Entre Lobos [Joerick]

Si me Abrazas

Un toque en la puerta hizo que Erick se limpiara las lágrimas y que Joel se levantara del suelo.

El rizado abrió la puerta. Chris estaba de otro lado.

- Joel...espero no interrumpir pero es que...- se rascó la nuca

- vienes por Erick- le terminó la oración. El castaño asintió

Erick se paró de la cama y caminó hacia la puerta intentando salir de aquella habitación lo más pronto posible.

Joel al ver las intenciones del pelinegro le detuvo poniéndole una mano en el pecho.

- ¿puedes quedarte esta noche?- habló lo más suave posible para que Chris no viera lo destrozado que estaba. Erick le vio aterrado- si quieres- bajó la mirada

Erick sintió que el corazón se le iba a salir. ¿Quedarse con Joel? ¡¿Los dos solos?! No. Imposible.

El pelinegro levantó la vista para mirar al rizado. Cuando lo hizo su corazón se congeló. Vio una lágrima caer por la mejilla de Joel

"Joel está llorando" le dijo algo en su interior "acaricialo" volvió a hablar aquella estúpida voz en su cabeza.

Erick no pudo evitar llevar su mano a la mejilla de Joel. Este se asustó ante el tacto pero cuando sintió que era Erick su lobo ronroneó.

- amm...- Chris estaba odiando estar allí en este instante. Estaba interrumpiendo a la "parejita"- lamento interrumpir pero...tengo que saber si Erick se va o se queda

Joel levantó la vista para ver a su chico. Este le miraba con ternura. Ya no tenía la mirada de miedo, eso era algo bueno. El lobo del rizado saltó de alegría. Su chico ya no estaba asustado.

Erick le miró a los ojos por un segundo y luego miró a Chris

- me quedo- aseguró. Joel abrió los ojos como platos. ¿Erick se quedaría? Nunca se había sentido tan feliz en la vida

Chris asintió y se fue

- ¿ya no tienes miedo?- preguntó un poco avergonzado

- no. Creo que no. Espero que no- dijo con un poco de duda

- hueles a preocupación- dijo al oler la preocupación de Erick llenar toda la habitación

Erick bajó la cabeza y movió las manos nerviosamente

- ¿vamos a dormir en la misma cama?- el pelinegro no entendía porque se sentía así al dormir con Joel. Él ya se había acostado con muchos chicos, aunque no estaba diciendo que se acostaría con Joel pero dormirían en la misma cama ¿no?

Joel sonrió y le tomó de la mano para llevarlo a la cama. Erick estaba helado como un hielo. Parecía muerto.

- estás muy frío- habló el rizado- ven- le señaló la cama- acuestate y solo estaré allí- señaló una silla que estaba cerca del escritorio

Erick entró a la cama como pudo. Joel observó cada movimiento del pelinegro y no estuvo satisfecho hasta que le vio dormido.

Se sentía dichoso. Al amanecer toda su cama estaría cubierto por el olor de su chico.

Intentó dormir pero no lo logró. Su lobo estaba inquieto y el también, ambos querían entrar en ese cama y abrazar a Erick y no solo observarlo mientras duerme.

Joel suspiró y se levantó de la cama para poder usar el baño. Justo empezó a dar los primeros pasos cuando escuchó una dulcesita voz

- Joel...- habló el pelinegro medio dormido-¿...te vas?- sonó triste

Joel sonrió y caminó a la cama. Vio a Erick con un ojo cerrado y el otro abierto. Era tan lindo.

- no me voy- habló suave- solo voy al baño

Erick se acurrucó más en la cama y estiró un poco el labio. Eso hizo que a Joel se le volcara la mente.

No podía pensar cosas pervertidas pero ver a Erick así no ayudaba mucho.

Suspiró y luego acarició la mejilla del pelinegro. Su lobo gritaba para que lo besara pero Joel no haría aquello a menos no sin el consentimiento de Erick

Erick se removió un poco y luego sonrió. Joel vio como el cuerpo de Erick se acurrucó más cerca de él.

Retiró su mano y escuchó un pequeño sonido salir de los labios del pelinegro

- sigue- ordenó

- ¿no estás dormido cierto?- una pequeña risita salió de Joel

- tal vez...- medio sonrió

Joel acarició la mejilla de pelinegro de nuevo y le miró, se veía tan lindo

- te amo Erick- le susurró

Una sonrisa traicionera se formó en los labios del pelinegro y abrió ambos ojos.

- creo que ya no podré dormir- hizo un puchero- me despertaste- se quejó

- yo...lo siento no quise...- Erick miró a Joel levantando una ceja

- ¿crees que todavía tengo miedo?- preguntó un tanto triste

- tal vez...- Joel bajó la mirada

- si me abrazas tal vez se me quite- le guiñó un ojo

Joel no pudo sonreír más de que ya estaba. Su corazón latía sin parar, estaba acelerado

- ¿no bromeas?-habló aún sin creerlo

- no- sonrió tímido

Joel dio un salto y se acostó al lado de Erick. Le rodeó la cintura y se quedaron viendo a los ojos por unos instantes

- ¿en verdad me amas?- preguntó el ojiverde

- mucho- susurró Joel lamiéndose los labios

Erick vio aquel acto y decidió poner fin al espacio que los separaba uniendo sus labios formando así un muy cálido beso