Capítulo 6: Intrumentos de él

29 0 0
                                    

Un instrumento es un objeto fabricado, simple o formado por una combinación de piezas, que sirve para realizar un trabajo o actividad.

Sin duda alguna está definición es la más acertada para este tópico a tratar.

Iniciaremos hablando por lo más elemental del concepto anteriormente mencionado: "objeto fabricado"; al aplicarlo a nosotros como seres humanos entendemos que somos hechura de él, obra de sus manos.

Reconoced que Jehová es Dios; El nos hizo, y no nosotros a nosotros mismos.
Salmos 100:3a

El punto en el que realmente deseo hacer énfasis es en el de "formado por una combinación de piezas". Probablemente has escuchado que el ser humano (ya en un ámbito un poco más abstracto) es un ser tripartito, es decir, está compuesto por tres partes, a estas les quiero llamar piezas, las cuales son: cuerpo, alma y espíritu. La combinación de estas piezas hace que este instrumento realice eficazmente su función para la cual fue diseñado.

Pero, ¿Cuál es la función  de nosotros como instrumentos del Señor? Fácil, ser un utensilio de uso honroso para él. Ahora que ya sabes tu función, tal vez te preguntes: ¿De qué forma me ayudan esas tres partes a cumplir con mi misión? Permíteme explicarte querido lector:

1-Cuerpo: es la estructura física y material del ser humano. Esta es la herramienta para llevar acabo las buenas obras.
2-Espíritu: es la chispa de vida de todo ser humano. El espíritu es lo que anima el cuerpo y actúa como mediador entre éste y el alma.
3-Alma: es esa entidad que es responsable de nuestros sentimientos, voluntad, deseos, etc. Esta es la responsable del deseo de nosotros de servirle a Dios y es muy importante resaltar que es inmortal, por lo tanto, al morir está pasa a otro plano o lugar llamado Seol. El alma va mucho más allá de constituir un ser abstracto, es todo lo que realmente somos.

Cada uno de estos fragmentos son esenciales para llevar acabo nuestra tarea.

Pero la principal función del ser humano, ¿sabes cuál es?:

Y amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente y con todas tus fuerzas. Este es el principal mandamiento.
Marcos 12:30

En este versículo podemos ver que el amar a Dios conlleva la integración de nuestro Ser, que es el conjunto de todas nuestras partes. Cuando menciona que amemos a Dios con todas nuestras fuerzas podemos interpretar que se refiere a nuestro cuerpo; al decir mente, involucra aquello que no podemos ver, por lo tanto, guarda relación con el espíritu, y ya explícitamente nos dice que lo hagamos con toda nuestra alma.

Como ya había mencionado en capítulos anteriores: si lo amamos, guardaremos sus mandamientos, y al cumplir con estos seremos indudablemente un instrumento suyo.






Dios te bendiga siempre.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Apr 23, 2018 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Hasta ser como ÉlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora