Capitulo 8

445 39 33
                                    

"Se sintió como si mi corazón

atado hubiera sido liberado" FM.

:

Fighter dejo que la boca inexperta de Serena acariciara sus labios, la pasión que ese acto habia encendido, hizo que sus manos que en un inicio se encontraban estiradas a sus costados, comenzaran a cobrar vida propia, tomando la cintura de Serena, atrayéndola a su cuerpo.

-Abre tu boca- fue su orden.

Serena tembló ante lo que significaba eso.

Pero no dudo, y entonces, los fuegos artificiales vinieron a su pecho, y como si de una magia se tratara, el viento entro por el gran ventanal, trayendo con el, restos de las flores de cerezo, y moviendo ambas cabelleras, azabache y dorado, como si hasta ellas quisieran acariciarse.

Fighter sintió en ese momento, querer todo de Serena, sin importar su oscuro pasado, mandando a sus razones de no tocarla hasta el otro lado del mundo.

La danza de sus lenguas, una mas experta que la otra, sus brazos buscando que sus cuerpos se fusionaran, con la espalda de Serena pegada a la pared, el pecho de ambas uniéndose, suspirando, apretando los ojos, no fuera que despertaran de ese sueño.

Tan contentas estaban, que hasta que Artemis se apareció tras ellas, fue cuando se dieron el permiso de respirar.

-Señoritas- dijo el pobre hombre tratando de simular que nada habia visto- tienen visita.

-¿Tenemos?- pregunto Serena con la cara toda roja, sin poder creerse lo que recién habia pasado.

-Su hermana esta afuera, ¿puedo hacerla pasar?

-¡Lita!- exclamaron ambas.

-Si.

-Que pase, Artemis- ordeno Fighter.

-Enseguida.

Ambas por fin se miraron a los ojos.

Serena busco en esa mirada de zafiro un porque de todo, una esperanza, pero parecía que solo había duda.

Fighter apretó las manos de Serena delicadamente y después la solto, camino apresurada, seguida de una cabizbaja y triste Serena.

-¡Lita!- exclamo Fighter emocionada de verla, aunque esa emoción ya no era la misma.

-¡Amiga, hermanita!- dijo viendo a la rubia aparecer tras de la azabache.

Artemis sirvió té para todas, y también dejo unos pastelillos.

-Es inesperada tu visita, me hubieras avisado- comento Fighter.

-Bueno, solo quería darles una sorpresa, antes de que ya no pueda moverme- dijo señalando su panza.

-¿Ya saben que será?

-Al principio creíamos que era niña, luego niño, en realidad se esconde, es un bebé travieso- contesto sonriendo.

Serena se quedo en silencio, hasta que fue Lita quien se dirigió a ella.

-Perdóname, por no venir antes.

-No te preocupes, estoy bien.

-Bueno, lo veo, luces muy diferente, casi no te reconozco, ahora entiendo a Andrew.

Serena se hizo mas pequeña en su asiento, ¡claro que lo vio y ni lo saludo, como si fuera un extraño y no el esposo de su hermana! ¿Seria que estuvo tan enojada en ese momento, que lo desconoció? Se sintió una reverenda tonta.

-Ah, dile que me perdone, yo...

-No te apures, el mismo no se dio cuenta que eras tu, hasta que regreso a casa, pero, me dijo algunas cosas raras, ¿ya tienes novio?

Idol PopDonde viven las historias. Descúbrelo ahora