Me encontraba con la respiración acelerada, sentía las gotas de transpiración bajando por mis mejillas y pómulos. Mis piernas llevaban el mismo ritmo hace cuarenta minutos y todavía que quedaban veinte más. Hacer ejercicio logra que me despeje bastante y hoy me hizo pensar en la respuesta que le daría al jugador brasileño.
Voy a firmar el contrato.
Anoche me llamó Candelaria y me hizo considerar bastante esta propuesta. Ella sabe perfectamente que la razón por la cual yo no quería aceptarlo, pero al final terminó convenciéndome de que tengo que aprender a manejar mis sentimientos. Aparte es como dijo Wagner, no es necesario incluirlos.
Mi tía se alegró al escuchar mi decisión final y tal como me dijo mi mejor amiga, dice que esto va a ayudar a que mi carrera crezca. Pero aun así me siento mal por tener que mentirle a los demás miembros de mi familia, hasta a mi hermano, quien es el único que me queda.
Los minutos que me quedaban se habían ido y me bajé de la cinta caminadora, agarré mi botella de agua y la abrí para comenzar a tomarla. Me apoyé en la pared y regulé mi respiración. Una vez que terminé, me retiré del gimnasio del edificio en el que vivo y me dirigí a mi departamento.
Mi tía había salido a hacer algunas compras, así que por el momento estoy sola. Fui directamente al baño y me quité la ropa con la que entrené, la dejé en el cesto de ropa sucia y me quedé como Dios me había traído al mundo. Me acerqué a la ducha y giré las perillas de agua fría y caliente para regular.
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Teamsimeone
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Como siempre en recepción nos recibieron de diez. Juliana siempre tuvo buenos empleados. Afuera del edificio habían varias personas y eso me dio a entender que mi "futuro novio" ya había llegado. Mi tía y yo nos encontrábamos en el ascensor esperando a llegar al piso en el que estuvimos ayer.
–¿Candelaria está? –preguntó mi tía–
–No creo –respondí– Anoche llegó de Turín, así que no lo creo
–¿Qué tanto hay en Italia?
–Es que Paulo se volvió una figura bastante importante en la empresa –respondí– Que raro que no estés al tanto –reí–
–Rarísimo –respondió con una corta risa y suspiró– Es que es mucho trabajo, ya sabes que no solo te represento a vos, también a Diego
–Sí –respondí– Lo sé, pero igual eso es una boludes –reí– Aparte no tenes por qué estar al tanto de todo más que la de nosotros
–Exacto –sonrió– Y de las personas que estén interesadas en ustedes
–¿Vos decís que este contrato va a afectar mi visita a Gio en Italia? –pregunté–
–suspiró– Seguramente sí, pero voy a hacer todo lo posible para que te dejen hacerlo... igual no es que vas a firmar algo que yo no sepa lo que dice, voy a tomarme el tiempo de leerlo antes de que firmes
–¿Ellos no tienen un vuelo programado?
–Me chupa un huevo –rió– Si quieren que firmes, van a tener que esperar
No dijo nada más porque las puertas del ascensor se abrieron y caminamos hasta el escritorio de la secretaria de Juliana. De nuevo nos recibió amablemente y esperamos unos segundos para que nos den el permiso para entrar.
–Buenas tardes –sonrió Juliana al vernos entrar–
–Buenas
Dijimos mi tía y yo al mismo tiempo. Sentados en el mismo lugar que ayer podía ver a las mismas personas, Wagner, Neymar Jr y Padre. Los tres se pusieron de pie y nos acercamos. Pude ver varios papeles y dos carpetas en el escritorio de la mamá de mi mejor amiga.
–Qué lindo verlas de vuelta –dijo Juliana– Cande me dijo que te llamó
–Sí, lo hizo –sonreí–
–Pensé que iba a estar acá –habló mi tía Natalia– Pero Mariah me dijo que volvió de Turín
–Sí, volvió anoche –respondió– Está bastante cansada... si los viajes son cansadores, para ella lo son el doble –hizo una pausa– Bueno, no hace falta presentarlos –rió–
–Buenas tardes –saludó mi tía a cada uno estrechando sus manos– Un gusto volver a verlos
–El gusto es nuestro, Señora Simeone –respondió Neymar padre– y por supuesto que también nos da gusto verte, Mariah
–Gracias –respondí con una sonrisa–
–¿Has pensado en nuestra propuesta? –preguntó Wagner–
–Sí –respondí– Pero primero quiero que mi tía lea todo lo que ustedes proponen en su contrato y se asegure de que todo está en condiciones
El jugador brasileño me miró sonrió de lado, miró a su representante y a su papá. Wagner asintió y le entregó una de las carpetas que había en el escritorio a mi tía.
–Muy bien
Sonrió Natalia y se sentó a un lado de Neymar Padre. Suspiré y jugué con mis dedos. Miré de reojo y el jugador tenía la mirada clavada en mí. Sonreí y lo miré. El levantó una ceja y sonrió de lado. Se había convertido en una "guerra" de miradas y creo que únicamente nosotros dos lo sabíamos ya que Juliana se encontraba hablando con los otros dos hombres presentes en la oficina.
–Bueno... –dijo mi tía finalizando de leer luego de algunos minutos– Lo encuentro bastante aceptable, tengo algunas preguntas
–Perfecto –dijo Neymar Padre–
–¿Cuáles son sus preguntas? –dijo Ribeiro–
–¿Nuestra familia no debe saberlo? –preguntó mi tía– O sea ¿hasta a Román Simeone se le debe esconder esto?
–Es tu hermano ¿verdad? –dijo Neymar y yo asentí–
–Lo siento pero no debemos arriesgarnos a nada –respondió Wagner–
–¿Y en su familia? –preguntó nuevamente mi tía–
–Solamente yo lo sabré –respondió Neymar padre–
Después de algunas series de preguntas más, mi tía Natalia quedó bastante satisfecha, lo que me generó confianza. Me habían entregado una lapicera y me tuve que poner de pie para acercarme al escritorio. El señor Ribeiro me marcó los lugares donde debía firmar y así lo hice. Una vez que terminé, suspiré y dejé la lapicera a un lado.
–Vale recordar que solo ustedes eligen hasta dónde pueden llegar sus sentimientos
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Nananan hace bastante no actualizaba me parece gggg, Voten y comenten, que me encanta leerlas y escribir esta novela❤️
