40.

197 14 6
                                    

el final...

Otro nuevo día en la hermosa ciudad de Paris; y como ya se había hecho costumbre Talon iba a el mismo lugar desde hace ya semanas desde el día en que la dejo ir. Talon sabía que ya que no podía volver a su antigua vida así que empezó una nueva con sus nuevos amigos y con el perro ese Sabiondo; y aunque al comienzo fue difícil, obvia referencia a Sabiondo, ambos antiguos rivales pudieron llegar a una especie de tregua para poder convivir en paz, después de todo, ambos tendrían que vivir uno cerca al otro en lo que restaba de sus vidas.

Talon también sabía que Penny no volvería, es decir ¿Por qué se preocuparía en volver?, si fuera el caso de que volviera lo haría solo por el pulgoso y no por él. Talon lo sabía y aún así cada día sin falta llegaba a la misma hora y en el mismo lugar. Este punto en específico se había vuelto especial para él, ahí fue el ultimo lugar en donde la había visto y venía simplemente a recordar y pasar un tiempo a solas.

-¿Otra vez aquí amigo? -Nino se había dado cuenta de las pequeñas escapadas de su compañero de cuarto cada fin de semana, la semana pasada decidió seguirlo hallando a su amigo sumido en una profunda tristeza.

Nino no esperaba tener una respuesta inmediata, así también estaba la primera vez que lo vio; solo se situó a su lado tratando de compartir la tristeza que sentía en estos momentos su compañero de cuarto que con el tiempo llegó a considerar algo cercano a un hermano.

-¿Dónde esta Sabiondo? -dijo Talon sin quitar su mirada de aquel lugar determinado, Nino lo miró y distinguió su voz a pesar de que era algo baja. Eso al parecer pasaba cuando venía a este lugar.

-Ah, el perro ese, debe estar con las chicas, oí como hablaban sobre ir a comprarle algunas cosas y hacerle un cambio de look -Nino soltó una pequeña risa al escuchar eso, por momentos se imaginó a ambas chicas llevándose al canino en contra de su voluntad; por unos momentos llegó a sentir pena el can.

-¿Y Adrian? -volvió a preguntar Talon apartando la vista del punto y viendo por primera vez a su amigo en lo que iba el día.

-Ah, si... hablando de eso... -el moreno cambió su forma de hablar, posó su mano detrás de su cabeza y soltaba unas risas nerviosas.

-Aquí estoy -Talon posó su vista en el joven modelo para luego mirar a devuelta Nino quien había desviado la mirada y silbaba una melodía desconocida para el pelinegro.

Talon no dijo nada; de alguna forma ya se lo esperaba desde el momento en que el moreno lo descubrió ese día. Adrian y Nino eran como uña y carne, rara vez había un secreto que no supiera el otro.

Adrian se acercó y se situó al otro lado del pelinegro, quien decidió dejar pasar el tema y volvió a posar su vista al frente. Ambos amigos notaron su tristeza y decidieron no decir nada. Adrian trató de ponerse en el lugar de Talon, también le dolería saber que el amor de su vida estaba en otra dimensión y él sin poder hacer algo al respecto.

~•~

Los tres amigos estuvieron juntos hasta que la tarde llegó, a estas horas las chicas se estarían preguntando en donde estarían los tres amigos, así que debían de volver lo antes posible.

-Vamos Talon, debemos irnos -dijo el moreno y posó una mano en el hombro de su amigo para llamar su atención y luego irse junto con el rubio.

Segundis después, Talon dio media vuelta con la intencion de alcanzar a sus amigos que ya se habian adelantado. Dió un ultimo vistazo a aquel lugar para luego sorprenderse al ver una luz brillante emerger de entre los árboles, inmediatamente reconocio aquel brillo especial; frente a él se estaba formando nada mas y nada menos que un portal dimensional. Luego de unos segundos que para el chico parecieron horas, salió de este una persona que había pensado no volver a ver.

Entre Dos Mundos [TERMINADO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora