¿La verdad?

19 2 0
                                    

-Jenny, recoge todo y metelo a tu mochila, él sigue aquí.

-¿¡Pero qué!?

Ahí quedó todo, se fue corriendo a hacer una especie de maleta con lo más importante dejando los trastos inútiles en esta cuadra de apartamento.
Creo que nunca averiguaré el secreto del armario del pasillo. Ee.. que, ¿qué secreto? ¡VENGA YA! Es obvio que ese armario esconde algo, porque no es normal que esté un pedazo de armario en un pasillo tan pequeño que casi lo ocupa entero, y que por arte de magia, salga una notita que dice: "sigo aquí". Quiero averiguar YA lo que es.

Preparé la "maleta" y salimos corriendo de esa casa.
No teníamos ni idea de que hacer en ese momento. Así que lo único que se me ocurrió preguntarle a mi padre fue: "¿Cómo sabes que él sigue aquí?" A ver, era obvio que "él" seguía aquí porque me dejó una nota aquella vez. Pero lo que yo quiero saber, es si mi padre encontró la misma nota, o quizás, pasó algo y como no, no llegó a mis oidos.

-Papá.
-¿Si?
-¿Estás bien?
-Yo estoy genial.
-Papá. ¿¡Por qué mientes!?
-Yo no te miento hija.
-¡¡ENTONCES CUENTAME QUE TE HA PASADO HOY Y POR QUÉ ESTAMOS AQUÍ Y NO SOMOS UNA FAMILIA NORMAL, QUE VIVE NORMALMENTE COMO OTRA CUALQUIERA!! EN RESUMEN, ¿me vas a contar algún dia todo esto? ¿O moriré con la intriga?, ¿No crees que ya he tenido demasiada paciencia?
-Hija, son demasiadas preguntas, problemas, cosas. ¿Que tal si hacemos un trato?
-Papá, no quiero tratos ni mierdas de esas como las que dices todos los días. Estamos aquí en un puñetero banco de mierda en pura madrugada, mamá se ha dormido en tu hombro, y tú y yo estamos discutiendo solo por saber la verdad.
-Tienes razón, ¿vale? Pero escuchame.
- Escucho.
-Te quiero proponer un trato, si quieres cumplir el trato, escogeras la vida. Y si no quieres cumplir el trato, escogeras la muerte.
-¿¡Pero qué mierda!? ¿M-me vas a matar?
-NO, JODER. Nunca podría matarte, pero él si.
- ¿Cómo?
-Dejame hablar. El trato consiste en que debes decirme TODO lo que te pase referente a lo paranormal, o referente a "él".  Te lo agradecería demasiado, por tu vida, y tu seguridad.
-Está bien, tengo muchas cosas que contarte entonces.
-¿¡!? A QUE ESPERAS.
-.....

Se lo conté todo, si exactamente todo lo referente a "él ", si, la nota, el sueño de mi padre ahorcado, El otro sueño del bebé, la tabla, y basicamente TODO.
Depués de la larga charla, me agarró muy fuerte y me dijo: "Ese sueño del bebé, cuando me lo contaste el otro día, no podía casi ni hablar, y no estuve en casa en todo el día, tú madre y tú estabais muy preocupadas por mi, pero mi situación no tendría que haber sido la preocupante, sino la tuya y la de tu sueño. En ese sueño se esconden dos secretos, que tú irás averiguando."

Me quedé muy en "shock" porque no entendia muy bien lo que me decía. Era una fusión de problemas continuos, palabras, pesadillas, y todo se repetía una y otra vez en el mismo tema. Lo único que entendí fue: "Se esconden dos secretos en ese sueño (el del bebé) Que tú irás averiguando.

Justo en ese momento mi padre llamó a alguien, no, yo no sabía quien era y eso me preocupaba. Él mientras hablaba por teléfono con esa persona, yo estaba pensando en sus palabras y en lo que me dijo, también pensé en posibles teorías de los secretos que se podían ocultar en esa pesadilla. Pero ninguna era decente ni encajaba con todo.

-"Jenny, cariño, tenemos que irnos, he contactado con el que nos tenía evacuados, pasaremos cuatro noches en el centro de evacuados." -Dijo mi padre.

Y ya partimos y nos fuimos los tres a ese terrorífico centro, de nuevo.
Yo ya no podía más, algo se estaba apoderando de mi, algo que no me dejaba seguir adelante si no sabía ya la respuesta de quien era "él".  Noté algo, una sensación que no creo que nadie la haya sentido alguna vez en su vida,Un calor brutal, noté algo horripilante que nadie desearía notarlo en su pobre, triste y miserable vida.

-Papá.
-¿S-si?
-Estamos aquí de nuevo.
-Hija, yo ya no puedo hacer nada más.
-Si puedes, NO MIENTAS. HAS VUELTO A MENTIR. HAS MENTIDO. NO MIENTAAAAAAAAAAAAAAAAS.
-Hija... no te entiendo.
-¿NO? ¿NO ME ENTIENDES? BIEN, YO HARÉ QUE ME ENTIENDAS.
-¿Hija? -Me puso una cara de estar jodidamente asustado.
Me fijé de que mi madre estaba bien dormida y fui a la despensa del centro. Cogí una navaja, y yo ya no era la misma. Era como si una sustancia psicopata se hubiera metido en mí. Y le amenacé.

-¡DIME ESOS SECRETOS! -Saqué la navaja.
-¿¡QUÉ!? SUELTA ESA NAVAJA.
-NUNCA, HASTA QUE ME DIGAS QUIEN ES ÉL.
-ESTÁ BIEN. Te diré algo, uno de esos secretos, que quizás nunca pensaste que podrías averiguar. Lo que soñaste de un incendio y un bebé, te lo explicaré todo. Tú eras ese bebé, pero esa mujer que estaba cuidandote no era tu madre.

-¿¿??

-No voy a decir ahora quien era, pero solo una hija de la gran..

-Shh..

-Ella te abandonó, como tu dijiste, y te dejó sola. Quiso olvidarse de ti. Y nunca más verte. Al quedarte sola, la falta de nutrición, leche, agua, estrés y soledad, se acumularon y empezaste a llorar. Aquel hombre, seguramente pensaste que era "él", pero no. Nadie supo quien realmente fue, pero te puedo confirmar que no fue "él" .  Ese hombre quiso matarte, lo mismo que quiere hacer "él" pero no pudo. Aquella noche en el incendio,
te caiste de la cuna, y te hiciste una herida grave que afectó al cerebro. Más el fuertemente calor que hacía dentro de la sala donde fuiste abandonada empeoró la situación. Pudiste ser rescatada, y mediante cirujias que pagamos, quedaste con un aspecto decente.

-Osea que... ¿aquella pesadilla fue un recuerdo de mi verdadero y oscuro pasado?

-Exacto, pero eso no es lo único que quería decirte desde mucho tiempo. Basicamente quería decirte,

que "él" Eres TÚ.

El problema que afectó a tu cerebro, era una psicopatia con un nombre peculiar del que nadie padece, y ocurre cuando te sientes sola, abandonada, crees que te ocultan algo y unas imaginaciones te hacen creer que alguien te persigue o tu cerebro hace que formes ruidos y tú no te des cuenta de que eres tú la que lo provoca. Entonces, te entra un estrés incalculable que solo puedes revelar los secretos o esas cosas que te ocultan por mucho tiempo amenazando con la muerte.

-........... Ahora lo entiendo todo. -De inmediato me sentí normal.

-P-pero.

-Entonces, ¿por qué quiero matarme a mi misma? ¿Tiene que ver con la enfermedad?

-A eso iba, hija eso todavía no puedo decirtelo, sigue habiendo otro secreto. ¿Te acuerdas del armario ese que me dijiste? Ese que había una nota. Que se supone que la escribió "él" (tú). Pues permiteme decirte, que ese tal "estoy aquí" no fuiste tú. Fue ese secreto que todavía no te puedo revelar.

-.......

No aguantaba más, ¿esto era real? De verdad que no me podía creer que esto me estuviera pasando a mí.

-Hija, no estás sola....

CONTINUARÁ....





El estruendo nocturno...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora