P.O.V. FADIL
Cuando termine de hablar con mi padre fui a mis aposentos y me quede dormido. Horas después escucho a Rasul — joven Fadil
—Pasa Rasul — ¿No piensa salir esta noche joven?
—Si voy a ver a mi bella flor — señor perdone mi intromisión, pero ¿esa mujer es apta para usted? —Si gracias a ella volví a casa y me casaré con ella —Rasul jadea — ¿ósea que gracias a esa mujer lo tenemos aquí? — si Rasul por ella estoy aquí
—Bueno Rasul gracias por despertarme y escucharme. —A la orden joven. Con eso sale de los aposentos. Me ducho y luego me visto, luego salgo hacia la salida hijo no vas a cenar me dice mi madre
—No madre voy de salida
—Lamya está aquí...
Freno mis pasos — Menos me quedaré con esa mujer aquí, buenas noches, madre.
Con eso camino hacia donde veré a mi diosa del desierto. Cuando al fin estoy en frente veo una fila de caballeros paso frente a ello e intentó entrar, pero no me dejan pasar — ¿por qué no puedo pasar? — está lleno joven, y si su nombre no está en la lista no puede pasar
— y como sabe usted que mi nombre no está en la lista
—Dígame su nombre joven — Fadil... Él abre los ojos hasta más no poder
— Pase señor y disculpe no lo reconocí— ingrese no sé cómo mi nombre para ahí, luego que recuerdo que mi querida Nahid lo habrá puesto.
Luego de horas viendo mujeres danzar bien, pero no se comparan a mi Nahid sale la misma mujer de las demás ocasiones y hablo y mi corazón salto.
DESDE LAS TIERRAS LEJANAS, PASANDO EL CALUROSO DESIERTO. PARA VENIR A HIPNOTIZARNOS SUS DE DIOSA PAGANA MOVIMIENTOS DE UNA DIOSA MISTERIOSA, CON USTEDES LA MISTERIOSA DIOSA DEL DESIERTO NAHID!
Las luces están apagadas y suena una música
Hadarah baila y hace unos movimientos que me dejan con la boca seca, en ningún momento ha dejado de mirarme a los ojos y sus movimientos son los más sensuales que yo he visto en mi vida, en el salón hay un silencio sepulcral. Todos la miran, pero ella solo me mira a mí, luego Hadarah baja de la tarima y viene hacia mí con uno movimiento que me está invitando hacer su amante cuando llega a mi pasa la bufanda por mi cuello y me danza en sima, yo la observo, sus caderas tienen un ritmo letal por Allah! Necesitaré un baño frío cuando salgo de aquí. Ella continúa bailando y matándome está provocándome, ella goza hacerme sufrir. Ella está sonriendo estoy seguro de eso. Por cómo me tiene acorralado porque sabe que no puedo tocarla por Allah! El ritmo que tiene en sus caderas me volverá loco, luego de casi matarme con sus movimientos me deja temblando como un puberto cuando llega a la tarima me da una mirada que me deja sin aliento, continúa moviéndose y puedo ver las prendas que le regalaron en el desierto, la música está por terminar. Hadarah me tira una de sus prendas, esa es una clara invitación hacer amante en secreto por el color de la prenda. Negro y se apagan las luces huelo la prenda y huele a ella y a mi perfume.
Cuando las luces prenden nuevamente aparece la misma mujer y dice mientras nuestra misteriosa bailarina se prepara para volver ahí lo dejo con las muchachas. Salen unas cuantas bailarinas y pasan los minutos y salen de la tarima las muchachas las luces se encienden y se escucha con —Ustedes Nahid y ahí está mi perdición.
Hadarah danzo nuevamente y sin apartar la mirada de mí, dejándome embobado y a su merced. Cuando finalizo el baile mi bella flor del desierto se esconde detrás de las cortinas y se retira yo inmediatamente me voy hacia los aposentos en los que sé que estará, cuando estoy por llegar escucho unas risas — ¿Hadarah estás loca, sabes lo que hiciste?
—Si lo sé
Entro ahí están todas las mujeres que danzaron, pero mi atención solo está en una específica Hadarah ella me observa y me pierdo en su mirada y olvido mi alrededor, cuando me doy cuenta de la noción del tiempo todas las demás muchachas se retiraron, miro a Hadarah en su mirada hay algo distinto, Hadarah camina hacia mí y se para en frente de mi
—mi flor... Intento hablar, pero no me deja posa sus dedos en mis labios — ¿Le gusto el baile? Yo solo asiento con la cabeza, sin poder hablar por la conmoción
—Qué bueno que le haya gustado porque solo para usted mi señor. —hace una pequeña reverencia, me sorprende porque eso solo los hacen las mujeres que están casadas, y me sorprende más cuando siento sus labios en los míos, ella no sabe que las mujeres árabes no hacen eso. ¿Qué le hicieron a mi Hadarah? — Pero no es que me esté quejando de esta su nueva forma picara, me gusta esta Hadarah atrevida le sigo el beso, nos separamos por falta de oxígeno y la saco para afuera y encontramos a la señora le digo que hoy llevaré a Nahid a su casa y no pone objeción y de camino a casa de Hadarah nos paramos a observar las estrellas la miro a los ojos y ella me abraza y me susurra —No me rompas el corazón y me sorprendo
—Nunca te lo juro por Allah! Seguimos caminando hasta llagar cuando llegamos mi corazón pesa por dejar a su amada. La beso y la despido en silencio. Me retiro después de que ella entra y cierra.
Narrador omnisciente.
Ellos que en la obscuridad de la noche había un siervo espiándolos. Llego a casa y fue a donde su amo —Señor ya sé dónde vive la mujer con quien anda el joven Fadil —está bien, buen trabajo.
— Yo iré a ver ¿Quién es esa que está sonsacando a mi hijo Fadil?
HADARAH
Cuando entro a la casa veo a la tía Nadia — Buenas noches, tía
—OH! No te sentí llegar mi niña, te estaba esperando para que habláramos de un asunto. ¿Cómo te fue en la tienda?
—Muy bien me divertí mucho, digo emocionada
—Se nota mira cómo te brillan los ojos. Me sonrojo
—Hadarah necesito decirte algo importante ven siéntate, la observo esperando a que hable. — Mi hija dio a luz, ella vive del otro lado del desierto y tengo que estar con ella, sé que ya me había ido, pero no te puedo llevar, ya que trabajas para la señora Amina.
—No te preocupes tía puedes ir en paz
—Bueno estando claro, quiero que te cuides sabes que muchas personas no toleran tu color y debes tener cuidado.
—Claro tía, voy a tener mucho cuidado le digo con una sonrisa para que no esté preocupada —pasa buena noche y que Allah te acompañe en tu viaje
—Parto mañana al amanecer, quizás no me veas al despertar.
—Bueno siendo así buen viaje— la abrazo ya en mis aposentos pienso en todo lo que sucedió hoy con Fadil, y con ese pensamiento me duermo
Cuando despierto el sol ya está afuera, lo que me da a entender que mi tía ha partido a su viaje con sus familiares, me paso la mañana en nada como a las diez la puerta suena me cubro el rostro y voy hacia la puerta y abro y está el mismo señor que vino la otra vez
—Buenas— dice él en árabe, solo asiento con mi cabeza en modo de saludo — El joven Fadil lo espera en su lugar secreto, Mi alocado corazón salta al oír el nombre de mi árabe
—Gracias, señor. Hablo emocionada él asiente y se retira, salgo de la casa y camino hacia las dunas del desierto a nuestro lugar secreto como lo llama Fadil. Llego y lo veo de espalda y le cubro el rostro con mis manos, él me tira en las arenas —Mi flor, mi hermosa flor del desierto. Me besa nos fundimos en un beso apasionado olvidándonos de costumbres y tradiciones, nos separamos por falta de oxígenos colocamos nuestras frentes juntas, luego besa mi cuello y va descendiendo cuando llega al escote de mi vestido regresa a besar mis labios, pero esta vez me besa con desesperación trato de seguir su ritmo nos quedamos sin aliento nos separamos pienso en hacerle lo mismo que me hizo beso su barbilla su cuello quiero atormentarlo, hecha la cabeza hacia atrás pongo las prácticas que leo en mis novelas lo pego más a mí y lo halo más hacia mí para sentir su cercanía, halo su pelo es cuando escucho a Fadil gemir y sonrió como tonta al verlo. Nos quedamos ahí en las dunas del desierto o nuestro nido de amor todo el día entre caricias y besos paso el día hasta que llegó la hora de despedirnos.
Así pasaron los días de la joven pareja entre beso y abrazos, sin percatarse de que eran vigilados entre las sombras por un hombre que en cuanto ellos regresaban él salía de su escondite maquinando como decirle a su señor lo que el joven hacía con la joven de hermosos ojos.
Hadarah había recibido cartas de su tía haciéndole saber como está con sus familiares, y ella se alegraba por ella Hadarah tenía una rutina entre ir a la tienda de la señora Amina y ver a su amor. Entre eso se le iba la mayor parte del día y en las noches bailar luego regresar a su casa y ahí dormir con una sonrisa pensando en Fadil.
P.O.V FADIL
—Por Allah! Esa mujer me va a volver loco, si es que ya no lo estoy —digo mientras estoy en mis aposentos, estoy decidido la voy a convertir a mi flor del desierto en mi esposa si eso haré iré a buscar un anillo, en este preciso instante para pedírselo hoy mismo pienso mientras voy hacia la puerta para ir a una de las joyerías del pueblo. Cuando abro la puerta veo a mi hermana con la intención de tocar me ve y abre los ojos. — hermana ¿qué deseas? —pregunto me siento pésimo desde que llegué no le he dedicado tiempo a mi hermana
—Padre quiere verte hermano
— ¿Ahora qué quiere padre? Digo ahora que lo pienso, sería bueno que me lleve a mi hermana para que me ayude a elegir el anillo para mi flor del desierto—Hermanita puedes luego acompañarme a ser un recado y solicito tu presencia ella me observa asombrada y sé que está sonriendo por la forma que tomaron sus ojos
—Claro hermano será un gusto hacerlo contigo, pero vamos padre nos espera y no es bueno hacerlo esperar tanto. — Dice mi hermana, camino al junto de mi hermana hasta llegar al despacho de padre, mi hermana me anuncia y se retira me deja con padre, solo me da un asentimiento con su cabeza y entro y veo a mi padre con otro señor ahora que lo noto es el padre de Lamya, saludo y me quedo de pie
—hijo ven acércate toma asiento junto a nuestro amigo Salín
—Lo siento padre, pero iba de salida cuando mando a llamar, así que diga ¿para qué mando llamarme padre?
—bueno hijo, aquí Salín quiere invitarte una cena, para celebrar tu regreso a nuestras tierras los dos me observan, hablo
—gracias señor Salín claro que aceptamos su invitación ahí estaremos todos para la celebración de mi regreso, con su permiso, señores, me retiro. Salí en busca a mi hermana para ir a comprar el anillo de mi flor del desierto, entro a la cocina y ahí veo a mi hermana y le hago señas para que me siga —hermano ¿para dónde vamos? Pregunta ella curiosa —Ven. La tomo de la mano ella observa nuestras manos unidas ella sabe que eso significa confianza — Vamos a una joyería a comprar una joya, quiero que me ayudes, caminamos en silencio, llegamos a la joyería más reconocida del pueblo y entramos. Se nos acerca un señor parece ser el dueño de ella
—Buenas ¿En qué los puedo ayudar señores? Pregunta él
—Quiero ver los anillos él se retira y mi hermana me mira
—hermano ¿te casarás con Layma? Me hierve la sangre cuando escucho eso —No hermana será con otra mujer, ya te la enseñaré más tarde. Ahora ayudadme a elegir una bella joya para mi flor del desierto. Luego de cómo una hora encontramos un bello anillo y salimos rumbo a la tienda donde trabaja mi flor del desierto, cuando llegamos entramos ahí está la dueña del lugar
—Buenas saludo ella se gira, me mira fijamente juraría por Allah! Que vi en sus ojos un brillo extraño pasar, pero lo descarto, ya que si digo eso me tacharán de loco — ¿me podría mandar llamar a Hadarah por favor? — Por supuesto joven, se retira. Pasado unos minutos sale mi flor del desierto, la veo mi corazón se agita al instante que la veo ella se acerca. Saluda
— ¿En qué puedo ayudarlos señores? Pregunta educadamente y hace que mi corazón brinque de orgullo— Hadarah ella es mi hermana, — ella me observa sorprendida sé que es por llamarla por su nombre
—Mucho gusto conocerla señorita dice Hadarah educadamente
— El gusto es mío, señorita Hadarah sonrió por la forma en que se tratan sé que ella no saben por qué las dos está ahí, así que
—hermana, Hadarah es la mujer que amo, y es la mujer por la cual regrese por ella estoy aquí. Ellas se miran unos segundos hasta que mi hermana da un paso y la toma de la mano esto significa que le tiene confianza, y me alegro mucho
_ إنه لمن دواعي سروري dijo mi hermana en árabe, ya que hablar en inglés no es su fuerte
_بالتساوي dice mi flor del desierto y mi hermana se sorprende por acento de Hadarah
Luego le explico, le hago señas a mi hermana para que me deje solo con mi flor del desierto ella me observa con pánico, ya que no es debido quedarse a solo la miro nuevamente sabe que no está a discusión, nos deja solos, cuando ya estamos solo me acerco a mi hermosa flor
—Mi flor del desierto cuanto te extrañe. Ella baja la mirada por lo cual sonrió la tomo por la barbilla le digo nos vemos en una hora y media en nuestro lugar secreto
Ella abre los ojos asombrados quieres decir algo, pero me aparto y vuelvo a decir —En una hora y media en nuestro lugar secreto
Ella solo asiente y salgo dejando mi corazón tras con mi hermosa flor del desierto
إنه لمن دواعي سرور es un placer
بالتساوي igualmente
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Pasión Bajo las Arenas del Desierto Arabico (Trilogía Pasión Y Cultura#1)
RomanceEn una sociedad donde el racismo es lo primordial. Nace un amor imposible. Un amor entre dos culturas. EL Bello, rico, roto y duro pero le gusta el desolado desierto para estar solo. Pero con un ardiente deseo en lo mas profundo de su ser, encont...