Él sólo está demasiado asustado
para tocar la felicidad,
por el miedo de que
ella se aleje.
Quizá ese es el por qué
de que aleje a todo el mundo
y quizá ese es el por qué
de que sea demasiado callado.
Pero él no cree que pueda
tocar la felicidad
sin tocar el amor.
Y él no sabe cómo amar.
No del todo.