Timeless, quiet and shy.

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Me desperté con un gran dolor en el pecho. Eran las seis de la mañana. Cogí mi libro y introduci en aquella misteriosa historia.

La protagonista se enamoraba del seductor y apuesto adolescente que le estaba salvando la vida. Aqui se contaba como dicho hombre era un efecto de la mitología y su trabajo era recomponer aquellos daños que sus padres imponian sobre una persona.

Mi alarma sono a las ocho menos cuarto y me puse una camisa de cuadros color carmesí. Unos vaqueros rojos y mis vans negras. Baje corriendo despues de haber peinado mi desaliñado pelo y haberme lavado la cara. Salí corriendo con la mochila en la espalda y me alejé de aquella apestosa casa.

Mientras me dirigía a la dichosa cárcel, llamada insitituto, empecé a sentirme vigilado, seguro, pero vigilado. Apresuré  el paso y, al doblar la esquina, me encontre con Drake.Tropecé con el y me quede a escasos centímetros del suelo. Me había agarrado muy rápidamente.

-Lo..lo siento, deberia mirar por donde voy.-mi voz sono ruda.

-Tú eras Noel, ¿No?

-Si...- baje la mirada.

Me elevó y me puso de pie.

-No tengo tiempo de hablar, ¿Te acompaño a clase? Vamos a la misma clase.- me recordó.

-No hace falta.- dicho y hecho, salí de aquel momento y comencé a andar. Drake resopló a mi espalda.

Llegue al instituto y Drake estaba en la puerta, pero.. ¿COMO? Pase delante suya y me adentre en el laberinto de puertas que daban con las incontables clases. 4°D, esta es la mía. Abrí la puerta y dejé mi mochila apoyada en la mesa del fondo. Me senté y sonó el timbre. Todos los alumnos comenzaron a entrar. Gritar. Saltar. Siempre era igual. Drake entró. Su pelo... sus penentrantes y grises ojos me observaban. Se sentó a mi lado.

-Hola de nuevo, Noel.

-Ho..hola..

-¿Te puedo preguntar una cosa?

Ya me iba a insultar. No, hasta el nuevo lo haría...

-S..si..-dije tímidamente.

-¿Porque eres tan silencioso? ¿Tan tímido?

La pregunta me pilló desprevenido.

-N..no se. supongo que no quiero molestar.

-Mmhh...- respondió.

Le miré a los ojos y todo se congeló. Nadie se movía. La clase se quedo paralizada. Papeles en el aire, no caían, las manecillas del reloj de pared que colgaba de la pared, encima de la pizarra, estaban quietas. Un gran silencio inundó mi mundo.

-Esto es lo que siento yo cuando hablo contigo. Me siento sin tiempo. Todo esta silencioso, tímido.

¿Como había hecho eso? Estaba realmente asustado. Tenia mucho miedo.

-¿Que..que esta pasando?-

-La mas sincera mirada puede parar el tiempo.

Y dicho esto, todo volvió a la normalidad. Los gritos. El reloj. Los papeles llegaron al suelo. Miré a Drake. Lo encontré leyendo. Cómo si nada hubiese ocurrido. Quizás habria sido una alucinación... No. Había sido demasiado real.

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