Heat

1.9 Charla y Confesiones

Al entrar a la habitación Raven se encontró con Damian en el mismo lugar en donde lo había dejando, sentado frente al ordenador. Cerro la puerta con fuerza esperando a ser notada mas él ni parpadeo ante el acto. Ignorándolo camino por el interior lentamente poniendo las bolsas que cargaba sobre la mesa.

"Esperaba que llegaras antes" escucho decir al chico en un tono divertido todavía sin desquitar sus ojos de la pantalla. "Tres horas, Rompiste récord"

"Hubiera llegado antes pero primero pase por unas cosas" Raven comenzó a sacar pequeños contenedores de las bolsas esparciéndolos ordenadamente.

Paso una hora y media con los rubios, la hora restante dedico a usarla en darse un largo paseo en busca de aire y calma antes de regresar.

"¿Que es eso?" pregunto Damian curioso ante el aroma llenado el lugar.

"¿Haz comido?"

"No desde el desayuno"

Esperaba esa respuesta, por eso en su camino de regreso al hotel decidió pasar por algo de comer. Cuando el murciélago menor se enfocaba en buscar pistas su obsesión podía ser grande hasta el punto de descuidar sus necesidades básicas. Seguramente algo heredado de su padre y hermanos.

Termino de colocar los recipientes sobre la mesa, el olor también causo en su estomago una revolución, tenia hambre.

"Ven, tomate un descanso" Raven tomo asiento sobre el sofá invitándolo a su lado.

"Es vegetariano" Decía Damian en deleite al abrir un contenedor lleno de vegetales acompañados con arroz.

"Por supuesto." Conocía perfectamente su preferencia en la comida, no era la gran cosa. "¿Haz encontrado algo?"

Trato de crear una nueva conversación mientras ambos continuaban disfrutando los alimentos. Ante la pregunta en el rostro del muchacho se poso una mueca de orgullo.

"Fue muy fácil codificar los archivos en ese dispositivo, encontré muchas cosas, entre ellas un contrato firmado por Roman. Por fin una evidencia factible"

"¿Y Que? ¿Iremos al departamento policiaco con la evidencia y ellos harán todo el trabajo por nosotros?" Raven pregunto sarcásticamente, a lo que el chico solo bufo en desacuerdo.

"Muy divertida. Sigo ideando el plan. Tengo algunos datos...el envío se hará al norte del desierto. Hora: once en puntos de la noche del día domingo."

"La hora mas conveniente para cometer delitos"

"Nada mas ilegal que venderle a un ruso 50 mujeres para prostitución"

Al final sus sospechas se hicieron realidad, el alboroto era por trafico de mujeres. Raven hubiera preferido que fueran armas. Tratar con tantas almas consternadas le era un reto. El imaginarse a esas mujeres sufriendo le agobiaba, como empata no podía evitarlo.

"Mañana todo llegara a su fin" Comento Damian seriamente.

Habían pasado demasiadas cosas en esos dos días desde que llegaron a Las Vegas, tiempo suficiente como para olvidar la importancia del a misión y, los problemas de su vida.

Mañana irían tras ese criminal. Seguramente les seria fácil atraparlo, después de todo era un simple humano contra cuatro superhéroes. Al terminar regresaría a esa realidad esperándole en la torre; Empacar sus pertenencias para posteriormente abandonar aquel lugar. En cierto modo sentía que la sacaban en contra de su voluntad, la torre siempre fue su hogar, el primer lugar donde consiguió una nueva familia y amigos.

El equipo seguiría unido, funcionado con normalidad, pero a pesar de eso, nunca seria lo mismo. Temía por el futuro, al nuevamente quedar sola; si al alejarse de la conveniencia rutinaria sus compañeros se olvidarían de ella.