Entre Lobos [Joerick]

Yo no me enamoraba

Una semana había pasado desde aquel acontecimiento que golpeó fuerte al lobo.

Joel había enfermado.

Zabdiel se lo había advertido, si solo no hubiera sido así de rudo con Erick tal vez las cosas hubieran sido muy diferentes.

Ya llevaba más de la mitad de la semana enfermo y había fallado demasiado a la escuela así que hoy no le quedaba de otra que ir.

Se alistaba con la pereza emanente en cada uno de sus músculos, su lobo se encontraba con mucho dolor parecía que le habían dado una buena paliza pero obvio no era nada de eso

Al llegar a la escuela deseó no estar allí inmediatamente, se encontró con la peor escena que podía haber visto en toda su vida

Su lobo gruñó y chilló, no podía creer lo que estaba viendo, deseaba haberse quedado en la cama para no tener que haber visto esto

- son novios hace dos días- habló esa conocida voz atrás de él

Joel volteó y miró a su primo. Las lágrimas en sus ojos eran tan evidentes

- debemos salir de aquí Joel, vas a llorar y además no estás en condiciones de estar en la escuela

- ¡no!- gritó safándose de su primo- solo déjame- el nudo en su garganta era cada vez más grande.

Había perdido a Erick y no había vuelta atrás

- Joel no creo que sea buena idea que te quedes, puedes perder el control y no quiero eso- le tomó la mano- ven conmigo

- ¡¿no entiendes?! ¡Él...es mío!- rugió- ¡no dejaré que un estúpido venga y se lo lleve en bandeja de plata! Si me expulsan pues no importa pero no lo dejaré con él- suspiró- puede lastimarlo y no quiero eso

Zabdiel le miró por un segundo y luego bufó- si te metes a problemas yo no existo- cerró los ojos- los vampiros son fuertes pero recuerda que tus garras son muy filosas y ellos no sanan rápidamente si ellas entran en su carne- le guiñó un ojo y se fue

Ahora debía pensar muy bien lo que haría. No podía solo llevarse al pelinegro ¿o si?

Empezó a caminar con rapidez hasta que vio algo que hizo a sus pies detenerse frenéticamente.

Su lobo rugió para luego gruñir dándole a Joel el impulso para seguir caminando.

- Erick- llamó su atención para que se dejaran de besar

Erick rodó los ojos y miró a Joel- ¿qué quieres?- habló evidentemente fastidiado por la interrupción

- quiero hablar contigo- apenas pudo decir. Que bueno que el vampiro no podía oler su nerviosismo y coraje mezclado porque si no todo se hubiera ido a la mierda.

Evidentemente la mandíbula del vampiro se tensó y Erick lo notó ¿debía ir?

Joel al ver que Erick no contestó alzó su mano en dirección de la del pelinegro pero el vampiro fue más rápido y tomó la mano de Joel deteniéndole en el impulso

Erick dirige la mirada a la mano de ambos y se acerca al oído del vampiro

- tranquilo Johann estaré bien- le guiña el ojo y el chico suelta al lobo

Johann susurra algo en el oído de Erick pero Joel ha podido claramente lo que le ha dicho "si se pasa solo grita que yo estaré pendiente de ti"

Erick asintió y miró a Joel- vamos- rodó los ojos.

Ambos empezaron a caminar, Joel estaba muy nervioso mientras Erick no sentía nada solo caminaba por obligación

Llegaron a los baños y entraron, Joel atrás de Erick. Al estar adentro Joel se puso enfrente de Erick

- necesito que hablemos- Erick tragó duro. Joel se miraba muy cansado, las ojeras lo delataban era evidente que no había dormido durante varias noches

- ¿y bien?- le animó a que continuara

- Erick me estoy muriendo lentamente- miró el suelo- tú...lo besas y eso...me enferma...me debilita. Estar lejos de ti me debilita

- tú eras el mujeriego no yo, tú eres él de solo un acostón no yo así que no creo que te estés muriendo ¡por mi culpa!- gritó lo último

El rizado cerró sus manos volviéndolas en puños más al ver el miedo reflejado en los ojos de Erick solo suspiró y trató de relajarse

- yo...no pensaba ¿si?- se acercó más al pelinegro el cual por reflejo retrocedió también- yo estaba acostumbrado a no sentir Erick pero después apareces tú y mueves toda mi puta vida a tu antojo- ambos dieron tres pasos más, Joel hacia adelante y Erick hacia atrás- así no se puede porque tú lo hiciste sin importarte que yo no me enamoraba- sonrió con amargura- yo era un chico de un polvo nada más ¿y sabes qué quiero ahora?

El pelinegro negó reteniendo la respiración en cierta forma algo dentro de él se alegraba que Joel sintiera algo por él

- ahora no quiero solo acostarme contigo- volvió a reír negando la cabeza- ¿y sabes qué es lo peor?- el chico volvió a negar- ahora quiero llevarte el desayuno a la cama quiero tener cachorros contigo y quiero vivir un estúpido cuento de hadas pero hay algo Erick, siempre hay algo- caminó más acorralando a Erick contra la pared

Erick respiró con dificultad y sintió la respiración de Joel justo en sus labios

- ahora me estoy muriendo mientras tú te besas con un vampiro estúpido el cual el día de mañana puede lastimarte y lo peor es que yo me sentiré culpable por no haber evitado esto

- pues solo déjame, yo no te culparé de nada

- ¡¿es qué no entiendes cierto?!- gritó desesperado- ¡Erick él solo te usa!- golpeó la pared

- él no lo hace- absorbió el aliento fresco de Joel, olía a menta

- ¿no quieres nada conmigo cierto?- aquella pregunta iba cargada de dolor. El pelinegro negó en señal de no querer nada con él- bien- cerró los ojos- repite esto entonces- a este punto sus labios ya casi se rozaban- yo Erick Colón rechazo a Joel Pimentel como mi pareja destinada

Erick respiró profundo, debía hacerlo igual las cosas con Joel nunca hubiesen funcionado

- Yo Erick Colón rechazo a...- las palabras quedaron en su boca a causa del beso que Joel le había dado.

Por puro placer o por amor nunca se sabría pero ahora sus bocas estaban atadas la una a la otra y no deseaban separarse ni por un segundo.