♥Simplemente Escritos♥

✨Tú✨

Cuando mi corazón grita en esos momentos de soledad y desesperación, de alguna forma, lo encuentro gritando por ti. La idea me carcome muchas veces: ¿Qué haces?, ¿Cómo estás?, ¿Estás bien?, ¿Estás llorando?, ¿De alguna forma te sientes tan solo cómo yo?, ¿Ya comiste?, ¿En qué piensas?

Sin darme cuenta paso la mayor parte de mi tiempo pensando en ti, en lo que haces y piensas; como si eso ocultara el hecho de que estás demasiado lejos de mí. Es graciosamente lamentable, mientras tú estás allá siendo mi todo, yo estoy aquí siendo tu nada.
Cuando estoy en mis momentos de bajones, esos en los que te sientes la persona más miserable del mundo aunque no lo seas, y cuando te sientes la persona más sola del mundo, aunque no lo estás, aunque tengas a medio mundo al lado tuyo; entonces me pregunto: ¿Qué pasa contigo cuando te sientes así?, ¿Tienes a quién recurrir?, ¿O al igual que yo dejas que te consuma hasta que de alguna forma se termine? Si pudiera, me gustaría ahorrarte todos los momentos feos de la vida, toda la injusticia y el dolor.

Me gustaría poder hacerte sentir mejor, aliviar tu dolor así como tu alivias los míos. Pero es mucho pedir, ¿Cierto?

Deseo profundamente poder provocar en ti lo que tu provocas en mí; así entenderías todo el dolor, alegría y amor. Quisiera ser la única que puede quedarse para amarte, quisiera que mi amor fuera suficiente, pero... ¿Qué puedo hacer? Cuando no importa cuánto te amo, la realidad de lo insignificante que soy en tu vida, podría no cambiar nunca. Me he dicho a mí misma que a pesar de eso, a pesar de todo, me quedaré para amarte... pero no es tanto una decisión, ¿Sabes?, es que simplemente ya no puedo no hacerlo, no puedo no apoyarte, no puedo no amarte, no después de todo lo que has hecho por mí; no después de que mi corazón decidió hacerte la cura, mi motor para seguir. Tal vez yo solo era una tonta que necesitaba una excusa para volver a sonreír, a vivir; tal vez... pero creo, no, estoy segura, de que de alguna forma, aún sin conocerte, esa "excusa" tenía tu sonrisa, tu nombre, tu apellido, tu forma.

Es que juro que buscaba y buscaba una razón para seguir, y cuando creí que no la encontraría, llegaste; cuando había dejado de buscar, apareciste, y no eras nada de lo que buscaba, eras, eres mejor.