Don't leave me 《 taehyung- BTS》

P R I M E R C A P Í T U L O

Me desperté deslumbrada por los rayos de sol que atravesaban él cristal de mi ventana. Me incorporé de la cama, miré hacia mi mesita de noche y lo primero que vi fue un gran reloj que marcaba una hora más tarde de las ocho, es decir, llego tarde al Instituto.
Abrí mi armario perezosamente y saqué una camisa negra de tirantes finos, unos pantalones negros y mis deportivas blancas.
No me molesté en pararme a desayunar por qué no tenía mucha hambre, directamente cogí mi chupa de cuero y mi mochila y salí del apartamento sin cruzarme con Sook, mi antigua vecina con la que actualmente estoy residiendo.
Nada más llegar a la puerta de mi portal, saqué un paquete de cigarrillos de mi mochila, cogí uno y tras encenderlo comencé a caminar hacia él Instituto mientras le daba pequeñas y pausadas caladas,no tarde demasiado en llegar, unos diez minutos andando.
Al llegar tiré él cigarrillo al suelo, lo pise varias veces y entre dirigiéndome hacia él despachó del director para justificar mi tardanza antes de que mi estúpido profesor de Ciencias me eche de clase por haber llegado tarde y encima sin justificante.

—¿otra vez llegando tarde señorita Haneul?—Preguntó Yoon, la Secretaria de la oficina algo disgustada.

—Si
—El director no está muy contento con usted—Resopló la Secretaría mientras tecleaba el ordenador.

—¿qué le vamos a hacer?—Dije definitivamente antes de pasar hacia el pasillo que daba al despacho.

No me lo pensé dos veces y entre sin ni siquiera llamar a la puerta, me senté en una de las sillas y crucé mis piernas.
—un poco tarde, ¿no?—preguntó el director Hyun, volteando su mirada de los archivos colocados encima de su mesa hasta mis ojos, la verdad es que me intimidó un poco su mirada, y no hay muchas cosas que me intimiden ya.

—Lo sé—Respondí cruzandome de brazos.

—¿te da igual haber llegado tarde otra vez?—Esta vez dirigió su mirada hacia uno de los cajones que había en la mesa, como si estuviera buscando algo sin existo.

—No

La verdad es que mentí, tampoco me importaba tanto faltar a un par de horas.
Tras unos minutos de silencio después de haber dado mi respuesta, decidió levantarse y apoyarse sobre la mesa sólo con sus manos extendidas mientras estiraba su espalda hacia adelante.

—Estoy cansado de que llegues siempre tarde Haneul, llevas llegando tarde estas tres últimas semanas, más de quince días, ¿y te da igual?—Me dijo acusandome con su dedo índice y con el tono de voz elevado

—No me da igual—Respondí con un tono tranquilo

—Sólo te lo voy a decir una vez Haneul, como vuelvas a llegar tarde me encargare de llamar a Sook, y explicarle todo lo ocurrido, además de que no volverás a pisar el Instituto hasta el próximo año.

—¡No puede hacer eso!—Solté levantándome de manera brusca de la silla.

—Claro que puedo, y lo haré si vuelves a faltar en alguna asignatura, y si, también si lo haces en Ciencias y en álgebra, te hemos aguantado muchas cosas, pero ya te estás pasando Haneul, tengo que tomar medidas

—¡Usted sabe perfectamente lo que me ocurrirá si me vuelven a expulsar del colegio y se entera Sook!—Sólo el lo sabía y aún así le daba igual

—Lo sé, pero ya te he perdonado muchas cosas, de verdad que esto me duele más a mi que a ti, pero no puedo seguir aguantando como te da igual todo y siempre te sales con la tuya

Me quedé petrificada, ni me digne a contestarle, cogí mi mochila y me dirigí hacia la puerta con la cabeza agachada.
Pero antes de salir, se sentó de nuevo en su silla y me dijo:
—Ah, Haneul, otra cosa
Lo mire a los ojos y me volvió a señalar con el dedo.
—No vuelvas a entrar sin antes llamar, ¿entendido?—

Solté un pequeño gruñido y salí de allí dando un portazo, no podía creerme aún, que sabiendo lo que me podía pasar si me expulsaban y se enteraba Sook, lo pudiera hacer, y ahora tengo que ir a clase de Ciencias sin justificante porque se me ha olvidado con todas las cosas que han pasado, joder. Pasé por lo pasillos vacíos algo cabreada hasta mi aula, llamé a la puerta con toda mi impotencia y escuché la palabra "pasa" un par de veces, asin que pasé.

—Anda, la señorita Haneul se ha dignado a venir, un aplauso para ella— Comentó mi profesor de Ciencias con cierta ironía , la cual los alumnos parecieron no notar ya que empezaron a aplaudir y a silbar como locos, también escuché unas cuantas risas de fondo pero no eché mucha cuenta a todo en general, simplemente me senté en mi sitio, solté mi maleta y me crucé de brazos.

—¿quién le ha dado permiso para sentarse señorita?—Arg, realmente este profesor me daba asco.

—Yo—solté sin ninguna preocupación, este ni siquiera me dirigió la palabra, solo me señaló la puerta de salida con el dedo índice mientras me miraba fijamente con los ojos entrecerrados, tanto que casi ni se les veían.
No tarde ni cinco segundos en coger de nuevo mi mochila y salir sin decir nada, tampoco me importaba mucho, ya tengo suficientes problemas y peores, como para que me preocupe que me echen de clase.

No tenía nada importante que hacer, por lo que me dirigí hacia las escaleras que había en la puerta principal del Instituto, volví a sacar un cigarrillo y lo encendí rápidamente.
Mientras me fumaba aquel cigarro miraba a los coches pasar y pararse en el semáforo que había enfrente del Instituto. Cuando el semáforo volvió a ponerse en verde para los peatones, los coches se pararon de golpe, yo miré fijamente los coches que se habían parado, y me llamo la atención ver un camión de mudanzas detrás de un "Chevrolet" blanco bastante grande, el cual tenía la ventanilla de los asientos traseros bajada, fije bien mis ojos y entonces me encontré con la mirada de un chico el cual se sentaba en la parte trasera de aquel coche blanco, nos quedamos varios segundos mirándonos, hasta que me sonrió y el semáforo se volvió rojo para los peatones. El coche arrancó y mi mirada siguió el recorrido de esos vehículos, tanto del coche como del camión.
¿acaso ese chico se mudará por la zona?, de todas maneras me da igual lo que hiciera ese chico de pelo castaño, o eso quería creer.
Cuando terminé de consumir el cigarrillo, lo tire al suelo, lo pise y volví hacia el interior del Instituto esperando en la puerta del aula que me tocaba.