—Chica estúpida.
No lo eres, Yui.
—¿Cómo Sakamaki Subaru se fijó en un estorbo como tú?
Un gran y hermoso estorbo en mi corazón que nunca desecharé.
—Eres fea.
No les hagas caso.
—No tienes atractivo. Yo estoy más buena que tú, inútil.
Tu atractivo sobrepasa lo físico.
«Idiota.»
«Inútil.»
«¿Sabes siquiera caminar?»
«Tus ojos son feos.»
«Puta.»
«Zorra.»
«Tonta.»
«No sabes hablar.»
«Seguro estás con todos.»
Mis nudillos están más que blancos. Las uñas se enterraron en mi propia carne. Camino lo más rápido que puede un humano por los estudiantes del pasillo.
Cuando por fin puedo verte estás rodeada de humanas patéticas y estúpidas. No puedo creer que sean tan detestables.
—P--por favor..., dejen de decir esas cosas —pides—. Yo no les he hecho nada malo a ustedes.
—¡Eres una aprovechada! ¡Zorra! —exclama una castaña. Bajas la cabeza.
—Sabes... —continua otra—. Deberías estar muert--.
—¡Cállense! —grito. Todos los presentes voltean a verme.
—Sa--sakamaki-san... —balbucea una.
—Yui, ven —te ordeno, más furioso de lo que quiero. Te acercas con lentitud y la cabeza baja. Cuando pasas junto a mí veo tus lágrimas—. Ustedes, malditas escorias. Vuelven a molestar a mí mujer... ¡Y JURO QUE MORIRÁN!
Golpeo la pared más cercana suavemente, ocasionando una grieta en ella. El estruendo es fuerte, todos quedan paralizados.
Te llevo a la terraza y nos sentamos. Apoyas tu cabeza en mi brazo.
—Subaru-kun... Gracias.—Lloras.
—¿Por qué?
Me miras. Me partes el corazón. Sonríes entre ese mar de mocos y lágrimas. ¿Por qué?
—Por defenderme, Subaru- kun.
¿Por qué sonríes?
No... La pregunta es: ¿Cuando dejarás de sonreír, Komori Yui?
Hola a todas y todos. Me hace muy feliz que lean esta historia, es más, cada vez que veo algún voto o comentario me alegra el día.
Quiero aprovechar este pequeño espacio para decirles: Felices Pascuas (Aunque sea algo tarde). Espero que hayan pasado un buen día y comido chocolates.
Hasta el próximo capitulo.
Belén.
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Hello. [Yui Komori x Subaru Sakamaki]
Fanfiction«Hola, Subaru-kun» me dijiste con una radiante sonrisa. Tenías las mejillas sonrosadas y el cabello desordenado, marcas en el cuello y parte de tu pecho, los labios algo hinchados, sólo te cubría una sábana y tus ojos desbordaban alegría y amor. La...