Paraíso oscuro: El diario de un chico solitario - Ziall Horlik

XIII

Miércoles 21 de Enero

Por la noche

“De: paraisooscuro@outlook.com

Para: Niall J. Horan

Asunto: Mensaje de texto

Hola nuevamente. Sé lo que piensas al respecto de estos mensajes, y también que estás preocupado por los últimos acontecimientos que te han sucedido en la vida. No lo sé todo, estoy al tanto de lo que puedo enterarme y eso no involucra más allá de Bridget Army. No soy miembro activo del grupo, pero sé mucho más que tú al respecto. Sé que te mata la curiosidad por encontrar las explicaciones a esos problemas que te acechan, a encontrar respuestas, y por sobre todo, verdades. Soy quien puede ayudarte, como alguna vez lo intentó… está en tus manos el depositar la confianza en mi nuevamente.

Solo quiero ayudarte, para que no vuelvas a caer, para que finalmente puedas levantarte. Quizás te cueste creer por mi mala redacción, pero te prometo que mis intenciones son las mejores. Si te digo más por acá, ambos sufrimos riesgos, y es probable que no creas en mi testimonio.

Tú decides: apenas estés seguro de que nos juntemos para contarte todo, me respondes este correo.

Se despide, alguien que aún te estima.”

Jueves 22 de Enero

Me pican las manos, me tiemblan los miembros y se me secan los labios. No sé qué responder, no sé a quién pedirle consejo, y mucho menos qué decisión será la mejor ¿es posible en este mundo asegurar el futuro? Hay gente que es poderosa a nivel monetario, que logra todo lo que desea sin un ápice de esfuerzo ¿qué les sucede a esas personas al paso de los años? Nos las encontramos en un ataúd, en la cárcel o en un psiquiátrico.

Yo no soy una persona poderosa. Ningún ámbito es capaz de ser cubierto, ni el dinero, ni la salud, ni la amistad, ni el amor, y para qué decir la inteligencia. Mi mente está atrofiada, los órganos que me mantienen vivo podrían dejar de funcionar, y el único destino posible para lo que queda de mi féretro será estar bajo tierra.

Sábado 24 de Enero

Hoy me he juntado con Harold, dice que tiene algo importante que anunciarme.

-          Me voy a España

Estábamos tomando café en un lugar de cuarta, cerca de su casa. Recuerdo perfectamente la cafeína recorrer mi mentón hasta la ya imposible de sucia mesa.

-          ¿Cómo es eso de que te vas a España? ¿Sabes español?

-          No tengo idea, con suerte un par de palabras. Es complicado.

“Como todo en nuestras vidas”, le reproché. Me molesta tanto tener que sacarle información a regañadientes a todos los que me rodean, que ya agoté mis energías para seguir intentándolo.

-          No quedé en la universidad, tampoco pienso intentarlo de nuevo. Tengo un tío en Córdoba, me dará un empleo y, si tengo suerte, podría partir con la música.

Ese es el mayor sueño de Harry: componer música. Quizás no amerite la fama, le basta con tener la pasta para poder vivir y olvidarse de todo lo que le tortura. Él siempre se recuerda a sí mismo que la mejor manera de sobrellevar los males pasados es alejándote físicamente de todo lo que te amarra a ellos y tratar de avanzar. Suena un buen consejo, lo intentaré luego de ver si le resulta.

Nuevamente me he quedado solo. Voy a ver si puedo pillar a Zain en alguna parte.

Lunes 26 de Enero