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La cena

Dieron las 7:00 de la noche, Yoongi había terminado de hacer tarea con Jungkook. Le había pedido que se cambiara y se pusiera algo formal, Kook con pesadez lo hizo; no se arreglaba para Jin sino para Yoongi, su padre.

-A que hora te dijo que vendría- preguntó el niño bajando la escaleras vistiendo ahora un pantalón de mezclilla negro y un suéter color gris.

-A las siete- respondió el pelinegro, Kook miró el reloj de pared y negó con la cabeza

-Bueno, ya son 7:05, no llegó ni llegará, vamos a cenar- el chico iba a dar un paso al comedor pero escuchó una melodía tan conocida. -Mi móvil lo dejé arriba- subió corriendo mientras que Yoongi le gritaba que no se fuera.

El timbre asusto a Min y supuso quién era, acomodo su cabello, se aseguró de oler aún a su loción favorita y rocío un poco de fragancia para el piso, olfateo por última vez y decidió abrir.

-Yoongi, disculpa la tardanza pero no encontraba tu casa.- sonrió avergonzado Jin.

-No te preocupes, pasa por favor- Yoongi se hizo a un lado y Jin pasó.

-Vaya... Es muy bonita tu casa, espaciosa y mm huele muy bien- Jin le dio unas flores a Yoongi y una bolsa color rojo. -Las flores son para ti y la bolsa es para tu hijo, no se si le gustan los regalos pero se lo traje- dijo un poco nervioso.

-Gracias, si le gustan. Jungkook bajara en un rato, respondió una llamada pero vamos al comedor- Yoongi dejó pasar a Jin hacia el comedor y ambos decidieron esperar a Jungkook.

-Huele muy bien... Creo que toda tu casa huele muy bien- rió un poco Jin, no sabía que decir, realmente se sentía nervioso.

-Si, creo... Pero tu no me saludaste- dijo Yoongi con un puchero tierno.

-Claro que lo hice Yoonie- dijo abriendo los ojos el rubio

-Sabes a lo que me refiero Jin- Min le tomó la mano al rubio y lo jaló hacia su cuerpo para tratar de resolver lo de esta mañana pero una voz lo hizo parar.

-Si, te lo paso ahora- Jungkook había bajado de su habitación, Jin se puso más nervioso y se alejó de Yoongi.

-Padre, Tae quiere...- El pequeño miró al chico de cabellera rubia y no lo dejó de mirar hasta que una voz en el teléfono lo hizo saltar.

-Ah si... Lo siento, Tae quiere decirte algo- le dio el teléfono a su padre y lo puso en espera.

-Jungkook...- su hijo lo Interrumpió antes de que formulará una palabras.

-Pa... Lo de Tae es importante, ahora hablamos si- Yoongi asintió y decidió contestar afuera.

Jin miró a Jungkook y sonrió pero el castaño lo miraba de arriba abajo.

-Hola pequeño, soy Jin. Cual es tu nombre?- preguntó con más nervios

-Jungkook... Park Min Jungkook- dijo el niño negando la mano de Jin.

-Park?- preguntó Jin.

Kook asintió y Yoongi entró al comedor.

-Listo, solo prometeme que te portaras bien Jungkook- dijo su padre

-Claro que si, ya sabes como soy yo- el niño sonrió dulce y abrazó a su padre.

-Bien ahora si, Jungkook el es Kim SeokJin, mi amigo y compañero de trabajo. Jin el es mi hijo y mi vida, Min Jungkook- ambos se miraron y se sonrieron Jungkook más a fuerzas que de ganas.

-Mucho gusto Jungkook- el chico acaricio el cabello del niño el cual solo se sintió incomodo.

-Ya vamos a cenar- Kook se separó de su padre y se sentó en su silla.

La cena transcurrió con anécdotas por parte de Yoongi hablando sobre su hijo de vez en cuando Jin decía algo. Llegó el fin de la cena y Yoongi decidió decir lo que tanto le urgía.

-Jungkook quiero decirte algo- el niño asintió y miró a su padre que tomó la mano de Jin. -Jin y yo... Tenemos una relación y queremos vivir juntos-

Kook no podía creer lo que había escuchado sus ojos se abrieron a la par, como debía de reaccionar.

-Pero... Que... Como que tienes una relación con este...- señaló Jungkook a Jin

-Jungkook, no es este se llama SeokJin...- regañó molesto Min

-Cariño no le grites... Es normal que lo tome así-

-No, cariño nada... Ustedes... Tu no puedes hacerle esto a mi papá Jimin- sus lágrimas cayeron y corrió a su habitación. Yoongi se levantó pero Jin lo detuvo.

-Jin, no quería que esto pasara, perdón pero Jungkook no es así- Se disculpaba por medio de reverencias.

-Oye Yoonie, no te preocupes esta bien. Será mejor que me vaya, tienes que hablar con Jungkook y decirle sobre lo otro, yo puedo esperar no es que esté urgido por salir de la casa de mis padres.- Jin acaricio la mejilla de Yoongi y sonrió.

-Si, tienes razón. No me imagino como se pondrá con lo otro, pero bueno. Vamos te acompaño- ambos salieron del comedor y Yoongi le abrió la puerta a Jin.

-Nos vemos mañana vale, te quiero Yoonie- Jin miró a Yoongi y le sonrió

-Y yo te quiero a ti, Jinnie- le dio un pequeño beso en la frente y Jin se dirigió a su auto.

Yoongi se despidió por última vez de Jin haciendo señales con las manos. Cuando por fin Jin se fue Yoongi subió a la habitación de su hijo.

Puso su oído a la puerta y escuchó su conversación.

-Yo no quiero que papá se enamore de alguien más, yo se que mi papá Jimin vendrá de nuevo. SeokJin no destruirá a mi familia- el niño se veía en el espejo y lloraba.

-Kookie, puedes abrir- golpeó suave la puerta.

-No, vete- respondió su hijo muy grosero.

-Min Jungkook, si no abres esta puerta date por castigado durante tres semanas- al no ver respuestas decidió contar. -Uno... Dos... Tre...- y antes de que hubiera una "S" el niño abrió y se fue a su cama.

-Oye, hijo por que dijiste eso abajo- preguntó Yoongi como si no lo supiera.

-Papá extraño a Jimin y ese tipo... Y Jin no va a venir a alejarme de ti ni de papá Jimin- el niño no dejaba de llorar.

-Jungkook, ya hablamos sobre esto debes dejar esto en el pasado, Jimin no era el tipo de chico que quería cambiar pañales y cuidar niños. Olvidalo ya- dijo con cuidado Yoongi, no quería cometer un error, pero lo hizo y se ganó un grito de su hijo.

-Así como tu lo vas a hacer, con esa persona que ni siquiera conozco, que se va a meter en tu vida... En nuestras vidas y en nuestra casa.- gritó molesto Jungkook

-Haber jovencito, basta ahí... No me vas a gritar cuando tu quieras. Jin y yo tenemos una relación, te guste o no vamos a vivir juntos. Seremos desde ahora una familia de cuatro personas. Quedó claro, así que comportáte y modera tus palabras y tu tono de voz.- Yoongi salió de la habitación de su hijo, le había gritado muy feo la cara de Kook lo demostraba tenía una cara de espanto jamás había echo gritar a su padre de es forma, tanto era la molestia de Yoongi que azotó la puerta.

Min fue a su habitación y se sentó en su cama para luego alborotarse el cabello y tirar se a la cama.

-Jungkook... Por que no puedes olvidar al maldito de Park Jimin- suspiró y trató de relajarse

Ambos se sentían realmente mal, no querían hacer las pases ahora quizá debían esperar un poco, quizá unas horas más, hasta que amaneciera y se pudieran ver las caras.

Ahora no era el momento, aun estaban alterados y aún tenían cosas que decir.

Dejame quererte. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora