Setenta

560 55 15
                                        

Karol

Estaba furiosa, no sabía porque , tal vez sería que mis ataques nerviosos estaban devuelta y eso no era bueno. Me daban ataques de ira y rompía todo lo que había en mi camino,como ese día que fue tanto el enojo que mande al hospital a mi amiga.

Nunca me lo perdono.

Y eso se sintió fatal.

Camine por los pasillos contando hasta diez, para que se me pasara la ansiedad y el enojo, todo iba bien hasta que Ruggero se le ocurrió ponerme enfrente a mi.

~Muévete ,por favor~masculle. 

~Eso lo debería de decir yo,ratita~ me dio un empujón y di pasos atrás.

~No quiero problemas Ruggero,ya déjame en paz~hice puño mis manos,

~Quiero que lo tengas guardado en tu cabeza,he. Jamás te dejaré tranquila~ me empujó de nuevo y mi paciencia se estaba agotando.

~¡lárgate!~grite furiosa,mi puño impacto su barbilla.

Él no se mutuo,pero si te tocó adolorido la área, me miró furioso.

Y hizo lo que nunca pensé que haría.

Me golpeó.

Caí en seco,mi trasero tocó el frío piso y tosí con dificultad. Me había sacado el aire.

¿Acaso Ruggero me golpeó?

Mi enojo se fue,reemplazándola con tristeza.

Su semblante cambio de enojo a arrepentimiento al ver mi boca ensangrentada.

Me paré como pude y corrí.

Ruggero me golpeo.

"Oye Sevilla" AdaptadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora