Aunque dudé por unos instantes sobre lo que debía hacer, decidí ir yo a los problemas en vez de que ellos acabasen explotando sobre mi. Tras decirle a Luke lo sucedido e insistir en que tenía que ir yo sola, abrí la misma puerta que hacía minutos Harry había abierto. Subí las interminables escaleras con cuidado de que nadie me viese y cuando estaba arriba, un escalofrío por el viento azotó mi rostro.
-¿Harry?¿Dónde estás?-Mire hacia todas partes pero no le veía. Me abracé a mi misma mientras seguí buscando con la mirada en todas direcciones hasta que distinguí unos zapatos en una de las esquinas. Caminé hasta allí con paso firme que fue desvaneciendose cuando le tuve en frente. Sabía que yo estaba allí, pero no me miraba.
-Hola-dije sin ninguna respuesta por su parte.
-¿Piensas ignorarme todo el rato?-Me miró cabreado, en sus ojos pude ver rabia pero no contestó. Un "perfecto" salió de mis labios ante su pasividad y sin estar dispuesta a darme por vencida, me apoyé en la pared y fui dejándome caer a su lado aunque con una pequeña distancia de respeto. Al mirarle, vi a su lado una botella de tequila que llamó mi atención. ¿En serio Harry? ¿Tequila? Pero armandome de valor, le pedí un trago que me dio sin ganas y sin mirarme.
-Sabes, siempre pensé en estar algún día en una azotea de Londres disfrutando de las vistas y de buena compañía-ni se inmutó-por lo menos lo primero lo he cumplido.
-Nadie te ha pedido que vengas aquí arriba, has sido tu solita la que ha vendio-me quitó la botella y dio un trago poniendo mala cara al finalizar.
-Trae-le quité la botella dando yo otro trago-odias el tequila.
-También odio muchas otras cosas y las estoy aguantando-sabía por donde iba y me reí sin ganas.
-Espero que no se hayan dado cuenta de tu arrebato.
-¿De verdad Ari?¿Eso es lo que te importa?-me miró- He visto como Luke te besaba y tú no hacías nada por apartarte y te importa que se hayan dado cuenta de mi portazo...Increíble.
-Mira Harry...-respiré antes de contestar para no cabrearme-entiendo tu cabreo, no es plato de buen gusto lo que has visto, pero te recuerdo dos cosas como siempre: yo tengo que soportar lo mismo con Kendall y todo esto, es idea tuya.
-¡Oh vamos! No quieras comparar el beso que la he dado a Kendall con el que le has dado a Luke...
-Él me ha besado a mi.
-¡Pero no te has apartado!-gritó furioso.
-¿Cómo me voy a apartar si ni yo misma sabía lo que estaba haciendo?
-Ahora me vas a decir que no sabías lo que estabas haciendo...claro, todo es muy lógico.
-¡Por favor Harry! ¿Te estás escuchando? Estás teniendo el arrebato de celos más infantil de la historia.
-Perdón por cabrearme al darme cuenta que la chica por la que siento cosas se besa con uno de mis amigos en mis narices. Perdón, llámame raro-Se levantó cabreado y fue hacia el borde de la azotea apoyándose en esta. Después de unos minutos me acerqué a él imitando su postura.
-No quiero pelear Harry...-le miré, él no me miraba-Mira, sé que lo que has visto no es plato de buen gusto porque aunque no sea igual, yo he visto lo mismo contigo y créeme que quería ahogar a esa....A Kendall. No quiero que estés así en un día como hoy ¿Sabes? Esta iba a ser una noche para recordar pero no por esto exactamente-sonreí sin ganas-Luke no ha tenido la culpa, igual que a ti con ella, ahora a nosotros también nos llegan órdenes a cumplir...
-¿Qué órdenes?-me miró con el ceño fruncido.
-Beso apasionado para que las noticias sigan circulando en una noche como hoy-dije intentando imitar el acentó de André, unos de los directivos de Modest-Luke no tiene la culpa, nosotros le hemos metido en esto y espero que te des cuenta.
