tres

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Con la poca luz que hay, veo su silueta, su gran silueta alejarse lentamente, hasta que la oscuridad envuelve su cuerpo. Ahora ya no lo veo.

No sé cuánto tiempo he estado así, viendo a la nada, pensando en sus últimas palabras.

Tengo una gran curiosidad ante sus palabras, en verdad quiero saber cómo es. Pasaré mucho tiempo aquí, oh vaya que si.

Tiempo de irme. Me levantó y con cuidado camino hacia la casa.

No veo a nadie, ¿Que acaso sólo soy yo?

Tengo que irme ya o mamá empezará a preocuparse. ¿Donde deje mi mochila?

Sólo hay velas que alumbran la solitaria casa, lo que no ayuda mucho a encontrar mi mochila. No recuerdo siquiera si traje o no. Pero, tuve que haber traído, ¿o no?

Que olvidadiza soy. Tendré que arriesgarme a tropezarme con algún mueble. Camino, y trató de recordar donde la pude haber dejado.

Veo una luz acercándose, me doy cuenta y es el, trae una vela en la mano y en la otra mi mochila.

- Ten, la encontré y supongo que es tuya.

Me la tiende y yo la agarró, evitó tocar su mano.

- Supone bien. Me tengo que ir o mi madre se preocupara por mi.

- La acompañare afuera, hasta su auto.

- Ammm...no tengo auto... me voy en bus.

- ¿Es enserio?

Asiento.

- No dejaré que te vayas sola, te llevaré.

- Oh, no, no es necesario.

- Lo es. Ahora vámonos.

- Puedo irme sola.

- Me sentiría mejor si te dejará en tu casa.

¿Así que se trata de sentirse mejor? Pienso.

- Pero no me cuesta nada ir y...

- Es usted muy terca, la llevaré yo y punto. Vámonos.

Se da la vuelta y camina. Casi no lo veo. Siento necesidad de contestarle.

- Y tu muy mandón.

- ¿Perdón?

Voltea, me ve como mi madre, cuando era pequeña y hacia una travesura.

Y y mi bocota, con el se me olvida que es mi jefe.

- Nada.- Digo de inmediato, siento mis mejillas rojas, lo bueno que hay poca luz.

Suspira pesadamente y se voltea de nuevo, agarra de un perchero un suéter gris y se lo pone.

- Ven, mi auto está en el garaje.

- Ok.

Abre la puerta principal y me deja pasar primero, salgo y hace mucho frío.

- Espera aquí, traeré mi auto.

Asiento y veo que se va al "garaje" el cual yo podría jurar que cuándo entre a esta casa, no lo vi. Que despistada soy.

Oigo un auto y me preparo para subir en este. Cuando lo veo, no es como imagine que sería, es un auto ¿normal? Me imaginé un auto del año y esas cosas.

Sale del auto y me abre la puerta.

- Sube.

Entró en el, y me siento. ¿Qué clase se chico con aspecto egocéntrico, mandon, tiene esta auto, normal y sin estereotipos?

El precio por amarte; dane dehaan EDITANDO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora