HABITACION 666 [one direction] *segunda temporada*

CAPITULO XIV: FRIO O CALOR?

-         Narra Zayn:

-         Estaba oscuro, seco, se sentía un calor horrible en la atmosfera del aire, pero a la vez tu cuerpo se engarrotaba del frio, estaba sentado en algún maldito lugar en... en, la nada? Trate de abrir y cerrar los ojos varias veces pero siempre veía lo mismo... o mejor dicho no veía nada

-         Hola? – *que Oops* pensé a los segundos de decir eso

-         Eres un monstruo – se escuchó a lo lejos, parecía una voz nerviosa y agitada, pero me pareció demasiada familiar

-         Hola!! – trate de hablar más fuerte, me levante e mi lugar/esquina/cosa y empecé a caminar, se me dificultaba mucho el caminar, debido a la nula visibilidad mi equilibrio era mucho peor que el de un ebrio, pero por suerte no me caí... cuando

-         Eres un monstruo – sentí un objeto meciéndose en el suelo, parecía una pelota un bulto en el suelo moviéndose carente de decencia

-         Hola? – me acurruque a su altura y toque parte de ese bulto, era un hombro descubierto

-         Monstruo, monstruo... monstruo – empezó a sollozar, pero ese lloriqueo débil, me era demasiado familiar... *no Oops! no no es lo que piensas estas dormido... es un sueño CALLATE!!*

-         Mi labio inferior empezó a temblar, sentí como mi sangre entera se helo de pies a cabeza, mis ojos se aguaron, y sentí como mi nula visión empezaba a empeorar por las lágrimas que rogaban salir sentí como perdía la movilidad de mi cuerpo – MONSTRUO! – de repente la voz se volvió más fuerte, más fea... mas.... El bulto empezó a levantarse erguido solo veía una silueta a la distancia – porque?.... – no podía hablar que quería? – yo... tenía un plan sabes? – su voz se volvió melancólica, parecía recordar algo... estaba muerta@?  - yo soñaba con tener una familia, una buena familia... no me importaba lo Oops que era mi esposo al ser tan...? No sé, El? – empezó a reír – pero... sigamos, antes de eso, de sentar cabeza, solía decir con mis amigas en los barrios húmedos de Londres en la madrugada  "con quien te casaras" yo solo me reía y decía "no se... con la noche?" y volvíamos a reír.... Parece que no fui yo en esa época? – bajo la cabeza – mírame... tampoco lo soy ahora – de que hablaba porque me decía eso? – pero cuando enferme oh – hizo una pausa por unos segundos – no sé porque enferme? Siempre dicen que cuando te llega tu tiempo no puedes hacer nada para evitarlo pero al ver... al percibir que te iras en un parpadeo parece inhumano – su voz empezaba a quebrarse – yo estaba en un abismo y nada me podía sacar, siempre en caída, ni por mis hijos me levante – hijos? Estaba muerta? QUEOops! PASA!? – pero a los meses morí – hizo una pausa y empezó a reír – irónico, decían que mi sistema inmunológico solo fallo sin más? Sin nada que los provocara.... Ahora, estoy aquí en esta Oops! de abismo y sabes porque? – trague saliva, empezó a acercarse a mi rostro – fue por un monstruo... yo lo quería, nadie  lo quería creo que ni sus hermanas – volvió a reír – ni su padre, ese monstruo de mirada fija y penetrante y ese cabello negro... - sentí como sus ojos, esos ojos, eran... era... sentí como mi garganta se quemaba por dentro parecía que nunca volvería a pronunciar palabra alguna, mi rostro empezó a temblar parecía deformarse, Oops!– ese monstruo que crie, que ame... eres tu – esta vez pude ver su sonrisa, era... mis manos empezaron a temblar fuertemente parecía que tenía un ataque de epilepsia mi cuerpo temblaba descontrolado, sentía como agujas penetraban mis brazos, lágrimas de dolor y amargura empezaron a brotar... cerré los ojos para parar la salida de lágrimas pero al abrirlos vi luz

-         Luz? – trate de levantarme, sentía mi cuerpo más ligero estaba mucho más ligero que antes, mire al cielo y luego a los lados – ma... ma-ma?

-         Tienes unas cuantas opciones... – gruño algo enojada – bueno, puedes ir a la luz, esa luz que tienes arriba tuyo... puedes quedarte en esta mugre y dejarme salir a mí – sentí una mirada esta vez de lastima, mis ojos empezaron a arder de nuevo – y puedes tratar de salir de aquí sin estar ni en la luz ni aquí piénsalo – y de repente desapareció

-         Narra escritor:

-         Intravenosa, ahora necesitamos estabilizarlo

-         Vamos denme esas transfusiones de sangre, presión arterial?

-         80 sobre 40 bajando

-         Pongan más gaza, necesitamos un quirófano de inmediato – un doctor estaba empujando la silla en al que cierta persona estaba, recostada inconsciente y muriendo

-         Quirófano 15 en el segundo piso está listo doctor – la enfermera pelirroja que ayudaba a llevar la camilla a toda prisa, dos enfermeras más estaba empujando la camilla la cual se dirigió al ascensor para llegar al quirófano en la segunda planta de uno de los mejores hospitales de Londres. El hospital Saint Thomas uno de los más reconocidos hospitales y antiguos de Londres

-         Al llegar al segundo piso fueron corriendo por los pasillos hasta llegar al quirófano número 15, el doctor que llevaba la camilla más otro doctor y dos enfermeras entraron a la sala del quirófano – muy bien necesito esa sangre – señalo bolsas de sangre para transfusiones en la mesa de operaciones – en el cuerpo del paciente – el doctor que estuvo todo el tiempo con la camilla agarro dos pinzas con gazas y empezó a limpiar la sangre – maldición, alcohol – una enfermera limpio la herida con alcohol y el doctor siguió curando con las gazas para crear un coagulo

-         Presión arterial descendiendo 60 sobre 40 – el otro doctor empezó a preocuparse al ver la presión descender increíblemente bajo – pronto desfibrilador – una enfermera se acercó con las paletas y se las entregó al doctor – despejen – las paletas lanzaron una descarga hacia el pecho del joven tratando de hacer que su corazón reaccionara – despejen – la carga subió a 200 y otra vez trato de animar al chico sin éxito – suban a 300 despejen – las paletas volvieron a lanzar una descarga sin mucha distinción de las otras el corazón empezaba a rendirse – maldición, despejen – el doctor algo molesto pero persistente volvió a poner las paletas sobre el pecho del chico sabía que si no reaccionaba con esta tendrían que diagnosticarlo con coma inducido, pero por suerte esta última vez el corazón reacciono y la presión arterial se estabilizo

-         Necesito más gazas – dijo la enfermera ayudando al otro doctor a cerrar las heridas

-         Las cerramos? – pregunto el doctor dejando las paletas en su respectivo sitio

-         No será mejor cerrarlas después ahora la piel está demasiado irritada no quiero una infección menos con una herida tan grande – los doctores siguieron cerrando las heridas dejándolas con gazas tapando la herida para dejar que los coágulos impidieran el paso de más sangre