Dos palabras; Max Mills II ©

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Pov Nayra

—¡Nayra!, ¡Nayra!, vuelve.—me decía Andrea mientras agitaba su mano en frente de mi cara.

—Ah si, ¿que me estabas diciendo sobre que la Segunda Guerra Mundial tenía que ser estudiada por los de historia?

—Te estaba diciendo que teníamos que estudiar la Segunda Guerra Mundial para el examen de historia de la semana que viene.

—Pues lo mismo que te he dicho.

—Si, si, lo que digas, ¿oye estás bien? últimamente estas... no sé, ¿rara?

—Estoy perfectamente.

—Si, eso pensaba.

Mentira. Estaba más que trastornada, desde que se fue Max, todos los días me recuerdo que podría haber hecho algo más para que no se fuera pero que sin embargo le dejé ir sin más y ahora ya no le volvería a ver.
Parece que no, pero eso de torturarte todos los días con la misma historia te cansa la mente o algo, pero simplemente no puedo dejar de pensar en ello.
Han pasado tantas cosas desde entonces, pero aún sigo mirando a ciertos lugares del instituto acordándome de que ahí me pasó algo relacionado con él, estoy obsesionada con Max, mucho más de lo que estaba cuando él llegó aquí en septiembre. Sin embargo a ojos de la gente y de mi pareja, obviamente tengo que hacer que Max es cosa de mi pasado, y lo es, lo que pasa es que no me le puedo quitar de la cabeza, pero eso es algo sin importancia, ¿no?

—Venga, vamos a clase, que ya solo nos faltan tres meses para acabar este curso.

—Si, qué bien.—dije sin ánimos.

Si, ya estábamos en marzo y la parte buena es que el mes que viene tengo el famoso campamento al que creo que me vendrá bien ir para que me de el aire durante una buena semana.
En lo que íbamos a clase me crucé con Jacob, si el mismo, pues ahora es mi novio.

—Hey, ¿que tal? estás como pálida ¿estas bien?—preguntó dándome un beso.

Asentí, aunque ahora que él lo mencionaba estaba un tanto mareada y se me estaban empezando a cerrar los ojos.

—¿Nayra? eo, ¿estás bien?—me preguntaba Jacob mientras me sostenía para que no me cayese—¿cuantos dedos ves aquí?

—Si, se ha quedado buen día.—dije yo antes de cerrar mis ojos y verlo todo negro.

                               •*•*•*•*•*•*•

Pov Andrea

En cuanto Nayra se desvaneció Jacob la cogió en brazos y yo, yendo delante, le fui abriendo camino entre alumnos para poder llegar a la enfermería, estábamos en pleno cambio de clase, eso parecía la M-30.
Una vez en la puerta, tuvimos que sentarnos en una mini sala de espera que hay porque había un chico que se había hecho un esguince grave.

Cuanto más esperábamos, más se ponía nervioso Jacob que no había soltado a Nayra ni para leer las revistas que había en la mesa de centro.
Cuando se abrió la puerta que daba acceso a una especie de box, Jacob fue como casi un velociraptor hacia ella y entrando sin ni siquiera dejar salir al pobre chico, que estaba cojo. Se nota su buen corazón.

Al final fui yo la que pedí disculpas al chico alegando que esa cosa que nos acompaña a Nayra y a mi, estaba un poco cegato y el chaval me dijo que no pasaba nada.
Acto seguido entré cerrando la puerta tras de mí.

—Bien, ¿que le ha pasado a la chica?—no es obvio mujer, menos mal que eres enfermera.

—No lo sabemos, se puso pálida y después se desmayó, pero ya lleva unos días como muy rara, ¿a que si Andrea?—me preguntó Jacob mientras yo buscaba a Harvey entre mis contactos. Levanté la mirada para contestarle.—Si, si, estaba como ida, la preguntabas algo y te saltaba con otra cosa que no tenía nada que ver.

—Bien, la haré unas pruebas facilitas, podéis quedaros si queréis.

—Yo me quedo.—dijo Jacob.

—Di que si casanova, como se va a escapar y todo,—dije susurrando.—yo mejor me salgo.—dije ahora en alto.

Salí de esa habitación y, alejándome un poco bastante de la puerta, llamé a Harvey.
Si, si, se que os estaréis preguntando que porqué tengo el teléfono de Harvey o porqué si quiera me hablo con él. Fácil, somos amigos, y cuando volví de vacaciones y me enteré de lo que pasó con el show y todo eso, llamé a Harvey para ver como estaba Max, porque a Nayra, ya veis, la veo todos lo días, y él me decía que Max no quería ni oír hablar de Nayra, que la nombrabas y según quien fueras se iba lejos de donde sea que estuviesen hablando de ella, o bien te callaba él de un tortazo.

Y bueno, otra cosa que me dijo Harvey es que ahora estaba saliendo con una chica, pero nada serio, solo fue una fan que conoció en un meet&greet y que siguió quedando con ella y tal, pero obviamente eso no se lo iba a decir a Nayra porque la da un paro cardíaco.

—¿Andrea?

—Si, yo, hola.

—¿Que tal? ¿va todo bien?

—Bueno, si a ir todo bien le llamas que Nayra se nos ha desmayado, entonces si, va todo genial.

—¿Se ha desmayado? ¿Por qué?

—Eso es lo que todavía no sabemos, o por lo menos no lo saben ni la enfermera ni Jacob.

—¿Jacob? ¿Que pinta ahí Jacob?—ah, olvidé mencionarlo, pero tampoco le he dicho a Harvey que Nayra y Jacob están juntos.

—Em, si, bueno, a ver, es que Nayra y Jacob están saliendo.

—¿Qué dices?

—Que si, que si, que como dos semanas después de que os fuerais, Jacob fue a hablar con Nayra y alguna historia le debió de contar a ella porque ahora están juntos.

—¿Y tu no sabes que le dijo?

—No, Nayra no me lo quiere decir.

—Bueno me da igual, tu sabes porqué Nayra está desmayada, ¿no? pues cuéntamelo

—Es una suposición, pero es que la última semana, no se si sea por casualidad o qué, pero no he visto a Nayra comer absolutamente nada, de hecho hubo un día que me quedé a dormir en su casa para preparar un examen y estuve allí desde el mediodía y cuando llegaba la hora de comer no comía o literalmente comía raciones microscópicas. Harvey, creo que Nayra tiene una depresión de caballo gracias a Max.

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Si no os gusta, decidlo, no quiero perder tiempo escribiendo, no por nada, soy demasiado vaga :)

-Andrea➰