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- Procura no estropear el maquillaje - advirtió mi madre.

Había insistido en maquillarme y añadir unos pendientes al conjunto. No me pude negar.

Bufé.

- Sí, ya.. Adiós.

Cuándo ví como el coche se alejaba por fin, solté una maldición y me llevé las manos a las sienes. Si pudiera, me hubiera tirado de los pelos.

No podía cagarla, de ninguna manera, eso significaría mi fin con la relación con Jimin. Mi carácter no podía salir a la luz de ninguna manera.
¿Y si en algún descuido ocurría? No me podía imaginar las consecuencias si ese accidente se producía.

Negué ante mis pensamientos y me aferré a la poca esperanza qué me quedaba.
Todo iba a salir bien, o eso esperaba.
Suspiré y asentí lentamente.

Era hora de acabar con todo esto.

Encendí mi teléfono y marqué el número de Jimin. Ya no había vuelta atrás.

- Jimin, estoy aquí. - dije intentando no sonar lo más nerviosa posible.

- Espera, ahora salgo.

Y colgó.

No pasaron más de dos minutos cuando vi a un Jimin atravesando la puerta principal del recinto. Me recibió con su característica sonrisa y yo con la mía.

Llevaba ropa del mismo estilo de cuando lo vi por primera vez en persona, en el desfile.

- ¡Emi! - exclamó Jimin mientras me saludaba con un gesto de mano. - Ven, todos te estábamos esperando.

Entrelazo sus dedos con los míos y tiro de mí hacía el interior del edificio.

Cuando llegamos a la sala principal qué había tenido el placer de visitar algunas veces los pasos de Jimin pararon, causando qué me diera en la nariz con su dura espalda.

- Jimin. - habló la voz femenina causante de mi dolor de nariz. - ¿Ella es la señorita Emi, cierto?

Nos giramos al unísono, en torno a la dueña de aquélla suave voz.
La señora Park.

- Sí, señora, un placer conocerla. - hice una reverencia y observé como la mujer hacía una mueca y se iba no sé dónde.
Um, ¿No le caigo bien?
Oh, ¿Había hecho algo mal? ¿Quizás?

Oí como Jimin soltaba una risa nerviosa y se rascaba la nuca con la mano libre.

- Perdonala, por favor, es así con los desconocidos, ya verás cómo con el tiempo mejorará. - susurró Jimin reanudando sus pasos.

Observé qué la única iluminación que portaban los pasillos eran los rayos lunares, que atravesaban los grandes ventanales de vidrio dándo una luz blanquecina al lugar.
Por alguna razón éste detalle hacia el lugar solitario, quizás por qué las únicas almas que rondaban por allí eramos nosotros dos y por el silencio absoluto qué solo era roto por el sonido de nuestros paso.

Paró delante de una puerta entre las demás y con la mano en un puño tocó la madera. Un "adelante" del interior nos permitió el paso y entramos.

No era muy diferente a las demás habitaciones, si no qué está tenía una gran mesa y varias sillas. Un comedor.

Me percaté también de las miradas curiosas de un hombre, una pareja de ancianos y Jungkook. Y una asesina, por parte de la señora Park.

- ¡Jimin! ¡No nos dijiste qué era tan linda! ¿De dónde la has sacado, eh, pillín? - exclamó la anciana mientras me daba un abrazo. Observé cómo tenía una sonrisa parecida a la de Jimin, los ojos se le achicaban hasta formar pequeñas líneas al sonreir. - Bienvenida, Emi.

Hize otra reverencia para ella y los demás presentes.

- Oh, venga, vamos a sentarnos. - añadió la mujer más mayor mientras me indicaba un sitio dónde sentarme, al lado de Jimin.

~~~

Todo fue bien, al fin y al cabo.

Pensé qué me equivocaria cómo siempre lo hacía con mi torpeza, pero esta vez pude controlarme.

El tiempo qué pasé con los familiares de Jimin fue divertido, su padre era un hombre bastante gracioso y sus abuelos igual, excepto quizás su progenitora, parecía lanzarme dagas con los ojos.

Además de qué la comida estaba deliciosa.

- Muchas gracias por cuidar a nuestro hijo. - Agradeció el señor Park mientras hacía una reverencia. No me esperaba aquello.

- ¡Oh, no! Ha sido un placer, por favor. - no sé si mi argumento tuvo algo de coherente pero logró dejarle una sonrisa en el rostro. Al menos.

- Esperamos verte pronto, Emi. - se despidió la abuela mientras me daba otro abrazo al cuál correspondi gustosa.

- Igualmente.

Con esto, salí al exterior con Jimin a mi costado, insistió en acompañarme y no me pude negar.

- Emi.. Bueno... esto es un adiós. - dijo dándome un pequeño abrazo. Yo asentí.

De repente, nos quedamos en un silencio, algo incómodo.

Aún no había desecho el abrazo, y me parecio algo extraño.
¿Que estaba haciendo?

Abrí los labios para decirle algo pero me paré al ver su rostro más cerca de lo normal, nuestras respiraciones se mezclaban.

Mi mirada instintivamente frenó sobre sus labios, joder.

Sentí como se acercaba y mi pulso salió disparado.

- No, no puedes besar a alguién como él. - ordenó mi subconsciente.

Era cierto, Jimin era alguien importante, él podia conseguir a otra persona mejor qué yo. No podía dejar qué ocurriera algo entre ambos, por mucho qué yo quisiera.
Era por su bien.

¿Por qué habia sido tan ingenua? Sólo había estado pensando en mi misma.

Me alejé y él me miró algo sorprendido y decepcionado.

- Adiós, Jimin. - me despedí con una leve sonrisa.

- A-adiós.. - susurró casi audible con tristeza.

Al oírle sentí como se me estrujaba el corazón a punto de querer llorar ahí mismo.

Lo siento, Jimin.

[🌙]

¿El primer acercamiento de Emi y Jimin?
¿O alejamiento?
🌚
Bueno, ya lo verán en el siguiente.
Perdonen si esta algo mal narrado, hubo un percance y se me borró sin querer todo lo qué tenía escrito.
Lo volví a escribir todo, pero salió peor.
Además de qué este era mas largo y el reescrito salio corto. 😭
Perdonen si da todo el asco.
Bueno, el siguiente será mejor.
No olviden comentar y votar!
Baii 💕

Royalty • Park Jimin // BTS fanficDonde viven las historias. Descúbrelo ahora