Que Mal Me Caes

"PERFECTO" PRIMER DÍA PARTE 3

Después de que Marina terminase de reírse a mi costa fuimos a explorar un poco el internado tal y como me habían prometido. Sarah había sido castigada durante toda la hora por lo que no pudimos contar con su presencia , lo cual me apenó. Se había metido en un lío por mi culpa y la pobre no se lo merecía.

—Los tres llevamos cerca de cuatro años internados en el Nube Blanca. Yo por lo menos me conozco el lugar como la palma de la mano.  —Me explicó Lucas , el hermano de Marina.

—¿Cuatro años? ¿Y nos os aburrís como ostras?

—Para eso están las actividades extraescolares. Deberías apuntarte a alguna que te guste cuanto antes. Eres bienvenida al equipo de waterpolo del Nube Blanca. Que lo sepas. —Me respondió el pelirrojo.

—Gracias por la invitación pero no creo que lo mio sea el waterpolo.

—Siempre puedes venirte a mi club de matemáticas. —Ofreció Roberto con toda su buena intención.

Iba a agradecerle el ofrecimiento cuando Marina me cortó.

—Robert , querido , nadie y cuando digo nadie quiero decir que NADIE , quiere meterse en un club de matemáticas. Para eso te quedas en la residencia mordiéndote las uñas.

—Pues que sepas que el curso pasado el número de integrantes del club aumentó un 100% —Se defendió el matemático.

—Sí claro. Me imagino que erais dos y ahora sois cuatro. Gran progreso amigo , felicidades. —Aplaudió sarcástica la pelirroja.

—Estos dos siempre están así , ya te acostumbrarás. —Dijo divertido Lucas que miraba a su hermana y a su amigo. —Mientras ellos dos se siguen matando que te parece si tu y yo  vamos haciendo la visita por el internado.

—Sí mejor. -Respondo mirando aun a Marina y a Roberto que seguían con su debate. —Que por lo que parece esto va para largo.

—Bien comenzamos entonces. Estamos ante el edificio central , llamado "El Águilas" fue originalmente el castillo de un conde que se había instalado en la zona en el siglo XIX.

El edificio era una preciosidad. Su fachada llena de detalles como los tallados o las esculturas de unas águilas que coronaban el edificio victoriano eran toda una obra de arte. Por no hablar de los grandes ventanales que rodeaban todo el castillo. Dentro de él se llevaban a cabo todos los trámites burocráticos del internado. Lo había visto por dentro cuando vine con mis padres a matricularme y era tan impresionante por fuera como por dentro.

—Es muy bonito la verdad. Me encantan los edificios antiguos de este tipo. —Respondo admirando el inmenso edificio que se alza ante mi.

—A mi también me gustan mucho. — Coincidió el pelirrojo. —Lo malo es que requieren de mucho mantenimiento para que  sigan conservándose así de bien , por lo que casi siempre están en obras. Sobre todo este , El Águilas. Es el más antiguo de los edificios que componen el internado.

—Entiendo. —Respondo sin dejar de observar el imponente edificio.

Delante de El Águilas había un jardín con varios bancos donde muchos profesores y alumnos se sentaban a charlar , comer o leer. Lucas y yo caminamos por la zona verde hasta llegar a una estatua de un hombre a caballo que debía medir unos 4 metros. Parecía antigua.

—¿Quien es? —Pregunto refiriéndome al hombre que plasmaba la estatua.

—¿Él? Tranquila que lo terminarás por conocer muy bien. Eduardo , tu profesor de historia te hablará de George Lark hasta que quieras tirarte por una ventana.

—¿George Lark? ¿Lark como la profesora? — No es un apellido muy común que digamos.

—Ajá , Victoria Lark es la descendiente de uno de los hermanos de George Lark , fundador del Nube Blanca. —Respondió el pelirrojo.