Y ahora estoy en la casa de mi abuelita, bueno, fuera. Al parecer ha salido. No calculé bien el tiempo, se supone que tengo que estar en mi casa a las 7 y son las 3:34 p.m. Cosas que me pasan solo a mí. Pero... ¡tengo mi jodida ropa de chico! Pero estoy sentado sobre una piedra... ¡Pero tengo mi jodida ropa de chico! Pero me duele el trasero... ¡Pero tengo la maldita ropa!
Compré como cuatro camisas. Dos boxers. Y una pantaloneta/ short/ pantalón corto... Lo que sea. Quería calcetines... peeero... Al parecer hice mal los cálculos. Otra vez. Solo tengo que caminar hasta mi casa porque no me quedó para un taxi... Pero no importa me hace falta caminar.
Tengo un pequeño problemilla... llevaba la mochila vacía cuando salí... solo espero que mi madre no note que parece que robé pelotas.
Pero viéndole el lado bueno a las cosas... No he ni desayunado, pero tengo donde sentarme, buen clima, felicidad interior, y no tengo que escuchar gritar a mis compañeras hasta las 6 de la tarde.
Pero me sigue doliendo el trasero.
Ya encontré un lugar más cómodo.
So, esto no lo puedo publicar hasta estar en mi casa, así que escribiré hasta que mi móvil ya no aguante.
Esto será largo.
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