"¿Quién es Niall?"
Bueno, déjenme decirles que Josh se quedó con la duda por mucho tiempo... Ese día simplemente lo evadí hasta que se cansó de hablarme. Se molestó, y eso me hizo recordar a Ally... Ella siempre había sido así. Se molestaba mucho conmigo porque a veces la evadía con algunos temas con los que se ponía de verdad muy insistente.
No dejó de preguntarme, Hasta que hubo un tiempo que parecía haberlo olvidado y lo agradecía en serio....Pero un día, que no supe cómo entró a mi apartamento mientras yo tenía uno de mis momentos depresivos que me guardaba para cuando estuviera sola en mi habitación, y me vió llorando. Nisiquiera lo noté, y cuando ya estaba calmada e intentaba dormir, sentí que la cama se hundía un poco al otro lado. Me dí la vuelta rápidamente y ahí estaba él, Sentado mirándome completamente confundido. Me quedé callada porque estaba segura de que me había escuchado.
<<-_____-Dijo serio. Me volteé de nuevo como estaba antes casi con rabia. Vamos, lo último que quiero ahora es ponerme a pelear.-_____! -Repitió. Al ver que no le respondía, rodeó la cama y se arrodilló frente a mi.
-No quiero pelear. -Fué lo único que le dije.
-Yo no pienso hacerlo...
-No se te nota mucho -Le dije.
-¿Qué pasa? -Me evadió- ¿Por qué llorabas, ___?
-Jo... No es algo de lo que quiera hablar -Me quejé.
-¿Es que no confías en mi?
-Si confío en ti -Reí amargamente- Josh, Eres mi único amigo aquí.. ¿Cómo no iba a hacerlo?
-Pues me parece que no lo haces y a pesar de ser tu "Unico amigo", no sé ni mierda de tí antes de que te vinieras para Estados Unidos. Te juro que eso no es confiar en alguien. -Estaba molesto y a punto de gritar, sólo que no lo hacía porque yo estaba llorando. Hundí mi cara en la almohada porque en cada maldita palabra tenía razón. Todo era cierto.
Pasaron Diez, Quince minutos tal vez, y no me atrevía a mirarlo.
Sentí sus brazos rodearme y comencé a llorar aún más fuerte.
-Nena.. no quería gritarte. -Se lamentó- Perdóname, en serio no debí.
Lo miré por entre las sábanas
-Pero tienes razón. -Dije luego de alclararme la garganta. Era uno de esos momentos en los que no eres capaz de hablar sin que sientas que te quedas sin aire y las lágrimas salen solas.
-Ya, Ya.. Cálmate. No llores más. ¿Hablamos? -Asentí con la cabeza y lo abracé yo también hasta que me calmé un poco. Se levantó y me tomó la mano para que yo también lo hiciera, entré al baño, me lavé la cara y me arreglé el cabello en una moña. Me veía terrible.
Fuí a la cocina y allí estaba, Me senté en el mesón haciéndo ruiditos con mis uñas sobre la mesa y pronto tuve una taza de café al frente. Un café como sólo él sabía preparar.
-Ahora sí, ¿Puedes contarme qúe es lo que pasa contigo, _____? -Lo miré, y cogió una de mis manos entre las suyas, me pregunté cómo sabía que eso me daba confianza.
-A ver...-Le dí un sorbo a mi café- Lo primero que debes saber es que no vine a Los Angeles por mi propia voluntad ni a estudiar...-Él me miró confundido. Claro, eso era lo que todos pensaban de mi repentina visita.- Vine porque.. porque estaba amenazada. -Bajé un poco la cabeza clavándo la vista en la espuma de mi café, pero ya me imaginaba su expresión.
-¿¡Qué!? -Casi gritó. Justo como lo esperaba.
-Si, Pero toda la historia comienza desde... hace mucho tiempo. Unos diez años, quizá. -Me miró un poco confundido pero sin interrumpir. Aún sostenía mi mano- Fuí a un campamento de verano... Uno de esos a los que los padres mandan a sus hijos para deshacerse de ellos por lo menos unos días -Reí suavemente- Me hice amiga de un chiquillo, estabamos todo el tiempo juntos, pero un día tuvo que irse y lo último que supe de él fué que me dió un besito y salió corriendo para nunca más volver a verlo..-Suspiré y soplé un poco la espuma del café que había estado siendo torturada por mi mirada constante. Josh se quedó mirándome sin creer que ahí acababa la historia.
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Summer Love 2: Don't make this any harder
RandomNueve meses no fueron suficientes para que _____ Jones lograra superar a ese chico rubio con ojos maravillosamente hermosos. Pero tampoco lo fueron para él; No había día en que no se preguntara la razón de su partida, y aunque le costara admitirlo...