EL PACTO DE UNAS ALAS «REESCRIBIENDO»

«Impensable»

Vic:

¿Por qué Vic y no Vicky?
                             
°°°

Antes de lograr un contraataque, llego el autobús escolar. Subimos en un silencio cómplice.

Sentía como May iba a enloquecer, podía ver la ansiosa. No podía permitirlo.

- Su asiento, bombón.- le dije haciéndome a un lado para que se siente primero.- hola Anna.

Allí estaba Anna, junto a la ventana, en sus manitas traía la tercera entrega de The Maze Runner/La Cura Mortal. Era pequeña, de 1.50' de altura, su cabello marrón con esfuerzo llegaba sus hombros. Sus ojos oscuros y pequeños, sus labios delgados. Traía unos lentes que prácticamente ocultaban su rostro. Ella si que tenía curvas, grandes (increíbles) para ese tamañito.

Anna era prácticamente nueva en la escuela, solo llevaba dos años asistiendo. Se mudó luego de prácticamente ser una nómada por el trabajo de su padre. Cuándo sus abuelitos enfermaron, vinieron a vivir aquí.
Su padre, Jerry; un periodista de la vida de los refugiados en Líbano, Pakistán, Uganda, etc.

Según lo que sabíamos, era costumbre estar pendiente de la seguridad de Anna. Por eso la llamaba cada día al subir al autobús cada mañana.
Justo como ahora.
-Si, estamos bien.- decía Anna a su teléfono- Ya subieron las chicas. Si, tengo todo.- estaba un poco más activa que de costumbre.

Hola chicas- saludó dando su mejor sonrisa y despertándome de mis pensamientos juzgones- Es un día Gris para Anna- dijo cerrando dramáticamente su ejemplar que conservaba en perfectas condiciones- ¡Newt Murió! no lo superaré jamás-  se paró del asiento, para cederle el paso a May- pero bueno, ¿algo paranormal que contar hoy?- como era costumbre, sus curiosos ojitos se dirigieron a mi. Parecía que no habían pasado los dos años que me tomó conocerla a la perfección. Sabía que desconocía muchas partes de ella, pero todos tenemos secretos. ¿QUIÉN NO GUARDA ALGO PARA SÍ MISMO?

Baby girl - dije- yo estaba a punto de hacerle la misma pregunta- me senté junto a ella. Y la presioné demás para que quedara bien apretada entre May y yo. Lo cuál las hizo reír.

Creo que alguien me observa por las noches. Anoche mientras dormía, me pareció sentir que había alguien al lado de mi cama- dijo, intentando sonar serena y hasta divertida. Pero estaba aterrada. Lo notaba.
Luego, se quedó en silencio. Estaba en un trance, un trance que significaba que estaba atando cabos.
-Mayyyy, quítate baby girl. Oh, querida May.- le dí un golpe con el puño en el brazo. Pasando por encima de la cabeza de una Anna indefensa.- te estoy cobrando. Tu me diste uno. Además, zapatito.- las tres reímos. Una crisis evitada.

°°°

No podía dejar de pensar en la noche que acababa de terminar. No sabía si había soñado, o si realmente había sucedido.

*FlashBack*
Un domingo cualquiera. Perdía mi tiempo como cualquier persona que se hacía un manicure.

De la nada, sonó mi celular. Lo revisé, pensando en que quizás eran Anna o May.
No lo era.
Era un ¿Mensaje de texto?
Existe WhatsApp.
¿Cómo se supone que sepa quién es si no tiene fotito?