✿┊El inquietante sonido de los corazones rotos, rompe el alma de cualquiera, el fatídico sentimiento de pérdida... arrasa con muchos en la actitud rebelde de un tercero. ¿Por qué no hay solución para algo tan "simple" cómo atrapar a un asesino?, qui...
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[ P R E F A C I O ]
Las gotas de lluvia se podían escuchar con bastante claridad en las ventanas de aquella habitación, las calles estaban solas, mientras el claxon de los vehículos se escuchaban en la lejanía. Sentada en una esquina, en la habitación de un hospital psiquiátrico; una chica sujetaba con fuerza su cabeza, siendo monitoreada por su psiquiatra, a lado de este se encontraban sus padres, quienes, de una forma bastante obvia, se veían bastante nerviosos y preocupados. Una serie de imágenes pasaban por la cabeza de la paciente más joven que tenían el alienista, imágenes que podían dejar traumado a cualquiera que las pudiera ver. Chloe Shuzenji tenía sus ojos abiertos pero las imágenes de los asesinatos seguían pasando por su cabeza, por sus ojos y, de una forma bastante clara, podía escuchar los sollozos de las personas. Todo un horrible panorama que una chica de quince años no debía de ver nunca; pero, que nadie podía explicar de dónde se originaban.
En la cabeza de la joven, ella se veía a sí misma cometiendo aquellos atroces actos. Uno por uno, ella acababa con la vida de aquellos inocentes: niños y personas de avanzada edad. Levantándose de golpe, comenzó a golpear la pared a puño cerrado, lastimándose en el acto ya que, a pesar de no poder diferenciar su realidad, sentía que merecía sufrir por lastimar a esas personas.
¿Desde cuándo tenía aquellas "pesadillas"?, nadie lo sabía con exactitud. Los padres de Chloe; Anne y Azusa, nunca habían recurrido a un psiquiatra pero, debido a la actitud de su hija y a el hecho de que ella hubiese recibido una beca para entrar a una prestigiosa escuela, habían optado por buscar a un especialista, se preocupaban por su hija pero también por lo que pensaría el director de aquella Academia de ella.
— ¡deténganme por favor!, ¡soy una asesina!—aquel grito salió de la garganta de Chloe, lastimando sus cuerdas bucales. El psiquiatra y sus padres vieron con sorpresa, como en la mejilla de la chica aparecía una cortadura bastante profunda, la cual comenzó a sangrarle.
Mirando el monitor, el psiquiatra se dio cuenta de que, a pesar de los continuos ataques de la chica, no había ninguna anormalidad en su cerebro. Algo que, sin poderlo evitar, causó que se moviera de su lugar sorprendido.
Todos los estudios que había realizado, no habían arrojado nada.
¿Cómo saber si Chloe no se dañaba así misma con su propia peculiaridad?, los padres de ella no sabían qué clase de Quirk tenía; pero, estaban seguros de querer llegar al fondo de eso.
Llegaron a la teoría de que, quizá solo era un capricho de la chica y un trauma causado por algo. Muchas películas de horror o, algo que pasó en su instituto, nadie podía corroborar nada ni había pruebas sobre ello, a los ojos de los especialistas y profesionales, Chloe no tenía nada. Él alienista concluyó que eran la falta de sueño y el estrés, que, debido a la corta edad de la castaña, aumentaban su inusual forma de actuar, pero comenzaba a tener sentido el hecho de pensar que la chica poseía múltiples trastornos.
Quitándose aquellos cables y electrodos que tenía en su cabeza, Chloe comenzó a respirar agitadamente. Aquel lugar, el olor y el color comenzaba a irritarle, en definitiva odiaba los hospitales. Mirando sus temblorosas manos las apretó con fuerza, realmente estaba cansada de aquello, por lo que la castaña llego a una conclusión: la mentira. Se sentía miserable, la gente la observaba como una loca y con desprecio al saber a qué academia se cambiaría.
Estaba dispuesta a sufrir en silencio, por ahora.
Desde que tenía ocho años y le habían robado su collar especial, había tenido aquellas pesadillas que, actualmente, estaban destruyéndola. De solo pensar en el lugar en el que estudiaría, Chloe se retorcía de coraje sabiendo que un día tendría que hacer uso de "eso". Su peculiaridad desde el momento en el que la había despertado la ocultó de sus padres, la odiaba, se odiaba y odiaba en si los Quirk.
Sus padres entraron a aquella habitación, acercándose a ella para limpiarle aquella herida que había aparecido en su mejilla. Ojalá se tratase de solo eso ya que, todo el tiempo, Chloe tenía heridas misteriosas luego de tener sus pesadillas, heridas sin sentido, heridas que no podría realizarse de esa manera, heridas que originaban cicatrices emocionales, físicas y mentales.
Nadie podía comprender que, ella se sentía una asesina; pero, Chloe buscaría una manera para que la detuvieran.
Cada "pesadilla" describía los asesinatos de los que se hablaban en las noticias, sus formas de morir y, el aspecto físico que tenían. No era solamente una coincidencia y, en todo momento, se mencionaba que no se sabía sobre el asesino, su Quirk no tenía nada ver con eso, por lo que daba por hecho de ser una asesina.
Una asesina que exigía ser detenida, pero que nadie creía que lo fuera.
El peligro, que todos veían solamente con lastima y rechazo.
Chloe aprovecharía aquella academia, para que la detuviesen y no causará más daño a nadie. Una escuela prestigiosa de héroes era la mejor opción que tenía para eso, y si tenía que fingir que se había "curado" lo haría.
Los villanos merecen ser encerrados. Quizás ella era el títere de alguien, quizás no; pero...
Debía de sufrir las consecuencias y de ser posible, terminar su agonía.
•••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••• Aquí un nuevo fanfic, el cual será corto. Fue escrito en mis tiempos libres, no sé si sea de su gusto; pero, hice lo mejor que pude para escribirlo. No están escritos todos los capítulos hasta ahora, por lo que algunos los escribiré sobre la marcha. Aún no soy buena escribiendo cosas, pero sigo estando en práctica. Actualmente solo tengo seis capítulos escritos.
