Punto de quiebre

Resolución

Lincoln: Ya no me sorprende, que es lo que quieres?
Lynn: Solo vine a entregarte tu almuerzo, mamá te lo envia.
Lincoln: No debiste, molestarte hermanita...

La semilla de la desconfianza ya estaba sembrada, pero no podía desperdiciar una comida casera en tal situación.

Lincoln: (Mi estomago se estremece por el hambre, pero no debo parecer débil ante ella).

Sus manos se deslizaban para rebelar la comida, para su desgracia lo que sintió como un almuerzo eran tan solo piedras y tierra dentro de estos envases.

Lincoln: Wow gracias hermanita, ¿cocinaste tu verdad? Se nota la mano del chef.
Lynn: buen apetid Lincoln.
Lincoln: Sinceramente es lo mejor que haz cocinado en tu vida, o cocinaras.
Lynn: Vas a comer o hablar.
Lincoln: ¿Que? ¿Aún te afectan mis palabras?.
Lynn: Siempre tan desafiante, ¿verdad linc?.
Lincoln: Y tú tan infantil.
Lynn: No gastare mi tiempo, ya no tengo nada contra ti, solo el hecho que eres un imán de mala suerte, procura no meterte en mis asuntos.
Lincoln: Yo no soy él que se mete en la vida de los demás.
Lynn: Como sea, solo no te quiero ver de nuevo.
Lincoln: ¡Hagamos un trato aquí y ahora!, yo no me meto en tu vida y tu tampoco en la mía... ¿hecho?.
Lynn: ¡Trato hecho!, pierdes más tú que yo Linc, pero bueno.
Lincoln: ¿En serio lo crees? (Un tono seguro y tranquilo salio en esas palabras).
Lynn: Veremos quien necesita a quien después, recuerda quien siempre te protegió de los que te hacían bullying.
Lincoln: ¿Reconocerás la derrota esta vez?.
Lynn: Como si fuera a perder contra alguien como tú...
Lincoln: Trato hecho entonces.

Sus manos estrechadas nuevamente, aunque fuera para sellar funesto trato, les hizo recordar y sentir algo que ya parecía sepultado hace mucho, unos recuerdos de tiempos mejores.
Con su estrechón de manos ya finalizado Lynn procura decir unas últimas palabras.

Lynn: Nos vemos luego chico de la mala suerte.
Lincoln: Espero haberte pasado la mala suerte en ese apretón de manos.
Lynn: Ah, maldito se me olvidaba (Se refriega la mano en la polera). Por tu bien Lucy, me alejaría de él.
Lucy: No creo en esas estupideces Lynn -suspiro-.
Lynn: Jaja buena esa, "señorita hipócrita".
Lucy: Vete luego...
Lynn: Solo recuerda una cosa Linc, las personas calladas son las peores, Bum-bum lo sabia, adiós Lincoln.
Lincoln: Pero... (una revelación se daba a lugar en su mente). Lucy... Dime que no es cierto.
Lucy: ¿Qué?.
Lincoln: Por eso, te pesaba la culpa... ¿verdad?.
Lucy: ¿De que hablas?.
Lincoln: ¿Tú fuiste la que hizo pedazos a Bum-bum...?.
Lucy: No yo no...
Lincoln: ¡¿Entonces quien fue?!.
Lucy: Yo, he no sé...
Lincoln: Dimelo...
Lucy: ¡No lo sé Lincoln!.

Él se aparta de ella para verla fijamente a los ojos...

Lincoln: En verdad creí en ti... Lucy.
Lucy: Pero Lincoln...
Lincoln: Quiero que me dejes tranquilo... y que dejes de espiarme.
Lucy: Lincoln, no le hice nada a Bum-bum, lo juro.
Lincoln: Ya no te creo nada Lucy, ya me voy, saludas a las demás de mi parte, será la ultima vez que las molestare. Ya me cansé...
Lucy: Linc...

Con la tristeza en su cara, ella miraba como su hermano se alejaba, prometiendo no molestarle más, a ella o cualquiera de sus hermanas... Sin saber el peso de estas palabras, Lucy observa como desaparece entre los pasillos, corrió tras de él, pero era inútil, el desapareció cual fantasma, esto la sorprendió más de lo que creía, pues no pensaba que su hermano podía desaparecer así tal como ella.

Cookie: ¡Oye Lincoln ven!, eh ¿te paso algo?.
Lincoln: No nada solo me siento cansado, ha sido un día largo.
Tabby: Y falta la mitad.
Lincoln: ¿Enserio? Ahhh...
Polly: Descuida solo falta una clase.
Lincoln: Genial, hablando de cosas sin sentido, ¿Han visto a los chicos?.
Cookie: ¿Porque sin sentido?.
Lincoln: Porque no se me ocurrió nada y solo lo dije...
Todas: ¡Eso no tiene sentido!.
Lincoln: Por eso.
Todas: ¿Ah?.
Lincoln: Perdón estoy desvariando un poco.
Tabby: Y que lo digas.
Lincoln: ¿Y saben dónde están?.
Cookie: Creo que se fueron al patio Linc.
Lincoln: Genial, ¿me cuidan esto por mientras?, ¡gracias en seguida vuelvo!.