Era al dia siguiente. Me puse un pantalón rosa y una camiseta blanca. Salimos a desayunar.
-Mama, ya hemos terminado de desayunar. ¿Podemos dar una vuelta por ahi? -le dije.
-Claro. Luego os llamo a ver por donde andais.
Salimos. Estabamos hablando de nuestras cosas cuando nos chocamos.
-Tio mira por donde vas, que me has pisado. -le dije gritando.
Alze la vista cuando los vi, tan iguales.
-Lo sentimos guapetonas. Somos jesus y daniel. Encantado.
-Nos tenemos que ir. Adios.
Le cogi de la mano a mi amiga y nos fuimos. Nos sentamos en un banco.
-¿Has visto? Me han hecho daño y con un perdón noblo soluciona.
-Joder tia, pero son guapisimos. No me digas que no.
-Si, si yo no digo que no sean guapos. Digo que me han hecho daño.
Me estaba limpiando el zapato, estaba sucio cuando mi amiga me estaba dando.
-¿Que pasa?
-Mira quien viene.
Mire, eran ellos. Me puse nerviosa. La verdad esque eran muy guapos.