Odio Amarte (AV, CV & Tú) •Editando• |PAUSADA|

#17

Narra Dhasia

¿Será buena idea declararle mis sentimientos al chico que me gusta? Espero que no, porque quiero hacerlo.

La verdad es que Diego ha despertado en mí un sentimiento indescriptible desde el día que lo conocí, y durante estos meses me convencí de que quiero intentar algo con él.

Por mi castañito soy capaz de todo, si es necesario yo le pediré que sea mi novio, y es que ya no aguanto más estas malditas ganas de abrazarlo, besarlo y gritarle al mundo que estoy saliendo con el mejor tipo que me pude encontrar.

Mientras ensayo por última vez aquí en el baño (porque abajo no podría), pienso que no importa lo que diga, si me acepta que bien, sino pues igual. Dhasia Fernanda, ¿a quién quieres engañar? Si el castañito te manda por un tubo te deprimirías, no dejarías de tragar chocolate y helado, y escucharás todo el tiempo Amorfoda (canción de Bad Bunny). Agh, cállate... Ok, estoy lista.

Abrí la puerta del baño un delicioso perfume incomparable inundo mis fosas nasales. Aquel chico me acorraló a un lado de la puerta y atacó mis labios con mucha pasión y... amor.

A pesar de que no nos veíamos, sabía que era mi lindo crush, que con una sonrisa por más invisible que parezca me enamora y hace que todos los días tengan color.

Seguíamos besándonos, yo tenía mis manos en su cuello y él tenía las suyas en mi cintura. Cuando posó sus manos ahí, sentí un escalofrío ya que toco mi piel y él estaba frío.

Sin detenernos, caminamos hasta una habitación, creo que es la de huéspedes porque esa nunca está cerrada con seguro. Entramos y me recostó en la cama. Él se apoyó con sus manos para no dejarse caer completamente encima de mí.

Nos separamos solo un poco para tomar oxígeno, juntamos nuestras frentes con los ojos cerrados.

Estuvimos así unos segundos, hasta que decidió romper el silencio:

Xxx: Hermosa, perdóname por lo que te hice –entendí que se sintió apenado de haberme besado así–

Dhasia: No te preocupes, lo entiendo

Xxx: No puedo más... estoy enamorado de ti –soltó sin rodeos–

Dhasia: Yo también, desde que te conocí

Xxx: Entonces sé mi novia

Dhasia: Por supuesto que sí –volvió a besarme–

La intensidad aumentó al igual que la temperatura. Comenzamos a quitarnos las prendas. Mi blusa por allá, su camisa por ahí, los zapatos por acá. Así hasta quedar solo en ropa interior.

Estaba a nada de cumplir dieciocho años, me sentía lista para dar el siguiente paso, así que cuando besaba mi cuello y se detuvo un poco le dije:

Dhasia: Estoy segura de que eres el mejor para tener mi virginidad

Quitó mi sostén y se dedicó a besar mis pechos. Cada vez que lo hacía mi espalda se arqueaba, ¡amo esta sensación!

Ahora yo quise tener el control un poco. Me subí a horcajadas sobre él y empecé a besar desde su lóbulo hasta su cuello, acariciándolo también con mis manos.

De un segundo a otro, de nuevo yo estaba debajo de él, ambos con la respiración agitada como si hubiéramos corrido un maratón. Pues no están corriendo un maratón, pero si están haciendo muuucho cardio, ¿no crees? Si, y me encanta.

Otra vez nos estábamos comiendo los labios, yo arañaba su espalda por lo que él gruñía de excitación.

De pronto escuchamos como se abrió la puerta y encendieron la luz, dejándome ver a las dos personas que menos imaginé.