Carta 10.1

35 8 2
                                    

Estaba siendo un buen día, y en el ultimo instante recibí un confortador abrazo de André uno de mis mejores amigos, pero de repente siento un leve codazo en mi brazo y giro encontrándome con la mirada seria de mi amiga, me hace una seña disimulada para que mire hacia un costado...al momento de hacerlo desee huir, pero la mano firme de mi compañera me imposibilitó hacerlo. Tu mirada era dura, ni siquiera intentaste ocultar tu disgusto, deseaba con todas mis fuerzas que desviaras tu camino, que tus pasos fueran directo hacia la otra dirección...pero no fue así...te posicionaste frente a mi, quitaste la mano de mi amigo y te pusiste frente a él evitando que hiciera contacto visual conmigo, me miraste fijamente por unos segundos que se sintieron horas, tragué duro, tu agarre en mi muñeca dolía...verte a los ojos me lastimaba, definitivamente no me esperaba lo que ocurrió...tus labios rozaron mis comisuras suavemente, sentí mis ojos arder, te dirigiste a mi mejilla, tu beso se sintió como ácido sobre mi fría piel, quemaba, mi corazón no hacía mas que sangrar...tan pronto como te alejaste de mí te observé, intenté buscar algún signo de amor, quizás arrepentimiento, pero no hallé nada, tus ojos yacían vacíos...sin ninguna expresión soltaste mi muñeca la cual casi extraña tu agarre, me diste una ultima mirada y te alejaste de mi...sentí una lagrima desprenderse y lo supe...seguía enamorada de ti, pero no te recuperaría jamás.

MariposaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora