Blaze Stilinski #1 | Teen Wolf

Cap.51: Y cuando pensé que sería una buena noche...

Capítulo basado en el episodio 1x11. Parte 5/5

Capítulo 51: Y cuando pensé que sería una buena noche...

Llegamos al baile formal de invierno y entonces, estaciono la camioneta que vengo conduciendo en el aparcamiento de la escuela.

—Oye, Blaze, espera—me llama Marko cuando bajamos del vehículo y estoy por irme hacia la mesa donde venden las entradas del baile.

— ¿Qué pasa?—inquiero girándome a verlo, él está sacando algo de la guantera de la camioneta.

—Toma, este era el regalo del que hablábamos—me dice entregándome un pequeño paquete envuelto en papel de regalo rojo con lunares blancos.

—Mark, es un baile formal, no Navidad ni una cita. Lo sabes, ¿verdad?—advierto arqueando una ceja y mirándolo.

—Sí—ríe nervioso —. Pero vamos, sólo ábrelo.

Abro cuidadosamente el paquete y adentro me encuentro con un osito de peluche marrón claro que sujeta un corazón con la frase "Love".

— ¡Ay, Marko...!—exclamo completamente conmovida.

— ¿Te gusta?

— ¡Por supuesto que sí! Me encanta. ¿Cómo sabías que adoro los peluches? Esto es tan tierno de tu parte..., cursi pero tierno—expreso, y le doy un beso en la mejilla y un abrazo como agradecimiento —. Por cierto, me gusta lo cursi—aclaro con una risita.

— ¿De la misma manera que te gusta lo raro?—curiosea con una sonrisa.

—Umh..., sí, algo así quizás—admito encogiéndome de hombros.

En eso, observo a unos autos de distancia que llega Stiles con Lydia. Él se apresura a bajarse primero para abrirle la puerta a Lydia y esta se baja sacudiéndose el vestido como si el interior de Roscoe tuviera suciedad. Siento un vuelco en el estómago y luego aprieto los puños con bronca.

—Ey, oye, ya déjalo. No te amargues por eso—me calma Marko tomando y acariciándome el antebrazo izquierdo a la vez que me mira a los ojos.

Suelto el aire contenido mirando hacia abajo y asiento con la cabeza.

—Sí, tienes razón.

Guardo el paquete con el osito en mi bolso, el cual según mamá "no era adecuado para traer al baile" pero de todas formas lo traje.

—Bonito bolso. Me gusta el diseño de perritos, es realmente tu estilo—comenta el castaño, sorprendiéndome.

—Eh..., gracias.

Entrelazamos nuestros brazos como las demás parejas que van llegando al baile y finalmente caminamos hacia la mesa de las entradas.

Me encanta cómo me ha tratado Marko todo este tiempo, pero yo... Yo no puedo entender cómo no me puede gustar. Es decir, me encanta que me trate de esa manera tierna, que siempre aprecie esos gustos raros míos, y me encanta que se preocupe por mí y me haga sentir especial. Pero yo...no logro verme con él en una relación, es decir, como novios, besándome con él o haciendo esas cosas que haces con tu novio (o lo que yo creo que se hace, al menos); eso sí me lo imagino y quisiera experimentarlo con Isaac. Pero con Marko..., sólo sigo sintiéndolo como un amigo y aunque lo intente, no me sale verlo de otra manera. Y eso me molesta y me duele porque él ha sido tan lindo conmigo últimamente y no decirle la verdad me hace sentir como una perra (no en el sentido del animal).

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Cuando entramos al gimnasio de la escuela y veo todos esos adolescentes..., un sentimiento de ansiedad me invade.