¿De quien es?

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A lo lejos se escucha un ruido extraño, es el sonido de la alarma que puso Rodrigo un oficial recién incorporado al servicio en aquel lugar, una pequeño pueblo el cual no le gustaba para nada mas que por estar con Andrea la chica que conoció en un hospital como enfermera hace un par de meses.

Cuando en el robo a una tienda de autoservicio le dispararon 3 veces dejándole una herida grande en el costado izquierdo la cual le atendieron en seguida al llegar al hospital pero a él se le olvido el dolor al verla.
-Herida de bala se esta desangrando.- alguien dice alarmante a lo lejos pero Rodrigo ya se siente mareado y le cuesta trabajo mantener la cabeza erguida ya que no quiere recostarse como le indicaban.
-Señor necesito que se recueste bien para atenderlo - le indicaba Andrea al verlo
-¿Que es esto? Morí y llegue al cielo?- expresaba con una sonrisa atenuada por un gesto de dolor.

Ella le contesto con una sonrisa agridulce.

-Necesito que se recueste bien -le repetía ella
--No, enserio no quiero dormir para ya no despertar -
-Es lo que tratamos de evitar -
Al momento en que Rodrigo pierde el conocimiento y el doctor grita
-tiene un paro cardiaco, desfibrilador - entonces lo reaniman pero ya sin fuerzas solo alcanza a verla para caer vencido, débil por la perdida de sangre.

Días después al ya estar en recuperación recibía atención de diversas enfermeras menos de la que el esperaba hasta que el día en que salio se la encontró de nuevo y esta ves no perdió oportunidad de pedirle que saliera con el.

A la noche del día siguiente cenaron tranquilamente en un café cerca del hospital.

El teléfono sonó e interrumpió su recuerdo.

-Si, digame -

-¿oficial?- pregunto una voz femenina- al otro lado. -El señor Arturo lo busca, esta muy alterado - ¿Donde esta el capitán? Maldita sea -gritaba eufórico mientras se escucho como se acercaba al teléfono.

-Esta de vacaciones y ya agarramos a quien se metía en su casa señor. ¿O lo volvieron a hacer?- le respondía rodrigo

-No no no. Nada de eso. Necesito que venga de inmediato, me dicen que es el segundo al mando, traigo algo que encontré en el río y tiene que verlo ya mismo,es importante.

-Ok señor ya voy para aya -

Respondió mientras terminaba de desayunar dándole un último sorbo a su café, colgó, tomo las llaves y salio colocándose su chamarra del uniforme. Al llegar a la oficina todos estaban extrañados viendo hacia el fondo en donde se encontraba el ex-militar.

-¿Ahora que hizo? -murmuraba uno de los oficiales en la entrada.

-Trae algo envuelto en su sudadera -indicaba otro oficial.

Mientras Rodrigo iba pasando a la espera que alguien le informara que sucedía.

-Señor Rodrigo que bueno que llego... -No termino de decir cuando la interrumpió.

-¡Valla! Hasta que llegas muchacho, te he estado esperando un rato ya - Señalaba mientras se acercaba a Rodrigo.

-¿Que es todo este alboroto? -Pregunto confundido

-Tengo algo que tienes que ver.- respondió mientras lo jalaba hacia su oficina cerrándola al paso de ambos.

Entraron con cierta extrañeza y se acercaron al escritorio no sin antes asegurarse que estuviera bien cerrada la puerta.

-No quiero que nos interrumpan. - indicó

Al estar los dos en el escritorio solo se miraron...

Arturo empezó a abrir su sudadera y al último movimiento dejo ver el contenido a lo que Rodrigo se contuvo para no vomitar.

- ¿Pero que es esto? ¿Por que la traes aquí? - grito sorprendido volviendo a taparla.

-Algo paso en el río...-

-Eso esta clarísimo, ¿el resto del cuerpo?

-No pude cargarlo y te lo traeré por partes - expreso enfadado- idiota, pues es lo único que encontré

-Un homicidio. ¿Aqui? Tenemos que investigar de inmediato ¿Quien lo hizo?

-Pero primero y mas importante ¿De quien es esta mano?

Sin PistasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora