10

864 68 22
                                    


- Bueno, te quería hablar de algo.

Fruncí el ceño en señal de confusión.
¿Hablar de algo? ¿Había hecho algo malo?
¿Tae le habría dicho alguna broma pesada de nuevo?
¿Quizás.. No podría verlo más?

Ay, Emi, deja de ser tan paranoica.

Debería dejar los doramas un tiempo, me estaban afectando.

- ¿Algo? - pregunté algo nerviosa mientras me calentaba las manos con mi chocolate caliente. No era de cafés como las otras chicas de mi "edad", o cómo mi madre decía.

El pareció dudar ante mi pequeña pregunta, estaba nervioso, se le notaba al ver el acto de morderse su grueso labio inferior.

Agh, sólo ese pequeño movimiento hizo a mi corazón saltar y golpear la pared de mi pecho.

- Yo... - abrió la boca pero las palabras no salieron, ¿Por qué estaba tan nervioso? ¡La qué debería estar arrancandome los pelos soy yo! - ¿Te.. gustaría conocer a mi familia?

Fue mas bien un murmullo, pero lo escuché perfectamente.

Conocer.. ¿A su familia?

Se me escapó un grito ahogado y de la sorpresa derramé mi chocolate, tirándolo sobre mí. El líquido ardiendo quemó mi piel debajo de la tela y se me escapó un grito de dolor.

Ardía como los mil demonios.

- ¡Mierda! - exclamé mientras me levantaba y me alejaba lo más posible a la taza qué ahora yacía tumbada sobre la mesa de caoba. Sople repetidas veces sobre mi camisa, donde ahora yacía una gran mancha de la bebida, genial.

Jimin pareció reaccionar y repitió mi acción, acercándose peligrosamente a mi anatomía.

- ¿Estás bien? - preguntó mientras examinaba la zona afectada. Podía oler perfectamente la colonia que llevaba y nuestras respiraciones se mezclaban. Joder, sentí como los colores subían a todo mi rostro y bajé la mirada.

- S-si... - susurré mientras observaba su rostro a dos centímetros de distancia del mío. Desvío su mirada hacía mis ojos y pareció atravesarme con la mirada.

Acto seguido, se alejó y procedió a quitarse el sueter qué llevaba.

- ¡No! ¿¡Espera, qué haces?!

Al quitarse el sueter que lo cubría quedó en una camiseta blanca de manga corta, resaltando sus brazos bien formados.
Se me secó un poco la garganta al verlo y me centré en lo que Jimin estaba haciendo.

- Toma, no puedes ir así. - dijo señalando la mancha en mi camiseta y luego haciendo el ademán de darme su sueter.
Yo, al instante, negué con la cabeza y me aparté un poco.

¡Me da igual tener una mancha! ¡Hacía un frío espantoso y Cosita Adorable no iba a andar con los brazos descubiertos!

Jimin frunció el ceño y se acercó de nuevo.

- ¿Por qué no? - preguntó algo apenado mientras me miraba.

- ¡Pasarás frío! - exclamé algo frustrada.

- Tengo una chaqueta en el coche, no pasaré frío. - explicó acercando de nuevo la prenda hacia mí.

¿Debería aceptar?

Entrecerré los ojos en busca de algún movimiento facial qué me revelará que aquello fuera mentira, y nada.
Supongo qué decía la verdad.

Suspiré y al final la cogí, ganandome una sonrisa de victoria por parte del chico.

- Vuelvo en un minuto. - le dije mientras me dirigía a los baños del recinto para cambiarme.

Una vez llegué, le puse el pestillo a la puerta y me quite la camisa, busqué quemaduras del chocolate y no había ninguna. Había tenido suerte.

Al pasar el suéter por mi nariz reconocí el olor de Jimin y sonreí levemente.
Éste me quedaba gigante pero no me importaba, me sentía como una niña pequeña a quién le acaban de dar un caramelo. Di un pequeño saltito y me miré al espejo durante un segundo.

Puede qué sea extraño pero llevar algo perteneciente a Cosita Adorable me subió el estado de ánimo.

Salí sonriente de allí, llamando la atención de Jimin, quién me devolvió la sonrisa.

- Te queda bastante grande. - dijo examinando su suéter. Yo simplemente asentí.

- Vámonos, tienes que coger esa chaqueta, seguro qué te estás congelando. - dije firme para luego hacer un gesto con la cabeza, hacia la salida. Él entendió y caminó hacía allí, abriendo la puerta y así salir los dos.

Mientras caminabamos por las calles llenas de gente notaba de vez en cuando su mirada en mí.
¿Habría notado qué estaba nerviosa?

- Entonces... ¿Qué te parece? - preguntó mientras se abrazaba a si mismo a causa del frío. Tonto.

- ¿Ah?

Debió de parecerle qué soy una estúpida porqué alzó las dos cejas, creo qué la he cagado.

- Lo de mi familia...

- Ah.. - dios mío, qué alguién me dé con una sartén en la cabeza. - Y-yo.. Me parece buena idea.. Pero..

¿¡Por qué no me salían las palabras?!
Es verdad qué tenía miedo de conocer a su familia, es decir, yo soy una simple ciudadana y él y sus familiares alguién importante. Yo no significaba nada, y ellos, podrían decidir si yo podría seguir estando con jimin, en resumen, cómo me equivoqué en algo, estoy perdida.

- ¿Pero..?

Suspiré y lo miré, formando mis labios en una pequeña línea.

- Si te soy sincera, tengo algo de miedo de conocerlos.

Jimin sonrió mostrando los dientes y formando sus ojitos en pequeñas líneas.
Acto seguido volvió su mirada al frente, con la sonrisa aún en su rostro.

Ay, ¿Por qué sonríe?
¿Dije algo gracioso?

- ¿Por qué?

- Y-yo.. Por qué... - iba a responder pero el claxon desenfrenado de un coche no me dejo terminar mi cometido.

Giramos nuestras cabezas al unísono en dirección a aquel sonido y vimos una furgoneta negra parada a unos metros de distancia.

En el interior, los amigos de Jimin.

Taehyung tenía una sonrisa burlona y seguía tocando el claxon del coche.

Jimin frunció el ceño y suspiró.

- Me tengo qué ir, piénsatelo, por favor. - añadió antes de dirigirse a la furgoneta.

Cuándo ví cómo la furgoneta se alejaba, me llevé las manos a las sienes y se me escapó un gruñido de frustración.

¿Qué iba a hacer?

                                [❤]
                                   ‎

¡Hola! Espero qué les haya gustado el capítulo, siento la tardanza. Me olvidé de escribir, sorry. ¡Prometo dos capitulos hoy!
No olviden votar y comentar, baii💕

Royalty • Park Jimin // BTS fanficDonde viven las historias. Descúbrelo ahora