Señorita Cabello

Te ves adorable

Camila se despertó sobresaltada, clavando las uñas en el colchón mientras se levantaba de su sueño. Negando con la cabeza, ella trató de limpiar su mente de los recuerdos, enfocándose en otra cosa. Su bebé. 14 semanas, ella tiene 14 semanas y en otras 4 más, conocerá el sexo del bebé. Pero durante un tiempo todo lo que pudo sentir fue el dolor en su hombro izquierdo, un dolor imaginario pero sintió que estaba sucediendo de nuevo. Entonces ella pensó en él. Cuando pensaba que lo amaba tanto, que dejarían cualquier cosa por el otro. Pero por supuesto, eso solo era la ilusa Camila hablando.Eventualmente su mente se liberó de tales pensamientos, y pudo ver la tenue luz del amanecer. Camila frunció el ceño cuando miró su reloj, eran las 6 am, necesitaba dormir más.

Pero su cuerpo tenía otros planes cuando sus pies la llevaron a la cocina.

Desde que compraron los vestidos hace un mes, Lauren le hablaba menos. En lugar de eso, podría ver a Lauren mirándola cada vez que se ponía uno. Sus ojos viajaban desde su pecho hasta sus muslos, pero se demorarían más en su vientre. La cara de Lauren mostraba indiferencia, pero sus ojos mostraban un dolor innegable. Lauren estaba deseando algo, Camila simplemente no podía identificar qué.

Grace aún no estaba despierta, así que Camila decidió preparar el desayuno. Como vivío sola la mayor parte de su vida, tuvo que aprender a crear algo comestible para ella. Bueno, la tortilla y el tocino no suenan tan destructivos.

Camila encendió el fuego, sintiendo la quemadura en sus palmas desde lejos para ver que estuviera bien. Poco después de poner la sartén en la estufa, ella preparó café para Lauren, de la forma en que Grace le enseñó. A Lauren le gustaba su café con un simple jarabe y leche, pero no demasiado dulce como para dominar su amargura.No pasó mucho tiempo antes de que tuviera sus huevos calientes y tocino frito, el café de Lauren esperando en la mesa. Todavía no ha pedido perdón por su pecado, pero esto podría ser un comienzo, aunque puede que no sea mucho.

"Grace..." dijo una voz desde el pasillo. "¿Está listo el desayuno? Me muero de hambre".

Camila se encogió. Lauren no se despierta hasta las 8 am, mientras que Grace a las 7 am. Era raro que los dos tuvieran esos relojes corporales, pero lo hacen. No estaba segura de cómo Lauren tomaría el desayuno que preparaba, teniendo en cuenta el gusto único de la mujer por la comida.

Los pies de Camila se sentían como si pesaran mil libras, no podía alejar su cuerpo del comedor. Y cuando Lauren apareció a la vista, las dos solo pudieron mirarse la una a la otra, procesando la escena ante los ojos de la otra.

El cabello de Lauren estaba desaliñado, con algunos mechones sobresaliendo de su cabeza. Sus ojos estaban caídos, anhelando dormir más, y los labios ligeramente separados. Ella estaba usando su pijama del Rey León, y Camila tuvo que asegurarse de que sus ojos no estaban jugando con ella. Era la primera vez que veía a Lauren usando ropa tan infantil, totalmente lo opuesto a su aspecto maduro en la oficina o en las calles.

Lauren vio que el desayuno estaba listo, y estaba a punto de saltar de alegría para satisfacer su hambre cuando la persona que estaba junto a la mesa no era la persona que esperaba que fuera. Era Camila. Estaba parada detrás de una de las sillas, con un delantal.

"B--buenos días". Camila saludó a Lauren, inclinándose respetuosamente.

Lauren solo reconoció tal acto con la menor señal de asentimiento, un insulto. "Tú cocinaste." Ella dijo fríamente.No parecía una declaración, debía tomarse como un insulto. Camila hizo todo lo posible para no ofenderse por el tono de Lauren.

"Sí, lo hice. También hice café para ti".

Lauren sonrió para sí misma y se dirigió a la mesa. Miró a Camila y tomó el plato y el café en sus manos. Ella se dirigió a la cocina. Camila la siguió.

"Lauren, ¿a dónde vas?"

"A deshacerme de la basura". Lauren fue al fregadero y vertió todo el contenido del café, sin dejar ninguna gota. Ella se rió entre dientes. Camila se quedó inmóvil. Fue una batalla indefensa, y todo lo que podía hacer ahora era agarrarse al delantal, temerosa de que si lo dejaba ir, la destruiría. Pero Lauren no había terminado, por supuesto.

Fue al cubo de la basura, con el plato en mano. Lauren lo abrió, pero antes que nada, sus ojos se dirigieron a Camila. Ella tenía una sonrisa burlona en su rostro.

Ella dejó caer el plato intencionalmente lejos del zafacón, por lo que cayó al suelo. Las piezas reflejaban el corazón de Camila. El plato ahora hecho añicos y la comida se desperdició.

"Oops ..."

"Limpia tu desastre." Lauren sacudió su pijama y comenzó a alejarse.

"¿Debería arrancarte el corazón yo misma y verte sangrando? Debo admitir ..." Lauren se detuvo en seco, girando hacia atrás para enfrentar a Camila.

Una sonrisa.

"Que te ves adorable cuando estás herida".

No odien a la idioma por favor, confíen en mi cuando les digo que vale la pena seguir leyendo jejeje, también les quería decir que si tienen algún otro fanfic u otra historia en inglés que quieran leer traducida, me pueden sugerir, yo podría hacerlo luego que acabe esta. Paz y amor.

Escuchen ''Más allá'' de Gloria Estefan para que llenen su corazoncito de amor y soporten a Lauren mientras esté en su fase de ''el odio es mi escudo'' jajajaja ok bye.