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Todo se veía muy colorido, pero a la vez muy raro.

Los árboles no eran los típicos color marrón y verde si no que eran de color blanco y rosa, un estilo de anime o japonés.

-Estoy en Japón? — el albino reviso todo a su alrededor analizando todo hasta que sintió algo en su cuerpo pesado y que le apretaba. Dio su mirada ahora hacia su cuerpo.

Era una especie de vestido de según recuerda parece japonés para hombre, era de color dorado y lo que lo apretaba era un suave listón blanco, estaba demasiado ajustado por la zona de sus caderas.

Pero entonces se enfocó en otra cosa, vio a Freddy, pero no como siempre lo ve.

El llevaba un kimono de color azul turquesa junto a estampados de flores color blanco, no tenía su típica coletilla si no que su cabello lo llevaba suelto haciendo que le llegue por los hombros, en este llevaba colgando una decoración de flores con hojas, como los que se ponen las chicas en un carnaval, se veía hermoso a la vista del albino.

Aquella belleza volteó su mirada esta vez viendo que el albino lo observaba muy rojo y con casi saliva saliendo por la comisura de sus labios. El albino no se daba cuenta de cómo se quedaba mirando al castaño, solo se quedaba viéndolo como si fuera algo muy valioso, y en verdad si era muy valioso para el.

El castaño sacó una pequeña risita por lo gracioso que se veía el que lo miraba. Entonces el albino reaccionó para ir hacia el y saludarlo, no sabia que pasaba, pero de la nada tomo la mano del castaño para darle un beso en esta. El castaño volvió a sonreír. El albino estaba encantado por verlo así de adorable.

Ambos comenzaron a hablar y conocerse, parecía la escena a un recuerdo suyo. Ese recuerdo era cuando conoció al castaño, la escena era casi parecida - a excepción del beso en la mano- casi podría asegurar que estaba en ese mismo momento.

Entonces todo se volvió distinto.

El albino no sabia que hizo, pero tomo de las caderas al castaño para acercarlo más a él, tomo su mentón para acariciarlo un poco hasta que tocó los labios y ahí comenzó a acercarse para juntarlos con los suyos.

El castaño no rogaba, no decía nada, no se quejó, solo lo abrazo por el cuello y acercó también sus labios hacia los de él.

Al unirse pudieron saborear el sabor del contrario, cual fue esta vez? Leche con chocolate, sabores que nunca se separarían o al menos eso querían, pero como todo ser humano tiene desventajas y esa era que tenían pulmón para respirar y estos ya exigían oxígeno, pero ambos no querían separarse, se deseaban, pero no podían.

Ambos se separaron para recuperar aire, pero ambos a los pocos segundos de conseguir se volvieron a unir en un beso.

La escena para muchos es cliché, demasiado se diría, pero importa eso? Pues a ellos no les importaba eso, ellos solo disfrutaban en momento.

Querían seguir, no querían parar, querían seguir, quería continuar.

El albino despertó gracias al sonido de la puerta escuchando delicados golpes

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El albino despertó gracias al sonido de la puerta escuchando delicados golpes.

-Joven Gold, ya es su hora de ir a la escuela, arréglese para que baje a desayunar— dijo el sirviente personal del albino detrás de la puerta para después retirarse hacia sus labores.

-Agh...— refunfuñó el albino por volver a despertarlo y para empeorar, había soñado otra vez con esas escenas románticas que el que estaba ahí era el dueño de su corazón.

Sin nada que pueda hacer se levanto las sábanas para poder levantarse el y comenzar a prepararse para ir a por el castaño.

Desde que se conocieron se hizo costumbre el que ambos fueran a la universidad juntos, claro, el albino no era de que lo recogiera un autobús y por eso siempre iba el por el castaño desde la limusina.

Desde que se conocieron se hizo costumbre el que ambos fueran a la universidad juntos, claro, el albino no era de que lo recogiera un autobús y por eso siempre iba el por el castaño desde la limusina

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Un castaño dio un salto que lo hizo caer hacia el suelo desde la cama de arriba. La alarma lo despertó, pero el volumen estaba demasiado alto y por eso dio su acción de saltar.Pasos rápidos fueron los que se escucharon tras el sonido de golpe.

-Freddy?! Estás bien?! Donde está el ladrón?!?! — grito un azabache que apareció tras una patada fuerte en la puerta de la habitación, este llevaba una escoba en manos.

-N-no, estoy.... bien, solo me caí— dijo el castaño adolorido tratando de pararse.

-Ah, entonces..... NO VUELVAS A ASUSTARME ASÍ O TE DOY A TI EL ESCOBAZO !!!!!!-

-Gracias ..... por preocuparte por mi weon—

-Denada—

El azabache se retiró del lugar dejando al castaño solo. Este suspiro y fue a prepararse para la escuela.

Ambos despertaron alborotados, despertaron al mismo tiempo, sobre todo...

El mismo sueño

Sueños Juntos || Fredold || CANCELADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora