Querido, no amado Deku:
El día de tu funeral tenía ganas de llorar, pero no lloré, debería haberlo hecho, habían demasiadas personas, me miraban y juzgaban, muchas personas te amaron, quizás no era necesario ahogar mi tristeza con drogas en la sala de nuestra casa para aliviar el sufrimiento. Pero es difícil no sentir el dolor que me produce el no escuchar el tono de tu voz llamándome por mi nombre.
Incluso yo, un saco de enojo que solo tú pudiste amar y comprender tiene sentimientos. A veces cuando estoy en casa cierro los ojos e imagino que estás ahí, riendo, imagino que nada cambió, incluso puedo sentir tu cálido cuerpo o tu respiración en mi cuello, dicen que nuestros ojos cerrados ven más que estando abiertos.
Siempre me empeñe en no pensar sobre lo mucho que te amo. Y duele. Duele y mucho. No hay día que no me levante con la sensación de vacío y soledad, como si no fuera yo mismo.
A veces también lloro, lloro desconsoladamente en la ducha de tu cuarto, que da paso al odio que siento por ti, pero cuando las lágrimas saladas se unen a las gotas de agua formando un torbellino que desaparece para no volver, entiendo que no es culpa tuya.
¿A quién debo culpar? En los días más tristes Kirishima y kaminari dicen que no hay un culpable, que esas cosas pasan, entiendo que intentan hacerme sentir mejor, pero al final del día tienen un hogar al cual volver, y un cuerpo cálido en el invierno, no entienden lo que siente.
Me siento solo y abandonado, este costado de mí sigue pudriéndose con todo lo que no te pude decir. ¿Cómo no pude? Soy un cobarde, siempre dijiste que la vida es asi de simple, ¿Por qué seguías conmigo aun después de todo lo que te hice? A veces sonrío al recordar este tipo de cosas, dejaste atrás todo por mí, aunque nunca lo pedí, me hace sentir mejor poco a poco.
Te ame siempre, desde el cabello alborotado en tu cabeza, hasta la punta de tus dedos, desde tus pecas que siempre resaltaban el rubor de tus mejillas que intentaban esconder cada vez que te besaba, hasta tu siempre linda sonrisa o tu extraña pero fantástica personalidad.
Te quise siempre, no, te ame siempre, tal como eras.
No recuerdo si lo dije alguna vez.
Porque sabías que yo sabía que sabías.
A veces me pregunto si realmente lo sabías, debí haberlo dicho mientras podías escucharlo.
Entiendo que el amor no da vida, pero la hace mucho más fácil.
Y ahora estoy aquí sin ti, pero sobrevivo con el dolor de haberte querido, el daño que me provoca seguir haciéndolo y la tristeza de saber por encima de todo que, pase lo que pase no dejare de hacerlo.
A veces me preguntan qué sucedió contigo, los miro de reojo y sigo mi camino, ¿Que debería responder? ellos lo saben, todos lo saben.
Las noches se prolongan cada día un poco más. Quizás ya es mi hora, "No te arrepentirás de esto de ninguna manera, lo prometo" pienso en eso la mayor parte del tiempo".
Fuera de la ventana está la oscuridad y la imagen de la luna diluida en el agua del estanque, no hay nadie más que yo y mi alma completamente mutilada, no estoy en una horrible pesadilla lamentablemente.
Pero lo que más me duele no es lo que sucederá a continuación, lo que más me duele es el hecho de que arderé para siempre en el infierno y allí no estarás, pero creo que tome la decisión correcta, no quiero estar aquí sin ti.
Sería un idiota si no admitiera mis errores. Estaba equivocado, lo fastidié, tenía prisa en algún lado. Apuré los acontecimientos, sin entender lo que estaba en mi camino. Y aún ahora soy un idiota.
Pero ahora no lloro.
El reloj suena, tic tac, marca las doce,
pensé que era más tarde,
el búho del árbol mueve su cabeza y ulula,
todo se desvanece de repente,
el sonido desaparece,
incluso mi voz desaparece.
Los párpados se cerraron,
y el corazón se hundió en silencio,
llorando a la voluntad de los cielos.
