Alex, El Mito Andrógino

Alex 17 y la representación de Carla

- Por fin has vuelto idiota- Dice parando para respirar

Vuelvo a quedarme colgado de sus ojos reconociéndolos.

- Tu si que tardaste en aparecer- Se ríe y me besa

- Lo bueno se hace esperar ¿no?

- Maldita

Vale, ya voy a parar con la ñoñeria, pero el momento se lo merecía, me había reencontrado con mi novia.

Tras dejar los "saludos" me acuerdo de para que la buscaba en un principio

- Carla, en cuanto lo de transformarse...

- Si, tranquilo, sé para qué lo quieres y no debe tardar mucho, sólo faltaba un pequeño empujoncito emocional- Así funcionó la primera vez (y también la que he contado anteriormente)

Y así fue, aunque por suerte recordaba lo que era transformarse mientras estaba consciente, si no lo hubiera hecho probablemente me hubiera desmayado. No es nada fácil sentir todo tu cuerpo moverse, reajustarse bajo tu piel y, para acabar la peor parte, las zonas sensibles. Notar cómo se ponían en su sitio transformándose en un pequeño dolor agudo que se mantenía un rato hasta que se ajustaba en su sitio, imagínate que te pasa eso sin esperarlo.

- Hola de nuevo "juguetona"- dice Carla sonriendo picaramente

He de aclarar eso. Un día de verano se me ocurrió la brillante idea de probar cosas los dos en el mismo sexo y empezamos por el femenino, yo me emocioné en el proceso y Carla me freno, por suerte, y se lo tomó a risa, desde entonces me llama así cada vez que coincidimos siendo chicas

- Hola señora motes, cuanto tiempo, curioso que la última vez no me llamases así

- Tenía un pequeño papel que quería hacer ante ti

- No vale, estaba influenciada por tu poder

- Se siente- Y salta a mis labios

Si, lo echaba definitivamente de menos.

Seguimos con nuestro reencuentro un buen rato, hasta que decidí apartarme e ir hacer lo que había ido hacer, porque si no lo hacía podría seguir haciendo eso durante mucho rato (Sólo besos, tranquilo). Al irme Carla me dio un traje de baño que ya se había preparado, me conocía demasiado bien. La volví a besar y me fui con la cara como un tomate, había cosas priorativas.

Me tire a la piscina de cabeza y sonreí. Sabía que necesitaba eso, necesitaba notar la misma sensación desde los dos puntos y por fin empezaba a ver las diferencias, los recuerdos más claros (que Carla se hubiera revelado ayudaba).

Por fin controlaba mi poder como descendiente, ahora sólo necesitaba saber mi habilidad y ya empezaba a tener una idea.

Salí del agua y vi a Carla esperándome en la puerta.

- ¿No entras?

- No, mejor otro dia, yo sólo quiero recuperar estos tres meses

- Y yo era la juguetona...

- Calla idiota, no sabes lo doloroso que era verte sin que tu me reconocieras- Dijo la dramática

- Total, que tu quieres jugar, aunque yo no debería, soy más joven y eso- Por dos años y legalmente eso no era correcto, igualmente a Carla le gustaban los retos y trataba de llevarme al lado oscuro

- No me tientes juguetona

Y saltó encima de mi quedándonos al borde del agua, yo como buena menor de edad la tiré al agua. Recordaba que llevaba todo el verano buscándome y sólo porque había vuelto ahora, no caería.