Capítulo 7: ¿Por qué yo?

33 2 0
                                    

Capítulo 7: ¿Por qué yo?

Haga lo que haga, lo sigo teniendo en mi cabeza. "¿Quién era?" Me pregunto mientras voy de camino a la escuela. ¿Acaso quedó dolido por el hecho que no me acordara quién era él? No me destaco por el poder memorizar rostros ni datos de algún pasado remoto.

Voy pasando a través de todo el gentío y cuando logro llegar a dónde esta el patio principal, quedo petrificada.

《¿Leo...qué haces ahí?》Y para empeorar, la puta de Lisa.

Mi corazón se hace pedazos y no puedo moverme.

¡YA DEJEN DE TOQUETEARSE!

¡DEJEN DE MOVER SUS LABIOS!

Paren, paren...

Una lagrima recorre mi mejilla, una lagrima salada y agria.

《¿Qué es lo que le ves a ese? No es para tí》

Quede sorprendida, ya que esas palabras que escuche en mi mente las pronuncio una voz masculina, como la del chico de ayer...

Tal vez sea coincidencia. Decidi moverme de ahí, no quería dañar mi corazón viendo más esa escena.

Después de 4 clases y un receso, vienen las castrosas a molestarme. ¡Me lleva la chingada!

Llegaron como si nada y empezaron a golpearme. ¿Y como me defendia yo, si el profe no había venido?

El peor día de mi vida...

Para empeorar, empezo a llover y yo sin paraguas ni abrigo.

Me fui lo más rápido posible a la casa. Quería llorar hasta deshidratarme. No tenía en mente salir de mi habitación.

Estaba totalmente deprimida. ¿Cómo es que ya rompí una promesa que casi apenas me había hecho? Ojala se vaya al infierno esa zorra... y también ese playboy.

Suspire. ¿Desde cuándo me afecta lo que el haga? Claro, desde la primera vez que lo ví.

*****************

Un buen día para un inicio de clases. Esperaba que me hiciera con algunas amigas, o bueno, como mínimo algunos aliados.

Caminaba por los pasillos del colegio buscando el salón de Lenguas. Por suerte, yo era buena con los idiomas.

De pronto, me tope con un chico de cabello castaño oscuro y de piel clara. Este me obsequió una sonrisa y me pregunto:

- Hola, ¿Cómo te llamas?

- Eva Adelice. Soy nueva

- Un hermoso nombre para una hermosa compañera.- me ruborice -Mucho gusto. Mi nombre es Leonardo, pero puedes decirme Leo

- Mucho gusto - dije acomodandome un mechon detrás de mi orega.

- ¿Qué materia te toca ahora?

- ¿Uh?... ¡Ah! Me dirigia al salón de Lenguas

- Te acompaño- y habiendo dicho eso, tomo mi mochila y mi mano.

*****************

¿Por qué yo? ¿Por qué?

La Trampa de los Ultimos DíasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora