Era imprudente ponerse la máscara y salir a las calles,
Era imprudente seguir a Tony Stark a Alemania,
Era imprudente enamorarse de ella,
Y lo hizo de todos modos.
Disclaimer: Ningún personaje de Marvel me pertenece.
Portada por: chucksebasp
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Después de recopilar el mayor número de testimonios positivos sobre el arácnido posibles, Beatrice decidió escribir el suyo.
No tenía mucho que decir, expresaba su admiración hacia la valentía de Spider-man y le daba las gracias por lo que —ella creía— hacia por Nueva York, guardó las hojas dentro de un sobre y dudó en adjuntar la nota del Daily Bugle pero optó por no hacerlo, guardó el sobre en su mochila y planeaba no sacarlo hasta encontrar al enmascarado de nuevo.
Después de asegurarse de que su papá estuviera en su habitación leyendo, salió del departamento y tomó el ascensor hasta el último piso, subió las escaleras de emergencia y salió a la terraza, decidió no acercase mucho a la orilla, no le asustaban las alturas pero tal vez la gravedad podría jugarle sucio, dejó la mochila en el suelo y comenzó a mirar los edificios vecinos, el sol estaba cerca de ponerse pero Beatrice tenía la esperanza de que Spider-man estuviera rondando por ahí; esperó durante dos horas y se dio por vencida a las 8. Volvió a su casa y justo cuando colgaba la mochila en el perchero junto a la puerta su padre salió de la habitación.
— ¿Quieres cenar?
...
Pasó los dos siguientes días buscando al amigable vecino después de la escuela y no fue hasta el tercero cuando lo vio cruzando los edificios del frente, reunió valor y tomo aire para comenzar a gritar
— ¡Spider-Maaaaaan!
Peter se desequilibró un poco al oír el grito y se puso alerta, divisó a una chica agitando los brazos, lanzó su telaraña y aterrizó en la orilla, hasta entonces se percato que era Bea, la chica que Ned había presentado.
— ¿Te encuentras bien?
— Necesito hablar contigo
Eso era definitivamente lo último que Peter esperaba oír
— El otro día ayudaste a una mujer a recuperar su bolso cerca de la florería, el ladrón me derribó y tu me ayudaste a ponerme de pie ¿Lo recuerdas?
Frunció el ceño, no entendía el punto de la chica pero por lo poco que la conocía parecía una chica amable así que tal vez no perdía nada con contestar
— Claro, las chicas bonitas son difíciles de olvidar ¿Como te llamas?
A Bea lo desconcertó su respuesta, y tartamudeó un poco al contestar — Soy Beatrice y eh, estuve buscando vídeos tuyos ayudando a la ciudad
— Vaya, nunca había conocido a una admiradora— Bromeó
Bea giró la cabeza tratando de ocultar su sonrojo, se arrodillo a buscar el sobre en su mochila y lo extendió al chico
— Creo que lo que haces por Queens es genial, recién llegue y no me agradaba la idea de mudarme aquí, pero contigo salvando a la gente es diferente, hice esto para agradecerte, son testimonios de varias personas, incluyéndome.
Peter sonrió, era tierno el semblante de la chica, tomó el sobre y le dijo:
— Nadie me había agradecido personalmente
— ¿Lees las opiniones en Internet?
— Algunas veces
— ¿Las malas también? — el hombre araña asintió —¿Sabes lo que el Daily Bugle dice sobre ti?
— Si
— ¿Y te preocupa?
— Lo que ese periódico diga me tiene sin cuidado y contigo aquí dándome las gracias confirma que ha valido la pena, lo que me intriga es que haces en la azotea de este edificio
— Vivo aquí, piso 18
— Tal vez la próxima vez nos veamos más cerca del suelo, gracias por esto—alzó el sobre
— ¿Próxima vez?
Peter río suavemente — Nueva York es más pequeña de lo que imaginas— le dio la espalda y disparó su telaraña al edificio de a lado —Nos vemos Bea
Bea abrió la boca para conestar pero el chico ya había saltado y se alejaba entre los edificios, no pudo pensar en otra cosa más que: acababa de tener una pequeña conversación con el heroe de la ciudad y la habían apodado; Por segunda vez
Cuando Peter llegó a casa, cerró la puerta y se quitó el traje abrió el sobre, este tenía varias hojas dentro, leyo todas, incluso reconocío algunas que ya había leído, la ultima estaba doblada por la mitad y en el frente decía en una limpia caligrafia
"ParaSpider-Man"
Espero haberte visto personalmente y decirte la razón de todo esto. En caso de haberme acobardado lo explicaré aquí:
Peter río por el incio de la carta
Aún no entiendo las razones de tu heroísmo, pero cualquiera que estas sean necesitan mucho valor para salir a la calle. No conozco a muchos héroes y ciertamente a penas te conozco a ti, me mude desde California hace poco tiempo, así que no puedo decir las innumerables veces que me has salvado (de hecho ni siquiera lo has hecho) pero si has salvado a muchas personas más y eso es lo que merece agradecimiento y admiración, eres muy valiente y alguien muy especial para mí me enseñó que la valentía es la mayor de las fortalezas, así que espero que nunca pierdas la tuya Spider-Man por que sé que Queens está más segura contigo.
Beatrice Wind.
Peter leyó la carta nuevamente antes de doblarla y guardarla junto a todas las demás en un cajón junto a sus libros; le parecía loco y precipitado lo que Bea había hecho por el pero no dejaba de ser adorable y los agradecimientos a Spider-Man le daban una sensación de satisfacción, sentía que salir todas las tardes con su traje hacían sentir segura —al menos— a una persona; y ese había sido su objetivo desde el principio
— ¡Peter, la cena está lista!
...
El fin de semana era un descanso para Peter Parker pero no para su identidad secreta, los sábados y domingos la actividad delictiva aumentaba considerablemente y eso era aunque decepcionante para la seguridad de Queens para Spider-Man era emocionante incluso si no era el mejor amigo de la policía.
Después de detener lo que parecía el ultimo crimen del día Peter se encontraba sobre el establecimiento de Delmar, ladeó una sonrisa al recordar a Bea en la azotea del edificio de enfrente, saltó hacia su edificio y comenzó a contar las ventanas hasta llegar a la 18 se asomó cuidadosamente por la ventana, la observó sentada comiendo con quien parecía ser su padre, ambos reían.
Le parecía una chica agradable, quizás no podría ser amigo suyo siendo Spider-Man, pero sabía de alguien que si.