Interludio ✦ Jung Hoseok - Min Yoongi

CAPÍTULO CUATRO

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Hobi:

Espero ser capaz explicarte las cosas como tú te mereces, y espero que mis palabras y decisiones no te causen dolor alguno.

Es extraño como creamos nosotros mismos ese espiral descendente. Es extraño como ese inconsciente impulso autodestructivo descansa en nuestro interior. Pero ¿sabes qué es más extraño aún? Como buscamos culpables. Como miramos hacia atrás intentando encontrar al dueño de las manos que nos han empujado al vacío, cuando en realidad hemos saltado solos, cuando el responsable no es nadie más que nosotros mismos.

Creo que no hace falta decirte cuan difícil han sido estos meses para mi, pues los has vivido a mi lado.

Y la verdad es que aún no puedo afirmar que no lo extraño, debo confesarte que no sé si podré hacerlo en algún momento. Porque a pesar de que no fueron sus manos las que me empujaron al vacío, siempre sostuvo la mía mientras caía conmigo. Sin dudas, él fue mi compañero en este nocivo camino en el que nos metimos por voluntad propia. Él fue mi droga Hobi, aquel narcótico que ocultaba mis falencias. Y tú, tú has sido mi xanax.

Eso he logrado entender, en estos meses de agonía necesaria e introspección ineludible. Lo he visto tan claro que aún no puedo comprender como mi mirada lo había ignorado todo este tiempo. Aunque supongo que es natural. Una vez que encuentras las respuestas eres capaz de evocar el pasado y señalar aquellos errores sin titubear.

Yo puedo hacerlo ahora Hobi, puedo decirte cada uno de ellos. Puedo explicarte que me equivoque al empeñarme en ser querida por alguien que estaba tan confundido como yo misma. Puedo decirte que mi error estuvo en aceptar mi continua disconformidad, o en mi insoportable necesidad de sentirme irreemplazable.

Podría hacer ahora mismo una lista interminable de equivocaciones, pero no es detectar los errores lo importante para salir del vacío, sino encontrar la verdadera razón por la cual los cometemos. Y eso cariño es lo que quiero explicarte.

Aquella idea se había pavoneado un par de veces por mis pensamientos, se había hecho presente en sueños, en pequeñas preguntas que surgían en mi cabeza, pero siempre oculta tras otras causas, tras otras sensaciones.

Pero hace unos días pude aceptarla realmente. Pude pronunciar claramente la razón de mis desaciertos, pude hacerlo en mi cabeza e incluso en voz alta.

Hace unos días recibí un mensaje de su parte. Cuatro simples palabras que fueron el detonante que necesitaba para aceptar al fin mi verdadero defecto.

"Aún pienso en ti"

No te voy a mentir, no voy a decirte que aquello no aceleró mi pulso y que no ponderé en mi cabeza la posibilidad de correr en dirección a su casa. Pero la pregunta que me urgió al leer su mensaje, fue lo que me detuvo.

"¿Por qué ahora?" Pensé. "¿Por qué pensaba en mi ahora que no estaba a su lado? ¿Cuál es la diferencia entre ahora y antes?".

Y lo entendí. La diferencia era clara. Aquella noche que en la que por fin le dije adiós, lo que inconscientemente hice fue cuidarme. Quererme.

Y esa es la única verdad Hobi. Todos estos años no he sido capaz de quererme. Y si no te quieres a ti mismo, realmente no puedes lograr que otros te quieran. Nunca iba a obtener de él lo que necesitaba porque lo estaba buscando en el lugar equivocado.

Ese es mi verdadero error. La causa oculta detrás de todas las otras equivocaciones que surgieron como simples consecuencias.

Y esa es la razón de la petición que te hice ayer.

Quiero que sepas Hoseok, que tuve que reunir un valor que creí que no tenía para pronunciar aquellas palabras. Porque mi verdadero impulso fue perderme en tus labios, y llenar mi corazón con tu cálida confesión.

Ayer cuando tu boca volvió a la mía luego de meses. Ayer cuando por fin pude volver a probar tus labios, y esta vez en compañía de todos mis sentidos. Ayer, estuve a punto de saltar al vacío otra vez.

Pero no puedo Hobi. No quiero.

No quiero que tú seas mi xanax. No quiero cambiar una adicción por otra. No quiero tener que sentir que tú me quieres para quererme también, o que ni siquiera soy suficiente para merecer el amor de alguien como tú.

Por eso cuando en medio de aquel dulce beso dijiste que debías confesarlo, te pedí que no lo hicieras.

No porque no quiera escucharlo. Créeme que tus labios hablando de amor es mi más grande deseo, y de verdad, lamento tanto no haberlo entendido antes. Pero quiero ser capaz de responderte de la misma manera.

Quiero ser lo que mereces. Quiero quererte como es debido, honestamente, sin pretensiones. Amor del bueno.

No quiero que tus manos sientan que deben sostener mi peso. Quiero se unan a las mías y caminar a la par.

Todo este tiempo me he negado a verte porque el miedo de no ser suficiente me cegaba.

¿Recuerdas que dije que el amor era para los valientes?

Hoy puedo repetir aquello con más determinación. El amor es para los valientes, porque debemos querernos primero, y eso cariño, es la parte difícil.

Por eso te dejo esta carta hoy. Porque aún no estoy segura de haberlo logrado. Porque temo que tus ojos me hagan caer nuevamente en aquel espiral, y que me impidan lograr andar este camino tan necesario.

Nunca ha sido tu culpa sino la mía. Por eso te pido perdón al hacerte esta pregunta y siéntete libre de maldecirme cuanto quieras, pero:

¿Podrías esperarme Jung Hoseok?

Si tu respuesta es si, lo sabré en mi regreso, y a cambio prometo amarte sin miedo alguno.

Si tu respuesta es no, déjame agradecerte. Pues tus brazos siempre han sido los que amortiguaron mi caída.

Siempre tuya, siempre mía.

Sumin.
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