One word, four letters

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"Yo seré quien se quede para ti".

Camila recordó lo que Lauren había dicho esa noche. Las palabras que salieron de la boca de Lauren se convirtieron en sus estrellas en el cielo nocturno, la mantuvo despierta, mirándolas hasta que ella se dio cuenta de que los humanos necesitaban dormirse. Los brazos de Lauren la rodeaban, abrazándola, y lo único que Camila quería esa mañana era despertarse con el mismo toque, despertar a la misma cara.

Si abriera sus ojos a Lauren después de que ella se sumergiera en el reino del sueño, Camila nunca dudaría en cerrar los ojos, porque sabía que Lauren estaría allí una vez que los abriera.

Camila extendió la mano hacia una de las manos de Lauren que estaba sobre su espalda y la arrastró por delante. Ella tomó su mano y la puso sobre su pecho, donde estaba su corazón, donde más le duele a Lauren. Camila no sabía si la arreglaría o la rompería de nuevo, pero era adecuada para el deseo de su corazón.

"¿Sientes eso, Lo? ¿No puedes sentir cuánto late gracias a ti?"

Y Lauren se despertó en ese momento, y en la luz del sol envolvió a Camila en un abrazo más apretado, sonriéndole soñolientamente, pero con los ojos cerrados.

"Buenos días, Camz". Y derretía el corazón de Camila.

Cuando Camila se encontró con los ojos de Lauren, ella entró en el amor con un poco más de certeza a sus pasos.

"Buenos días, Lo".

"¿Lo?" Respondió la pregunta de Lauren con una linda cara soñolienta y confundida.

"Sí, Lo. Es lindo. Adóptalo mujer". Camila ligeramente golpeó la nariz de Lauren.

"Bien bien."

Lauren besó la frente de Camila con una tierna sonrisa.

Entonces Lauren solo notó que su otra mano estaba presionada sobre el pecho de Camila. Pero no quitó su mano, porque sintió que la piel de Camila se desenrollaba lentamente para revelar su corazón. Susurraba lenguas extranjeras que aún tenía que entender. Cada latido manifestaba una imagen solemne de la pasión emocional de Camila por ella, pero aún así, aún no lo había comprendido.

Y ahora, mirar a Camila hizo que Lauren sintiera hormigueo, su cuerpo, su corazón, sus propios miembros. Y encontraron sus caras cerca una vez más, sus labios ahora cometas que están lo suficientemente cerca para colisionar, pero lo suficientemente tímidos como para perforar la galaxia que estaba entre ellos. Pero Camila demostró ser un hechizo de hechicero cuando Lauren se sintió persuadida hacia ella.

Ella tenía sus ojos en los labios de Camila cuando sus narices se conocieron. Lauren no negaría que estaba abrumada con un fuerte afecto por Camila, había dicho las palabras que lo expresaban. Ella conocía ese tipo de afecto demasiado bien. Excedió la dimensión de uno platónico.Sus labios rozaron uno contra el otro en cierta medida. Su contacto íntimo estaba enterrado bajo la piel de la Tierra, apenas se tocaban los labios, pero sentían que su magia se movía como el magma, pero lentamente les quemaba las entrañas.

Pero terminó antes de que pudiera comenzar.

Grace, su propio interruptor personal, una vez más había estado a la altura de su título cuando ella abrió la puerta. Las cabezas de Lauren y Camila repelieron casi como los mismos signos de un imán, pero todavía sentían el avance del magma debajo de sus pieles, en alguna parte cerca de sus corazones.

Lauren estaba a punto de decir algo cuando notó el pequeño paquete que Grace tenía en sus brazos.

"Es hora de que conozcas a la bebé". Grace se acercó a Camila y le reveló a la niña que había permanecido escondida durante los últimos nueve meses.

Señorita CabelloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora