Allí estaba yo, sentada en aquel pupitre de madera, viendo hacia la ventana, divagando entre mis pensamientos, mientras las clases transcurrían, ciertamente no soy del tipo de alumnos que se distraen, pero hoy precisamente algo no me dejaba concentrarme del todo, me sentía inquieta...
"Tengo que poner atención a las clases"
—Señorita Evans, veo que es más interesante mirar afuera que mi clase, si nos hace el favor de explicar de que trata el tema del que estoy hablando—
Bueno lo que faltaba, trato de recordar lo último que escuche de la clase pero en ese momento tocan la puerta y esta se abre, la directora entra. Todos nos levantamos. Y nos indica que volvamos a nuestros asientos.
—Disculpe Profesor, solo necesito a la alumna Mía Evans en mi oficina al termino de las clases—
Confusa me decido a preguntar el porqué quiere verme, es raro que la directora de la escuela vaya personalmente por un alumno. Lo cual me hace sospechar el motivo.
—Si directora, llega en el momento justo, estaba interrogando a la señorita Evans— Responde el profesor.
Lo que faltaba, que me llamen la atención.
—Debo suponer que abra respondido correctamente, no por nada es la mejor alumna de esta institución—Intervengo —Allí estaré directora—
La directora se despide, dejando todas las miradas sobre mi.
¿Qué quedrá decirme la directora? Estoy segura de que tiene que ver con mis prácticas.
El profesor olvida que me estaba interrogando y continua la clase, a la cual tardo en concentrarme.
En fin, decido poner atención a las clases, y en cuando menos me lo espero, el tiempo pasa volando y suena el timbre.
Hora de desayunar.
Guardo las libretas en mi mochila y me encaminó a la cafetería por mi desayuno. Me quedo un momento pensado en lo que tiene que hablar la directora conmigo y no puedo no sentirme inquieta y nerviosa. Debo un par de colegiaturas, más de lo que se me han acumulado y pronto tendré que pagar otra. No sé de donde sacaré dinero para pagarlas, no puedo contar con mi madre en este momento, solo la preocuparía aun más.
—¡Buuuuu!—
—Joder, ¿Estas loca?—Odio que las personas lleguen de sorpresa y para colmo me espanten.
—Hay Mía, eres muy fácil de asustar—Ríe
—Sabes que odio que hagan eso—
—Venga ya, es que amo la cara que pones—
—¿Fanny sólo vienes a burlarte de mi cara?—
—Hey, tranquila, sabes que no sólo vengo a burlarme de tu cara de ogro, también vengo a cotillear sobre todo el alumnado, ¿que crees de lo que me entere hoy?—Emocionada se para frente a mi y yo le ruedo los ojos.
Y he aquí a mi mejor amiga, Estefanía, una chica alta, de cabello largo, liso y ondulado en la puntas, muy bonita debo decir. Le encanta platicar sobre todo y de todos, no es entrometida, pero si es muy curiosa, algo que le parezca sospechoso, ella va e investiga, será muy buena en lo que se proponga, y la quiero demasiado.
—¿Me estás escuchando?—
—Si—
—Haber, ¿qué he dicho?—
—Has dicho que esos zapatos te tienen el pie encogido, que Courney fue vista con otro chico por la mañana y que probablemente la maestra de álgebra tenga un amorio con un alumno de tu salón, ¿me equivoco?—A ella solo le interesa cotillear sobre el chismerío del alumnado, cosa que a mi me da igual lo que ocurra con sus vidas.
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El precio por amarte; dane dehaan EDITANDO
Storie d'amore¿Qué pasa si te enamoras de un hombre sin sentimientos, crees poder cambiarlo, o...el te cambiará? Acompaña a Mía, en su lucha por enamorar a un hombre frío, sin fallarse a si misma.