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Postale Cap 4: Amistades Duraderas

Unos minutos de explicaciones detalladas de sus sueños era lo que Sans, al menos de manera temporal, necesitaba para olvidar las pesadillas que tanto lo atormentaban.

Grillby, si bien no compartía la extraña habilidad de su amigo, era un monstruo capaz de ponerse en el lugar del otro y ayudar de todas las maneras posibles.

-Y exactamente porque no quieres decírselo a Papyrus.-respondió el monstruo en llamas buscando otra botella de ketchup que ofrecer a su amigo.-ah creo que ya se...

Grillby fue interrumpido por el suspiro largo y pesado de Sans.

-Grillby no puedo hacer eso.-respondía el esqueleto.-Papyrus no me creería.

En ese entonces Sans pudo notar todos sus pecados en su espalda al ver a Grillby algo enfadado, aunque manteniendo una formalidad tan característica del monstruo en llamas.

-Porque crees exactamente que no te iba a creer? Si yo te creí seguro tu hermano, tu única familia, también la hará.

El esqueleto por primera vez en su vida no sabia que decir, quedándose algo pensativo. Grillby solo estaba allí, esperando una respuesta de su amigo al haberse centrado en el.

-Sabes Sans es difícil aguantar tu secreto a tu hermano, debido a que cada vez pienso mas en que el seria de mayor ayud...

En ese momento Sans con furia golpeo la mesa y con un grito que hizo callar a todos dijo:-QUIZAS NO QUIERA SU AYUDA PORQUE SE QUE PODRIA MORIR!

La gente que se encontraba en el bar empezaron a hacer pequeños susurros. No era normal que Sans estuviese de esa manera.

-Sabes que? pregunto el esqueleto bajando de la silla y dirigiéndose a la salida.-aquí no voy a encontrar una buena respuesta a mis problemas.

Grillby intento detenerlo pero para cuando pensó en hacerlo Sans ya había cerrado la puerta yéndose quizás a algún lugar en el que pensar con mas claridad.

El silencio era la única cosa que había en el bar, incluso los susurros habían parado ante el portazo de Sans y la reacción de Grillby...pero alguien debía romper el silencio.

-Oye tu y el no habrán discutido como si fuesen una pareja, verdad? pregunto Doggo algo borracho y con una sonrisa.

Grillby no presto atención a la pregunta que el canino de la guardia real le pregunto, aunque se pudo escuchar a la perfección una frase:

-Doggo hoy no quiero hacer perro a la plancha.-dijo mientras salía a buscar a su amigo

Sans se encontraba paseando por la nieve. Incluso después de todo este tiempo aun podía oír a un Papyrus de pequeño haciendo su primer muñeco de nieve mientras el se tumbaba en el frío suelo a echarse una pequeña cabezadita.

(Ah que buenos tiempos) pensó Sans añorando aquella época mientras se dirigía a su casa, con la intención de echarse a dormir.

-Sans? Sans!!! Espera.-respondía una voz con la cual un calor se acerba por detrás.

Sans hizo un suspiro lento antes de girarse y ver a su amigo algo cansado debido a que el esqueleto se había ido de una manera algo acelerada, como si no quisiese que Grillby hablase con el.

En ese entonces Grillby saco dos Nice Creams pero quien no se esperaba el siguiente escenario?

Sans empezó a hacer una sonrisa y casi sin aguantar la risa le dijo:

-Wow Grillby realmente has
''derretido'' mis esperanzas.
Respondió el esqueleto mientras se reía. Grillby solo se quedo de pie intentando parecer lo mas serio posible ante la respuesta del esqueleto.

-Sabes que es lo peor?-pregunto Grillby mientras Sans, ya mas tranquilo, empezaba a respirar de manera suave y tranquila.-que sabia que ibas a hacer esa broma.

-Oye venga Grillby no ''calentemos'' el ambiente,eh???-pregunto el esqueleto de forma sarcástica mientras que a Grillby le salía humo de su cabeza.

Ambos fueron acompañados por un sentimiento de union muy fuerte. Era claro que ambos, después de la tensión vivida en el bar, necesitaban unas pequeñas risas.

-En fin.-dijo Grillby al percatarse de que habían llegado a la casa de Sans.
Supongo que esta es nuestra parada.

-No estas preocupado por que te hayan robado algo?-pregunto Sans aun con la sonrisa de su anterior chiste.

-Doggo y la guardia canina son un incordio...pero no son tan estupidos como para meterse conmigo.-respondía Grillby mientras se volteaba en dirección a su bar.

-Oh y por cierto.-respondió el monstruo en llamas haciendo que Sans, quien estaba abriendo su puerta, fuese frenado en seco.-aun me debes pagar la tarifa acumulada.

Sans hizo una sonrisa aun mas grande y únicamente le dijo.-añade lo de los perros a mi cuenta.

Grillby no pudo decir mucho mas ya que el esqueleto le cerro la puerta por lo que, con una pequeña sonrisa dibujada en su rostro, se fue a su bar.

Al llegar solo se pudo encontrarse con la guardia canina intentando detener a Doggo, pues con Grillby fuera, no había nadie que pudiese servirles los vasos de leches.

Todos los perros dejaron pasos a Grillby quien se acerco a Doggo y subiéndose su manga del brazo derecho le dijo:

-Dame una buena razón para no quemarte la piel, y que sea muy buena.

◇◇◇

Sans se encontró con la luz de su televisor encendida mientras se escuchaba la voz del robot mas querido del subsuelo, Mettaton.

Al llegar se encontró con Papyrus dormido, tapado con una manta roja que casi no le cubría todo su cuerpo.

(Je y luego me dice a mi) respondió para si mismo mientras que, usando su magia se llevo a Papyrus a su habitación, no sin antes cerrar el televisor.

Lo dejo con suavidad en su cama mientras que lo tapaba y le daba su peluche de Fluffy Bunny, el cual fue cogido de manera inconsciente por Papyrus.

Antes de volver a su cuarto Sans se quedo mirando a Paps, quizás pensando si decirle o no aquellos sueños que tenia.

(De todas formas el esta dormido y yo también estoy demasiado cansado) se dijo para si mismo levantándose para irse a su habitación.

Al llegar se quito su chaqueta tirándola al suelo y se acostó en la cama con la intención de dormirse, aunque no podía.

Se dice que los monstruos no tienen sentimientos pero entonces que sentía Sans en ese entonces?

Obvio, como cualquier otro humano que tiene miedo a sus pesadillas, Sans también las temía y no le hacia mucha gracia repetir de nuevo esos sueños.

(Vamos Sans no eres el hermano del Gran Papyrus) se dijo a si mismo con la intención de tranquilizarse y poder dormirse.

Y si bien el hermano mayor nunca lo iba ha admitir le tenia un gran respeto al menor, no solo por ser su única familia, sino también por ser un mejor monstruo de lo que el pudiese ser alguna vez.

Unos minutos fueron los que Sans tardo en dormirse y volver a soñar esperando no volver a tener ninguna pesadilla.

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