17*

18 3 0
                                    


Yo estoy confundida Ricardo, me confundes –dije separándome de el–

Te entiendo paula, yo también estaba confundido, pero algo de lo cual siempre estuve seguro es que me gustas paula, me gustas mucho, trate de evitarlo pero simplemente no puedo, y ya sinceramente ya no me importa, ya no me importa lo que los demás piensan o digan, soy capas de enfrentarme al mundo si es necesario por ti, por estar contigo –dijo mientras me miraba a los ojos, esos ojos tan hermosos que me vuelven loca, acaricio mi mejilla–

También me gustas mucho, pero tengo miedo a que vuelvas a cambiar de opinión y me vuelvas a lastimar –dije agachando la mirada, el tomo mi barbilla y levanto mi cabeza para que lo mirara–

Eso nunca va a volver a pasar, ok? Quiero intentar algo contigo, quiero conocerte y quiero que tu me conozcas,¿Paula Villalobos aceptarías salir conmigo? –me pregunto agarrandome de ambas manos–

Si, acepto salir contigo –sus ojos mostraron una emoción indescriptible, me abrazo y yo también–

Gracias por darme una segunda oportunidad –dijo con una sonrisa que no le cabía en la cara, yo también estaba emocionada–

Después de un rato, subí a mi cuarto, me acosté en mi cama. No podía dormir, no dejaba de pensar en Ricardo, y si llegamos a tener una relación, mi mama lo aceptaría?, podremos llevar un relación aún con nuestra diferencia de edad, después de un rato de seguir pensando me quede dormida. Me desperté y me fui a bañar me vestí:

Había quedado con Dani para desayunar ya que hoy era nuestro último día aquí ya que en la noche nos vamos de vuelta a los ángeles, iba bajando las escaleras y lo vi ahí estaba el hermoso como siempre

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Había quedado con Dani para desayunar ya que hoy era nuestro último día aquí ya que en la noche nos vamos de vuelta a los ángeles, iba bajando las escaleras y lo vi ahí estaba el hermoso como siempre

Buenos días –dije sonriendo–

Buenos días –dijo también sonriendo– como amaneciste? –dijo acercándose–

Bien, y tu como dormiste? –le pregunte aún sonriendo–

Muy bien, ya que soñé contigo –dijo y no pude evitar sonrojarme, el sonrió– quieres ir a desayunar conmigo? –dijo, quería aceptar esa invitación pero no podía ya había quedado con Daniela–

Quisiera pero no puedo –dije, vi como su sonrisa se desvaneció– ya había quedado con Dani –le dije, el solo miraba al suelo, me sentí muy mal así que lo invitaría a comer y así tendríamos nuestra cita, porque es una cita cierto?– y si vamos a comer juntos? –dije, y el me volvió a mirar con una sonrisa–

Ok, yo elijo el lugar quiero sorprenderte –dijo emocionado–

Ok,bye ya me tengo que ir sino Daniela me va a matar –me despedí, dándole un abrazo y un beso en la mejilla–

Bye –fue lo último que escuche, ya que, ya había salido de la casa–


Mi psicólogoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora