cerca de él? 




 —Para engañarme y hacerme creer que era un Oni —Contesté débilmente.





 —Eso, pero hay otra razón. ¿Lo sabes? — Negué con la cabeza —¿Estás segura de que no quieres adivinarlo? Podrías hacerlo bien al primer intento —Negué con la cabeza otra vez, quedándome quieta y apretando mi agarre en la puerta —Verás, ___, la razón por la cual las luciérnagas masculinas brillan y parpadean sus luces es para alertar a sus depredadores y también se iluminan para encontrar a una hembra que tenga exactamente el mismo patrón de luz que ellos. Y cuando la encuentran, señalan a la hembra y ella se convierte en su compañera... y, en este caso — Se acercó a mí nuevamente, inclinándose hacia mi oreja —Una novia —El nudo en mi garganta, se balanceó, deslizándose por mi garganta y más lágrimas se deslizaron de mis ojos —No es solo el dolor del que necesito alimentarme — Su voz áspera habló, su aliento caliente golpea mi hombro y mi cuello —Eres la compañera que necesito — Él sonrió levemente, pasando su mano por mi brazo — Y el sexo es otra forma de alimentarse en la mitología del Kitsune en realidad, es la forma más común, pero eso es porque los Kitsunes somos criaturas que disfrutan las sensaciones —Me mordí mi labio inferior  mientras lo miraba con mis ojos llorosos — Oh, pequeña paloma, no llores —Levantó la mano, secando las pocas lágrimas que caían —Tienes que estar dispuesta  hacerlo, al igual que Stiles estaba dispuesto a que yo tome su cuerpo para que Oliver no te lastimara con el taladro — Mis vidriosos ojos lo estaban mirando—Preferimos socios dispuestos. Aquellos más dispuestos a estar con un Kitsune no se ven afectados tanto por los efectos de hacer el amor. Además, soy Nogitsune, lo que significa que para alimentarme, tendré que decirle a mi compañera lo que se necesita para aliviar el placer y el dolor, como una recompensa por el servicio que brinda el compañero.




Dos Lados; Stiles Stilinski Y TuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora