Mis Cuatro Paredes [TERMINADA Y EDITANDO]

4. En vivo

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8:30 PM

Sentada nuevamente en el sofá del salón de juegos, esperando a que Dylan regresara con comida, Loren en otro sillón, mirándome feliz

-Me alegra tanto que lo hicieras-me dice incrédula.

-Yo no lo hice, él lo hizo-levanto mi vista del celular para señalar la puerta con los ojos.

-TÚ-me señala con su dedo índice-lo hiciste con SU-corre su dedo a la puerta-ayuda-recalca.

-Lo que digas-río y vuelvo la vista a mi celular.

-No entiendo cómo puedes actuar como si nada-me pregunta con un rastro de enojo en su aguda voz, frunciendo sus perfectas cejas.

-No lo hagas-me encojo de hombros sin darle importancia. Se disponía a quejarse cuando Dylan aparece, con dos botes de palomitas, le da uno a Loren.

-Gracias-le agradece metiéndose un puñado a la boca, luego le da una botella de agua

-No hay de qué-se sienta a mi lado y robo del tazón, comprendiendo que compartiremos. Me da una Pepsi y él se queda con una Coke-¿Cuál es el nombre del chico?-pregunta, me doy cuenta de que no lo he dicho, saco mi celular y busco el correo de Rose.

-Emmm...-leo rápidamente el correo y finalmente encuentro el nombre-...Félix Leamberg-digo lentamente, espero pacientemente menos de dos segundos a que Loren me corrija.

-La e no se pronuncia-ruedo los ojos y la ignoro, me dirijo a mi laptop para conectarla con la pantalla y Rose aparece en ella, en modo selfie.

-Hola chicos-nos saluda aunque no puede vernos-Estoy llegando y me acaba de informar que está a tres minutos, quedamos en Central Park-Me recuesto en el posa brazos del sillón, cubriéndome con mi manta gris. Pasando mis piernas por el regazo de Dylan, le doy un trago en mi bebida mientas vemos cómo se acomoda la cámara en el saco.

Tengo ganas de ver esto

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Exhalo con fuerza, estoy a unos metros de la chica con la que debo encontrarme, sentada en una banca de esas que hay en todo el parque, es rubia y está vestida formalmente

De repente me siento incómodo por llevar unos jeans negros, gastados y una polera gris de Nirvana.

Está acomodado su saco y tiene un portafolio negro en sus manos.

No puedo, no puedo, no puedo

Me dispongo a huir cuando Amelia Miller aparece en mi cabeza, con sus lentes gruesos, sus pecas y su linda sonrisa.

En dos palabras: Estaba acabado

Camino hasta la mujer quien me saluda amablemente y me da asiento, presentándose.

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El chico aparece en la pantalla y de inmediato todas las miradas están en mi.

Dime que es una broma de mal gusto

Misma polera.

-¿Algún problema?-inmediatamente ambos retiran sus miradas, vuelvo a mirar a la pantalla, ahora puedo ver su rostro, cabello castaño desordenado en un orden único, piel blanca y ojos de un azul tan claro que parece gris.

En dos palabras: Estaba acabada

Era considerablemente apuesto...

Tengo suerte de que en mi genética no existe la palabra sonrojarse, porque, nuevamente sus miradas están en mi.