Otro día en la casa Halackti. Paz y tranquilidad se respiraba.
Yugi estaba haciendo el desayuno y Atem estaba durmiendo al igual que sus hijas, Kira estaba levantándose y se dirigió al baño para lavarse la cara, cuando termino se dirigió a la cocina encontrándose con Yugi quien, le sonrió y le dijo que se sentara, que ya pronto terminaría con el desayuno. Esta le hizo caso sentándose en un lugar de la mesa. Yugi sólo sonrió y le puso un plato con arroz, otro con algo de pescado y un poco de té en un vaso de vidrio.— No es lo mejor que haya cocinado, pero espero y te guste — comentó la mayor de las dos para luego darle una sonrisa.
Kira sólo le asintió antes de empezar a comer aquel desayuno, no pasaron ni cinco minutos cuando empezó a comerlo por lo bueno que estaba.
— Esto es delicioso — comento mientras terminaba de comer un pedazo de pescado, pequeñas lágrimas de felicidad se asomaban por sus ojos. Yugi sólo sonrió mientras la miraba mientras pensaba en como se parecía a su madre cuando eran sólo unos adolecentes.
— me alegra que te guste — dijo sonriente para luego dirigir su mirada a la entrada de la cocina en donde se encontraban unas recién levantadas y adormiladas Yumi y Miyu — Hola Yumi, Miyu tomen asiento, les serviré de desayunar — comentó para inmediatamente dirigirse a la cocina y servirles a sus hijas.
— Buenos días — susurro Kira mientras terminaba de beber un poco de té.
— Buenos días Kira, ¿dormiste bien? — Pregunto alegre Miyu mientras tomaba asiento al lado de Kira.
— ¡Por supuesto! — Contesto energética Kira — tengo la suficiente fuerza como para correr un maratón —.
— Me alegro y que tal si mejor te enseñamos el lugar, de paso vamos a la sala recreativa a jugar un poco — comentó Yumi de la nada, también tomando asiento enfrente de Kira.
— Me agrada la idea — contesto Kira, para esos momentos Yugi ya había llegado para dejar el desayuno para sus hijas y también el suyo. La plática era amena con las chicas y Yugi le decía a Kira el como podía ver más fácil a Kaiba sin tener que hacer tanto papeleo, todo normal y entre risas hasta que escucharon las pisadas apresuradas de alguien y el como habrían la puerta del comedor bruscamente, era Atem quien, llegaba tarde al trabajo.
— Cariño, creí que hoy era tu día libre — dijo Yugi sorprendida al ver a Atem, quien se había colado en la cocina para comer lo que hubiera a su alcance.
— yo también lo creí — dijo Atem comiendo rápidamente un poco de sopa — pero me llegó un mensaje de la empresa diciendo que había junta de emergencia, al parecer Seto quiere hacer no se que cosa en el extranjero e invitó algunos aliados de otros países y tuvo la brillante idea de decirme apenas hoy — agregó mientras terminaba el té en un parpadeo, se levantaba de su lugar y abrazaba a Yugi para luego darle un beso corto e irse volando de ahí con su maletín despidiéndose de pasada de sus hijas y de Kira quienes se encontraban entre reír o seguir conversando.
— No sabía que su padre trabajaba con mi pa... digo, con el señor Kaiba — comentó Kira una vez que Atem se había ido de la casa, aún no sabía cómo referirse a Kaiba.
— Sí, es el segundo al mando en la empresa pero su jefe siempre le esconde asuntos importantes como hoy — comentó divertida Miyu.
— ¿y siempre le pasa esto? — Preguntó.
— algunas veces, cuando no es tan importante su presencia — respondió Miyu.
— Pero bueno, que tal si ya nos vamos — comentó ansiosa Yumi mientras recogía sus trastes junto con su hermana y Kira. Las tres se fueron a riba para cambiarse pues Yugi las había detenido en lavar los trastes, pues ella se ofreció a hacerlo. Una vez ya arregladas y listas salieron de la casa despidiéndose de Yugi y prometiendo le que volverían a las 8 a más tardar.
— Bien, ¿dónde queda esa sala recreativa de la que tanto hablabas Yumi? — preguntó ansiosa Kira mientras caminaban junto a las hermanas Halakti.
— está a dos cuadras de aquí — respondió Yumi.
— vamos, luego iremos a hacer cita para que puedas ver a el señor Kaiba — comento feliz Miyu mientras tomaba de las manos a su hermana y amiga — ¡debemos ir rápido! — dijo para ir a paso veloz casi corriendo.
— nos vas a tirar — regaño su hermana.
— no es mi culpa que no camines rápido —.
Kura solo veía todo en silencio, un sentimiento cálido broto de su pecho, se asemejaba mucho cuando era una niña y jugaba con su madre o su tía. Ese sentimiento de familia, algo que sin querer, comenzaba a extrañar.
-"¿tú me querrás tanto como lo hizo mamá, papá?"- Se pregunto en sus pensamientos dejándola algo nostálgica. Una parte de ella quería ser amada por la única persona que compartía sangre directa, quería que los sueños que tuvo de infante se hicieran realidad.
Su mirada cambio a una nostálgica y a la vez preocupada, ¿Qué pasaría si su padre la rechazaba? ¿Estaba lista para ese momento?
Seguiría de esa manera, si no fuera porque Yumi le hablo tiernamente.— Sea lo que estes pensando, desechalo — dijo dulce pero a la vez sería — no importa que pase, nos tendrás a nosotras y creeme que no dejaremos que te deprimas — aquellas palabras le hicieron sentir mejor y, con algo de esfuerzo alejo sus temores para poder divertirse un momento con sus nuevas amigas, estaba segura que, con las personas que tenía a su lado podría enfrentar a su padre.
O eso era lo que ella esperaba.
Continuara...
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Jajajajajaja ya sé cómo seguirá esto y debo decir que no será bonito.Joey: desde que ví que estoy muerto supe que no sería lo mismo.
Kaiba: y porqué tengo que ser el malo yo
Porque te prestas querido ;)
Kaiba: 7-7
Bueno, sin más, espero que les guste, trataré de actualizar antes, pero eso sí. No dejaré está historia, pues es algo que me ayuda a contar aquello que siento muy en mi interior.
Sin más nos vemos ;)
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LA HIJA DE SETO KAIBA. (Editando)
FanfictionDespués de tanto tiempo por fin podre conocerte.. Padre... Espero que te acuerdes de la promesa que le hiciste a mi madre.... ************************************************** Suspenso.... Si quieren saber mas... Entren y lean... ^^/